Los toros vuelven a San Sebasti¨¢n
Tras casi tres a?os sin festejos, hoy se repite la historia vivida en 1998 cuando Illumbe hizo olvidar la ausencia del viejo Chofre Donostia alberga corridas de forma estable desde 1852 y la Semana Grande naci¨® para potenciar el atractivo de la ciudad para los turistas que acud¨ªan a los toros.
El 17 de agosto de 2012, Alejandro Talavante cerr¨® un ciclo de 15 a?os de toros en Illumbe. Hoy, casi tres a?os despu¨¦s, San Sebasti¨¢n vuelve a celebrar festejos taurinos despu¨¦s una ausencia debida a la motivaci¨®n pol¨ªtica de los anteriores rectores del ayuntamiento donostiarra. Se anuncia como un d¨ªa hist¨®rico, como si fuera algo novedoso para la Bella Easo. Sin embargo, lejos de pretendidos tintes pol¨ªticos, la fiesta de los toros est¨¢ arraigada en Gipuzkoa desde sus inicios, con festejos datados en la capital en pleno siglo XVI (1852) en el espacio que hoy se conoce como el Boulevard. La primera de las doce plazas estables fue la de San Mart¨ªn a mediados del siglo XIX y posteriormente las dos de Atocha, la vieja que dur¨® cinco a?os, y la nueva por la que pasaron los m¨¢s importantes espadas de finales del siglo XIX, como Lagartijo, Frascuelo, Guerrita o El Espartero.
En aquella ¨¦poca, San Sebasti¨¢n se hab¨ªa convertido en un lugar de turismo de lujo, donde se reun¨ªa buena parte de la aristocracia, monarqu¨ªa incluida. As¨ª, a principios del siglo XX, el empresario Jos¨¦ Arana acu?¨® el t¨¦rmino Semana Grande para celebrar otros espect¨¢culos como conciertos de m¨²sica y fuegos artificiales, que obligaran a los turistas que acud¨ªan a los toros a permanecer en la ciudad m¨¢s tiempo. Queda claro que las fiestas de Donostia nacieron como acompa?amiento de las corridas de toros. Es sabido que la fiesta hist¨®rica de la ciudad es el d¨ªa de San Sebasti¨¢n con la c¨¦lebre tamborrada en el mes de enero. La Semana Grande es un tiempo de verano nacido al alb¨²r de los festejos taurinos. Fue entonces cuando se construy¨® la plaza m¨¢s recordada: El Chofre, inaugurada en 1903. Celebr¨® festejos durante 71 a?os y fue plaza de Primera categor¨ªa. Fue uno de los motores del verano donostiarra con artistas como Orson Welles un habitual del Chofre u otros como Charlton Heston. En 1973 un oscuro plan urban¨ªstico derrib¨® El Chofre y dej¨® a la capital guipuzcoana sin toros durante 25 a?os.
La familia Chopera, empresarios donostiarras capitaneados por Manuel Mart¨ªnez Flamarique, logr¨® convencer al Ayuntamiento de San Sebasti¨¢n para construir un recinto polivalente para celebrar corridas de toros. Entonces era alcalde el socialista Od¨®n Elorza y hubo que mediar en muchos frentes para por ejemplo lograr que el d¨ªa en que se aprob¨® su construcci¨®n los concejales de Herri Batasuna no acudieran al pleno. Su abstenci¨®n permit¨ªa la aprobaci¨®n. El hostelero Jos¨¦ Luis Blanco, actual gerente de la empresa que gestiona Las Ventas, fue uno de los art¨ªfices de la canalizaci¨®n social de la nueva plaza. As¨ª, se logr¨® construir la Plaza de Illumbe, que fue inaugurada el 11 de agosto de 1998, casi 25 a?os despu¨¦s del ¨²ltimo festejo en el Chofre. Illumbe acogi¨® 15 temporadas, con suerte desigual, ya que los exitosos primeros a?os, en los que acogi¨® diferentes ciclos a lo largo de la temporada, con un interesante certamen de novilladas, fueron dejando paso a ferias cada vez menos relevantes y que vieron c¨®mo se despoblaban los tendidos. Adem¨¢s, los problemas de licencias y de explotaci¨®n del centro comercial que alberga la plaza acabaron por enturbiar el entorno taurino y su relaci¨®n con el ayuntamiento, que tuvo que pagar una indemnizaci¨®n millonaria a los empresarios.
Illumbe
Pero los dos a?os de par¨®n no se han debido a intereses taurinos ni econ¨®micos, sino a una estrategia pol¨ªtica de la formaci¨®n nacionalista Bildu, que trat¨® con esta medida de mitigar una presunta presencia espa?olista en las fiestas donostiarras. El consistorio resultante de las elecciones del mes de mayo estuvo muy r¨¢pido y certero para devolver a la ciudad uno de sus festejos hist¨®ricos, por los cuales se gest¨® la actual Semana Grande. El cartel de esta tarde viene a recordar el de aquel d¨ªa en el que alternaron Jose Mari Manzanares, Enrique Ponce y Rivera Ordo?ez ante toros de Torrestrella. Ahora ser¨¢ el hijo del fallecido diestro alicantino quien le sustituya en un cartel calcado. La especial idiosincrasia del mundo del toreo ha querido que una cornada en Huesca haya dejado a Paquirri en el lecho del dolor y fuera del festejo de Illumbe. Una plaza especial para el nieto de Antonio Ord¨®?ez, uno de los ¨ªdolos de la antigua afici¨®n del Chofre. Cuando Luis Mazzantini lidi¨® el primer toro de la historia del Chofre, lo brind¨® al entonces monarca espa?ol Alfonso XIII, habitual en el tendido donostiarra.
Hoy tambi¨¦n estar¨¢ el rey Juan Carlos I para conmemorar el regreso de la fiesta a Donostia, aunque no se le recuerda una anterior visita a esta plaza. La presencia del monarca em¨¦rito tambi¨¦n servir¨¢ de pol¨¦mica alrededor del coso; a la consabida manifestaci¨®n antitaurina se le ha unido una protesta antimon¨¢rquica y en consecuencia una perfecta excusa para politizar la fiesta, algo que ha comenzado a incomodar a los actuales rectores donostiarras. Otra novedad ser¨¢ la presencia en directo de la televisi¨®n. La1 emitir¨¢ el festejo, lo que sin duda provocar¨¢ que haya algo menos de p¨²blico en la plaza, pero difundir¨¢ esta cita hist¨®rica a todo el mundo. El objetivo de llenar la plaza es muy complicado, y si no que se lo digan al equipo de baloncesto que juega en Illumbe sus partidos durante el invierno con la mitad del aforo ocupado.
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