El voto antiBildu har¨¢ alcalde a Goia
El PNV recuperar¨¢ San Sebasti¨¢n por la suma de las diferentes voces cr¨ªticas con la izquierda 'abertzale'
Sociol¨®gicamente, San Sebasti¨¢n no es Gipuzkoa. Pol¨ªticamente, en cambio, capital y territorio lo han sido durante esta legislatura. Pero la actual situaci¨®n de poder tiende a su fin, como bien se teme EH Bildu. La cuerda parece romperse el pr¨®ximo domingo por la parte m¨¢s d¨¦bil: la alcald¨ªa de Juan Karlos Izagirre pasar¨¢ a manos de Eneko Goia. El PNV recuperar¨¢ as¨ª el poder municipal perdido despu¨¦s del mandato del desaparecido Ram¨®n Labayen. ?La principal raz¨®n? La oposici¨®n a la izquierda abertzale se ha conjurado para que as¨ª sea.
Los partidos constitucionalistas han allanado el camino del PNV a la alcald¨ªa donostiarra. Durante la campa?a ha sido relativamente frecuente escuchar a la candidata del PP, la debutante Miren Albistur, y al cabeza de cartel socialista, Ernesto Gasco, apelar al voto intencionado contra EH Bildu. Hay quien ha entendido esta apelaci¨®n como "un error estrat¨¦gico" de ambas formaciones. "Al hacerlo deval¨²an mucho su propio voto porque la gente entiende que este voto ¨²til contra la izquierda abertzale debe ser el PNV porque es el rival m¨¢s fuerte", admite un soci¨®logo universitario en la capital guipuzcoana.
La oposici¨®n no quiere que se repita la actual legislatura. "La ciudad se ha parado, no ha habido gesti¨®n en apoyo al presente y al futuro de San Sebasti¨¢n y solo han gobernado para los suyos con m¨¦todos impositivos sin tenernos en cuenta", se escucha desde las filas del PSE-EE, donde existen el convencimiento de que "las urnas van a castigar a EH Bildu porque se han dado cuenta de c¨®mo lo han hecho", agrega.
En cambio, desde el actual equipo gobierno se combate con hechos la implantaci¨®n de "un modelo diferente de hacer pol¨ªtica, incluso en tiempos de crisis", como recuerda cada vez que puede Izagirre. "Hemos conseguido introducir al vecino en las decisiones del Ayuntamiento, que est¨¦ presente en aquellas iniciativas que le son de su inter¨¦s y le afectan", a?ade. Y como ejemplo paradigm¨¢tico recuerda el proceso para reconducir en Martutene la canalizaci¨®n de las aguas que tantas p¨¦rdidas han causado con sus frecuentes riadas. "Han participado como una parte m¨¢s en la realizaci¨®n del proyecto", enfatiza.
El PNV recuper¨® su electorado en las auton¨®micas y conf¨ªa en mantenerlo?
Pero la oposici¨®n lamenta que "nos ha olvidado". En la candidatura socialista recuerdan que "nos ha llamado solo cuando le ha interesado", en alusi¨®n al alcalde. En realidad, la distancia ideol¨®gica entre Bildu y el resto se ha ido ensanchando conforme avanzaba el mandato. Adem¨¢s, la puesta en escena de algunos gestos pol¨ªticos como los interminables plenos y la doble vara de medir en algunos debates han enrarecido las relaciones.
"Todo empez¨® con mucha tensi¨®n" en referencia al inicio de la legislatura. Entonces, PSE-EE y PP se sintieron molestos por "la falta de arrojo democr¨¢tico" del PNV para unir sus votos y descabalgar de la alcald¨ªa a Bildu, vencedora inesperada en unos comicios celebrados en plena efervescencia de su reciente legalizaci¨®n. Los nacionalistas, al igual que en las Juntas Generales, hicieron o¨ªdos sordos sobre todo porque hab¨ªan encajado una severa derrota. La coalici¨®n abertzale aventaj¨® en casi cinco puntos al PNV y en casi dos a los socialistas que hab¨ªan gobernado con Od¨®n Elorza en los veinte a?os anteriores. Izagirre ha gobernado en solitario con ocho concejales, uno m¨¢s que el PSE-EE.
Ahora, ya nada se antoja igual. La oposici¨®n asegura que "la ciudadan¨ªa pide un cambio porque la ciudad no puede seguir paralizada". Posiblemente se ha reactivado el sustrato sociol¨®gico de una capital donde las posiciones soberanistas nunca hab¨ªan sido mayoritarias, aunque coincide con las expectativas electorales m¨¢s bajas de socialistas y populares.
El PSE-EE, no obstante, siente la liberaci¨®n pol¨ªtica de que Podemos est¨¢ ausente en San Sebasti¨¢n y ah¨ª fundamenta sus esperanzas. Adem¨¢s, la inclusi¨®n de independientes es entendida por Gasco como "un reflejo" de su apuesta y de la "conexi¨®n" del partido con la sociedad donostiarra, que ha permanecido cortocircuitada en las ¨²ltimas elecciones. Hasta cinco independientes figuran en la candidatura socialista, en la que sobresale como n¨²mero dos exedil de Alternatiba Du?ike Agirrezabalaga. Junto a ellas, el exconcejal de EA Harkaitz Mill¨¢n, Marisol Garmendia, actual concejal socialista, Bego?a Palos, t¨¦cnica en materia de comercio, y Fernando Rom¨¢n, perteneciente al movimiento vecinal del barrio de Txomin.
Los populares, en cambio, tratan de capear el temporal al que se exponen por los efectos derivados de la acci¨®n del Gobierno Rajoy en la situaci¨®n econ¨®mica, el bajo conocimiento todav¨ªa de su nueva candidata y los pu?ales internos cruzados durante la elecci¨®n de su nueva cabeza de lista. Miren Albistur sabe el riesgo que asume y su principal consolaci¨®n ser¨¢ que Izagirre no contin¨²e como alcalde.
As¨ª las cosas, toda la responsabilidad para el cambio real recae en el PNV. Los nacionalistas manejan desde hace semanas la fundada sensaci¨®n de que van a ganar en San Sebasti¨¢n. En su an¨¢lisis incluyen el l¨®gico desgaste de Bildu en el Ayuntamiento y "el hartazgo de su estilo, de su imposici¨®n". Y lo acompa?an de la referencia m¨¢s propicia que suponen las ¨²ltimas elecciones auton¨®micas de 2013, donde los nacionalistas fueron el partido m¨¢s votado en la capital guipuzcoana. La rehabilitaci¨®n en las urnas fue notable porque aumentaron casi 11 puntos con relaci¨®n a las locales. En octubre de 2012, EH Bildu se qued¨® en el 21,99 %. Como gusta recordar a la candidatura de Goia, el PNV fue la opci¨®n m¨¢s votada en la mayor¨ªa de los barrios, principalmente en el Centro y el Antiguo, mientras apenas seis votos le separaron de la coalici¨®n soberanista en la Parte Vieja, escenario durante d¨¦cadas del radicalismo.
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