La exportaci¨®n a Europa relanza la industria catalana de las dos ruedas

Las revoluciones vuelven a aumentar en el sector de la moto en Catalu?a. Los fabricantes siguen lejos de los n¨²meros de antes de las crisis, pero ya el a?o pasado constataron un aumento de las ventas: 125.084 unidades frente a las 107.267 del a?o anterior. Las perspectivas para este curso tambi¨¦n son buenas. Las empresas se han aupado en la exportaci¨®n ¡ªsobre todo, a pa¨ªses europeos¡ª para remontar el vuelo, aunque la recuperaci¨®n del mercado espa?ol tambi¨¦n ha ayudado a aumentar la facturaci¨®n del sector, que ve en el elevado importe del impuesto de matriculaci¨®n un lastre a su remonte.

Las exportaciones ¡ªen particular, las ventas a pa¨ªses europeos como Francia y Alemania¡ª han sido fundamentales para que aumente la producci¨®n de los fabricantes de motos urbanas, como Rieju. ¡°En 2007, fabric¨¢bamos 20.000 motos al a?o. Con la crisis bajamos, hasta poco m¨¢s de 5.000 en 2013. Un a?o despu¨¦s volvimos a las 8.000. Y este a?o esperamos llegar a las 10.000¡±. El relato de Jordi Riera, consejero delegado de Rieju, resume la situaci¨®n de buena parte de las empresas que han sobrevivido a la crisis de la industria catalana de las dos ruedas.

Riera atribuye el aumento de las ventas de esta firma, ubicada en Figueres (Girona), a ¡°la recuperaci¨®n de la econom¨ªa europea¡±. La compa?¨ªa exporta el 90% de su producci¨®n. La facturaci¨®n, asimismo, deber¨ªa alcanzar los 15 millones de euros al cierre de 2015, frente a los 12 del a?o anterior.

Tambi¨¦n han notado la mejor¨ªa los fabricantes de motocicletas de fuera de carretera, como Montesa Honda. Esta es la tesis de Josep Pal¨¤ Sibila, gerente de Cl¨²ster Moto, organizaci¨®n que agrupa a las compa?¨ªas del sector. Pal¨¤ tambi¨¦n apunta a que ¡°la apuesta por el producto propio¡± ha contribuido a que estas firmas se hagan un lugar en el mercado.

Algunos de los grandes fabricantes que sufrieron la deslocalizaci¨®n tambi¨¦n recuperan fuerzas. Montesa Honda, marca que traslad¨® parte de la producci¨®n de Santa Perp¨¨tua de Mogoda (Barcelona) a Italia en 2010, prev¨¦ aumentar su producci¨®n en Catalu?a en un 60%. La compa?¨ªa fabric¨® el a?o pasado ¡°m¨¢s de 1.200 unidades¡± de modelos de trial como la Cota, seg¨²n la empresa.

Otros jugadores en el mercado de las dos ruedas, sin embargo, tambi¨¦n han puesto su mira en Latinoam¨¦rica. Es el caso de Sherco, multinacional francesa especializada en modelos de trial y enduro. La compa?¨ªa, que cuenta con una f¨¢brica en Caldes de Montbui (Barcelona), comercializa su producto en pa¨ªses como Brasil, Chile o Colombia, explica Victor Colomer, responsable de producci¨®n.

¡°Detr¨¢s de la mejora del mercado hay una mejora de la coyuntura econ¨®mica del pa¨ªs¡±, sostiene Jos¨¦ Mar¨ªa Ria?o, secretario general de la patronal Anesdor. Ria?o sit¨²a en 2014 el inicio de la remontada. Al cierre de este a?o las empresas del sector comercializaron 125.084 unidades en Espa?a, frente a 107.267 en 2013, seg¨²n Anesdor. Una bocanada de aire fresco en un sector cuyas ventas rozaban las 400.000 unidades antes de la recesi¨®n. Ria?o atribuye parte del cambio a la mejora ¡°de la confianza del consumidor y el empleo¡±.

Todo ello, pese a que la administraci¨®n p¨²blica no ha ayudado a la marcha del sector, asegura el dirigente patronal, quien apunta a que el aumento en la edad para sacarse el carnet de ciclomotor (de 14 a 15 a?os) en 2008 redujo su segmento del mercado ¡°a la m¨ªnima expresi¨®n¡±. De 126.124 a 14.688 unidades en siete a?os, seg¨²n la patronal. Ria?o tambi¨¦n critica el peso de tributos como el de matriculaci¨®n en el importe de una nueva moto, que ¡°suponen m¨¢s del 40% del precio¡±.

El sector, asimismo, es testigo del nacimiento de fabricantes de bicicletas el¨¦ctricas como Torrot y Bultaco. Este ¨²ltimo, que a partir de julio empezar¨¢ a comercializar la motobike Brinco en sus tiendas, prev¨¦ vender ¡°durante el resto del a?o 1.000 unidades¡± de este veh¨ªculo, a medio camino entre la bicicleta y la moto, avanza Jos¨¦ Antonio Garv¨ªa, director general de Bultaco. Sin embargo, el futuro de estas nuevas ense?as es a¨²n incierto. En parte, por el precio de estos veh¨ªculos. Una motocicleta convencional ¡°puede costar 1.825 euros¡±, menos de la mitad de los 4.000 o 5.000 euros de una el¨¦ctrica, explica Pal¨¤. En el caso de la Brinco, alcanza los 4.800 euros.