La Operaci¨®n Canalejas devuelve los autobuses a la puerta del Sol

La Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la capital han escenificado esta ma?ana el desbloqueo de la Operaci¨®n Canalejas, uno de los principales proyectos inmobiliarios de la ciudad, que llevaba meses en vilo por los obst¨¢culos de ¨²ltima hora introducidos por ambas Administraciones cuando las obras ya estaban en marcha y pese a haber dado su visto bueno anteriormente.

El acuerdo suaviza el ¡°agresivo¡± impacto visual del complejo, seg¨²n la directora regional de Patrimonio, Paloma Sobrini (Partido Popular), lo que se traduce en dos vertientes: se mantendr¨¢ ¡°la identidad¡± de los siete edificios, en vez de convertirlos en ¡°un cuerpo homog¨¦neo¡±; y se retranquear¨¢ la planta superior, reduci¨¦ndose as¨ª ¡°de forma significativa¡± la superficie edificada y, seg¨²n el concejal de Desarrollo Urbano, Jos¨¦ Manuel Calvo (Ahora Madrid), recortando ¡°el volumen de negocio¡± del grupo Villar Mir.

Adem¨¢s, el Ayuntamiento ha renunciado a la construcci¨®n de una estaci¨®n subterr¨¢nea de autobuses, de forma que las nueve l¨ªneas de la Empresa Municipal de Transportes que ahora tienen su base en la calle de Sevilla se trasladar¨¢n a la calle de Alcal¨¢ o incluso a la Puerta del Sol, seg¨²n ha indicado Calvo.

Impacto visual "excesivo"

Villar Mir compr¨® en diciembre de 2012 los siete edificios ubicados en el n¨²mero 1 de la plaza de Canalejas, el n¨²mero 7 de la carrera de San Jer¨®nimo, y los n¨²meros 6, 8, 10, 12 y 14 de la calle de Alcal¨¢. Pag¨® 215 millones al Banco Santander. En julio de 2014 inici¨® la obra para construir un centro comercial de 15.000 metros cuadrados; un hotel de cinco estrellas (que gestionar¨¢ la cadena Four Seasons) y viviendas de lujo.

El proyecto obtuvo el visto bueno de la Comisi¨®n Local de Patrimonio Hist¨®rico (controlada y presidida por el Gobierno regional, entonces y ahora en manos del PP) y del Ayuntamiento de la capital. El gobierno municipal, entonces en manos de Ana Botella (PP), aprob¨® el plan urban¨ªstico correspondiente y decidi¨® otorgar la licencia de obras por fases, concediendo la primera, de demolici¨®n, en oto?o de 2014. En febrero, Villar Mir obtuvo la siguiente licencia, de cimentaci¨®n y, al tiempo que iniciaba esos trabajos (que continuaban hasta ahora al ralent¨ª), pidi¨® el permiso definitivo para construir la estructura sobre rasante y concluir la obra. Y ah¨ª se bloque¨® la operaci¨®n.

A la Comisi¨®n Local de Patrimonio Hist¨®rico le surgieron dudas sobre el impacto visual excesivo del complejo, lo que llev¨® al Ayuntamiento a cancelar temporalmente la tramitaci¨®n de la licencia a la espera de que la Direcci¨®n General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid dilucidar¨¢ si el proyecto era compatible con la protecci¨®n del conjunto como Bien de Inter¨¦s Cultura.

Veto a la estaci¨®n subterr¨¢nea de autobuses

Adem¨¢s, el cambio en junio de gobierno municipal (Manuela Carmena sustituy¨® a Ana Botella en la alcald¨ªa) llev¨® a revisar tambi¨¦n el proyecto para construir una estaci¨®n de autobuses subterr¨¢nea. Botella aprob¨® en 2014 un plan para reordenar el tr¨¢fico en Canalejas aprovechando la obra iniciada por Villar Mir, y sac¨® a concurso la construcci¨®n de una infraestructura subterr¨¢nea que sirviera de aparcamiento, d¨¢rsena para nueve l¨ªneas de autobuses, y espacio de carga y descarga del complejo.

Villar Mir fue el ¨²nico en presentarse, pero el nuevo gobierno local paraliz¨® el proyecto y le exigi¨® replantearlo porque ¡°no supon¨ªa ning¨²n beneficio para la ciudad¡±. El concejal de Desarrollo Urbano ha explicado esta ma?ana que ¡°descart¨®¡± la estaci¨®n subterr¨¢nea porque era ¡°innecesaria¡± y ¡°provocaba problemas a los usuarios de autob¨²s, que no suelen usar el transporte p¨²blico subterr¨¢neo¡±. ¡°Hemos optado por una opci¨®n m¨¢s barata, reduciendo el coste hasta un 60%¡±, ha a?adido Jos¨¦ Manuel Calvo. El proyecto licitado por Botella ascend¨ªa a 38,7 millones de euros.

El ¨¢rea peatonalizada ser¨¢ mayor de la prevista, seg¨²n el concejal, y las paradas de autob¨²s ahora en la calle de Sevilla se mudar¨¢n. En la actualidad, nueve l¨ªneas ajustan sus tiempos de servicio en esa calle, ¡°estacionando durante un cierto tiempo y generando atascos y contaminaci¨®n¡±; esa regulaci¨®n de servicio se sacar¨¢ ahora del ¨¢mbito (el concejal no ha precisado d¨®nde se har¨¢), y las paradas ¡°se acercar¨¢n a la puerta del Sol¡±, de forma que los autobuses den la vuelta por la plaza, rodeando el edificio de Apple (en el n¨²mero 1 de la puerta). ¡°Los usuarios nos ped¨ªan que los autobuses vuelvan a acercarse a Sol, es una buena opci¨®n sin generar atascos¡±, ha a?adido el concejal, que considera en cualquier caso necesario reducir al mismo tiempo el tr¨¢fico en la carrera de San Jer¨®nimo (adonde desembocar¨ªan los veh¨ªculos tras cruzar por la plaza).

Se construir¨¢ una infraestructura subterr¨¢nea, que tendr¨¢ dos cuerpos: por una parte, el actual aparcamiento, de tres plantas, se quedar¨¢ en s¨®lo dos pisos: uno mantendr¨¢ ese uso, y otro ser¨¢ para carga y descarga de los comerciantes de la zona. Adem¨¢s, bajo el complejo se construir¨¢ otro aparcamiento y una zona de carga y descarga para el complejo, que tendr¨¢ sus propias rampas de acceso y estar¨¢ conectado adem¨¢s con el otro subterr¨¢neo.

Eso obligar¨¢ a rescatar la concesi¨®n del actual aparcamiento p¨²blico, inaugurado en 1964 y uno de los m¨¢s antiguos de la capital. Seg¨²n los c¨¢lculos del anterior gobierno municipal (que deber¨¢n ser revisados por el paso del tiempo), eso obligaba a un desembolso de 21 millones al Ayuntamiento, que se compensar¨ªa con el canon cobrado al nuevo concesionario (tambi¨¦n habr¨¢ de revisarse ese punto, al preverse un parking de una sola planta). El gobierno municipal y Villar Mir estudian ahora c¨®mo realizar esa operaci¨®n.

Respecto al impacto visual del complejo, la directora regional de Patrimonio ha asegurado esta ma?ana que ¡°se ha reducido el volumen de manera que resulte amable e integrado con el entorno¡±. Tal y como ha prescrito la Comisi¨®n Local de Patrimonio, la cornisa original no se igualar¨¢ para formar un conjunto homog¨¦neo, sino que se mantendr¨¢ ¡°la identidad¡± de cada edificio, respetando sus fachadas y cubiertas ¡°para preservar sus valores¡±. Adem¨¢s, se remeter¨¢ el muro de fachada en las plantas superiores para reducir su impacto, toda vez que el complejo tiene ocho plantas y est¨¢ situado junto a otro (el edificio de la tienda de Apple) de s¨®lo cinco. Eso, que seg¨²n la Comunidad aumentar¨¢ ¡°el buen ambiente¡± de la ciudad, para Villar Mir supondr¨¢ reducir habitaciones en el hotel (quedar¨¢n en 205, frente a las 215 previstas originalmente) y, sobre todo, pisos de lujo (pasar¨¢n de 30 a 22).