La Fiscal¨ªa investiga la destrucci¨®n de bienes hist¨®ricos en Canalejas

La Fiscal¨ªa de Medio Ambiente y Urbanismo investiga la destrucci¨®n de patrimonio hist¨®rico ¡ªprotegido como bien de inter¨¦s cultural¡ª en las obras que lleva a cabo el Grupo Villar Mir para convertir el complejo de edificios conocido como Canalejas, en la madrile?a calle de Alcal¨¢, en un centro comercial y un hotel de lujo. El Ayuntamiento paraliz¨® una parte sustancial de las obras en marzo, y desestim¨® en mayo el recurso interpuesto por la constructora, seg¨²n el informe elaborado el 25 de mayo para la fiscal¨ªa, al que ha tenido acceso EL PA?S.

El ¨¢rea municipal de Urbanismo recibi¨® el pasado 4 de mayo, cuando a¨²n gobernaba Ana Botella (PP), un oficio de la fiscal¨ªa que requer¨ªa informaci¨®n sobre la paralizaci¨®n de las obras acordada en marzo. Sin embargo, la investigaci¨®n del Ayuntamiento se remonta a varios meses antes.

Villar Mir compr¨® en diciembre de 2012 al Banco Santander, por 215 millones de euros, los siete edificios ubicados en el n¨²mero 1 de la plaza de Canalejas, el n¨²mero 7 de la carrera de San Jer¨®nimo, y los n¨²meros 6, 8, 10, 12 y 14 de la calle de Alcal¨¢. Planea unirlos ¡ªcon una obra valorada en otros 285 millones de euros¡ª para construir un centro comercial, un hotel de cinco estrellas (que gestionar¨¢ la cadena Four Seasons) y 25 viviendas de lujo.

Tras la compra, el Gobierno regional (PP) limit¨® la protecci¨®n como Bien de Inter¨¦s Cultural a la primera cruj¨ªa y cubierta del edificio de Canalejas, 1, y a la primera cruj¨ªa y patio de Alcal¨¢, 14. Y el Ayuntamiento rebaj¨® el blindaje de todos los edificios para circunscribirlo a las fachadas.

Demolici¨®n ¡°no autorizada¡±

En enero de 2014, el proyecto arquitect¨®nico del Estudio Lamela se plasm¨® al fin en una modificaci¨®n del Plan General de Ordenaci¨®n Urbana. Y en marzo de 2014 se empez¨® a tramitar por fases la licencia municipal de obra.

En julio de 2014 se autoriz¨® la fase 0 para la demolici¨®n de las ¨¢reas no protegidas, que concluy¨® en Navidades. En febrero de 2015 se autoriz¨® la fase 1 para cimentar, que estar¨¢ concluida a finales de este a?o. Y queda por autorizar la fase 2, la licencia definitiva para construir el complejo, que hoy por hoy est¨¢ paralizada tras considerar la Comisi¨®n Local de Patrimonio Hist¨®rico (integrada por el Gobierno regional y el Ayuntamiento) que el proyecto ha ido m¨¢s all¨¢ de lo permitido para unos edificios protegidos.

Pero antes de llegar a ese punto, el Ayuntamiento ya se hab¨ªa dado cuenta de que algo iba mal.

Durante una inspecci¨®n el pasado 2 de octubre, los t¨¦cnicos municipales comprobaron que se hab¨ªa iniciado la demolici¨®n de acuerdo con la licencia de fase 0. Se inform¨® de ello a la fiscal¨ªa, que hab¨ªa abierto unas diligencias informativas para monitorizar la obra. En febrero de 2015, una vez autorizada la fase 1, los t¨¦cnicos efectuaron una nueva inspecci¨®n de la obra, y fue cuando detectaron ¡°una serie de actuaciones no autorizadas¡± que afectaban a elementos calificados de bienes de inter¨¦s cultural.

El 26 de marzo, el ¨¢rea municipal de Urbanismo suspendi¨® las obras al detectar la demolici¨®n de pilares, forjados, entrevigados y escaleras pertenecientes a las zonas protegidas. Esa suspensi¨®n solo afectaba a una parte de la obra, que Villar Mir cifr¨® en el 10% del complejo. De hecho, el Ayuntamiento dio el visto bueno a la segunda parte de la fase 1 pese a las irregularidades detectadas.

La constructora present¨® un recurso de reposici¨®n contra la orden de suspensi¨®n, pero el Ayuntamiento lo desestim¨® el 11 de mayo. Apenas unos d¨ªas antes, Villar Mir hab¨ªa solicitado la legalizaci¨®n de las obras, una decisi¨®n que debe tomar la Direcci¨®n General de Patrimonio Hist¨®rico de la Comunidad de Madrid.

En su informe a la fiscal¨ªa, el Ayuntamiento ve viable esa legalizaci¨®n de las actuaciones irregulares, lo que permitir¨ªa levantar la orden de paralizaci¨®n: ¡°Los elementos demolidos sin licencia se describen como no originales y/o como manifiestamente deteriorados. En alg¨²n caso, las declaraciones de bien de inter¨¦s cultural describen esos elementos como ¡®carentes de inter¨¦s¡¯. Consiguientemente, esas actuaciones pudieran ser compatibles con las condiciones de protecci¨®n del edificio¡±.