Los editores catalanes denuncian la ca¨ªda de un 40% de las ayudas

Los editores catalanes han aprovechado el arranque de la 33? Setmana del Llibre en Catal¨¤ ¡ªdesde el viernes hasta el 13 de setiembre¡ªpara denunciar lo que consideran un contrasentido: que la edici¨®n de libros sea la primera industria cultural del pa¨ªs y que en los ¨²ltimos cuatro a?os haya visto disminuir un 40% las ayudas econ¨®micas a un sector que se ha visto diezmado a consecuencia de la crisis. ¡°Y eso que el del libro es el segmento de la cultura menos subvencionado por la Generalitat¡±, ha comentado Albert P¨¨lach, presidente de la Associaci¨® d'Editors en Llengua Catalana. Setrata, adem¨¢s, de cifras p¨ªrricas porque en 2014, seg¨²n los editores asociados, las ayudas de la Generalitat representaron el 1,3% de la facturaci¨®n del sector, que ese a?o fue de 454 millones de euros. Es decir, algo menos de seis millones de euros. Si las ayudas directas se ven insuficientes, se critica tambi¨¦n la estrechez de la pol¨ªtica cultural en elementos tan b¨¢sicos como la ampliaci¨®n de los fondos de las bibliotecas que son uno de los puntales en un pa¨ªs en el que el 35% de la poblaci¨®n no lee un libro nunca y un 5% lo hace por obligaci¨®n; o porque tiene que estudiar o por trabajo.

¡°Todo parece indicar que la ca¨ªda del mercado del libro en catal¨¢n mantenida desde 2009 a 2013 ¡ªcon un acumulado de un 25%¡ª se ha parado porque el a?o pasado repunt¨® un 2,9%¡±, a?ad¨ªa P¨¨lach remiti¨¦ndose a las cifras que arroja el estudio Comercio Interior del Libro en Espa?a 2014 que anualmente publica la Federaci¨®n de Gremios de Editores de Espa?a (FGEE). Un incremento de ventas por el libro de texto, que en el mercado catal¨¢n representa el 45%, provocado por los cambios de los planes educativos que han forzado la renovaci¨®n del material de estudio escolar. Por el contrario, en el resto de categor¨ªas ¡ªliteratura, tambi¨¦n la infantil y la juvenil, y la no ficci¨®n¡ª baj¨® un 1,3% de media en relaci¨®n a 2013. ¡°No est¨¢ tan mal, teniendo en cuenta que venimos de a?os en que las bajadas eran de dos d¨ªgitos¡±, ha comentado el presidente de la asociaci¨®n. Con todo, cree que la salud del libro en catal¨¢n sigue en un estado parecido al del a?o pasado y pese a que la semana de Sant Jordi fue buena, la venta desde abril se parece a la del a?o pasado. ¡°Podemos decir que hemos tocado fondo y que empieza la recuperaci¨®n¡±, subray¨®. Algunos indicadores as¨ª lo corroboran, como el n¨²mero de t¨ªtulos nuevos publicados en catal¨¢n en 2014 que se situ¨® en 10.000¡ª en 2013 fueron 10.157¡ª aunque con tiradas menores, que bajan un 4%. ¡°La tendencia se ha afianzado, se prefiere pecar de corto y luego publicar m¨¢s a que haya ejemplares sin salida¡±, en palabras de P¨¨lach.

Las ventas del libro en catal¨¢n se concentran en las librer¨ªas, representan un 54%, seguidas por las ventas a instituciones, 30%, la venta directa (7%) y las ventas en hipermercados y quioscos se quedan en un 4%. Este ¨²ltimo dato contrasta con el resto de Espa?a donde el porcentaje llega al 13%. Los editores catalanes creen que la pirater¨ªa es el fen¨®meno que explica que las ventas digitales sean solo del 5%, muy lejos de las cifras de otros pa¨ªses europeos , como Alemania que llega a un 15%.

La Setmana del Llibre arranca con la tranquilidad que les ha supuesto la confirmaci¨®n, por parte de la delegada de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona, Berta Sureda, de que la avenida de la Catedral seguir¨¢ siendo su ubicaci¨®n en los pr¨®ximos a?os. La inquietud respecto al futuro se dispar¨® el pasado mes de julio cuando el tercer teniente de alcalde, Jaume Asens, dijo que era algo que "estaba en el aire". Para los organizadores de la Setmana el emplazamiento en la explanada de la catedral es vital por la visibilidad que tiene, por la incerteza que supone cambiar de ubicaci¨®n- la Setmana ha estado en plaza de Catalunya y en San Cugat- y porque tienen espacio para crecer. Como ha ocurrido este a?o en el que los editores y libreros catalanes ocupar¨¢n 127 expositores, un 21% m¨¢s que en 2014. Porque m¨¢s visibilidad y centralidad puede representar m¨¢s volumen de negocio, el a?o pasado fue de 240.000 euros. Para este a?o esperan crecer en p¨²blico y en facturaci¨®n. "Pero tenemos que reconocer que tenemos una asignatura pendiente, que es el p¨²blico joven porque la media de la edad de los visitantes de la muestra oscila entre los 40 y los 60 a?os", apuntaba Montse Ayats, presidenta de la comisi¨®n organizadora de la Setmana.