De Uni¨® a Dem¨°crates de Catalunya

El pasado 7 de noviembre se celebr¨® el congreso fundacional de Dem¨°crates de Catalunya, un nuevo partido impulsado por los ¨²ltimos disidentes independentistas de Uni¨® Democr¨¤tica de Catalunya. En el Congreso se aprob¨® el manifiesto fundacional y los estatutos del partido, y se eligieron los nuevos l¨ªderes.

El manifiesto fundacional es un c¨²mulo de frases insustanciales, de aspiraciones t¨®picas y de an¨¢lisis superficial del actual contexto pol¨ªtico. Los ejes del manifiesto parecen buscar un efecto bals¨¢mico, expiatorio y purificador, puesto que van en sentido radicalmente opuesto a lo que muchos dirigentes del nuevo partido aprendieron, compartieron y practicaron trabajando durante toda su vida pol¨ªtica al lado de Duran i Lleida.

Defienden ¡°una realidad econ¨®mica solidaria y fraternal¡± que concretan en ¡°una sociedad que se rebele contra las inmoralidades que nos rodean en forma de desequilibrios y la miseria econ¨®mica y social¡±. Es decir, lo contrario de lo que Uni¨® ha practicado durante a?os como plataforma parlamentaria al servicio de empresas y patronales que han fomentado la precarizaci¨®n laboral y la avaricia empresarial. Cuando los nuevos Dem¨°crates dicen ¡°considerar indigna e inmoral aquella riqueza material obtenida a costa de la dignidad de las personas¡± olvidan que cuando estaban en Uni¨® fueron lobistas activos en la defensa de intereses desaprensivos de entidades bancarias que se lucraban con la pobreza social.

Anhelan ¡°un pa¨ªs s¨®lido desde un punto de vista ¨¦tico y moral¡± y quieren ser referente de ¡°ciudadanos responsables en el uso de los servicios p¨²blicos¡±. Rehabilitarse en este ¨¢mbito requerir¨¢ un esfuerzo descomunal, porque muchos Dem¨°crates fueron dirigentes o cargos p¨²blicos de una formaci¨®n pol¨ªtica que admiti¨® haber desviado fondos p¨²blicos europeos destinados a la formaci¨®n de parados para financiar ilegalmente el partido, que se esforz¨® para conseguir el indulto de reconocidos corruptos y que utiliz¨® el clientelismo en la administraci¨®n.

El ¨²nico cambio es que los afiliados, como dice el art¨ªculo 1, pasan a denominarse voluntarios y su cotizaci¨®n al partido es opcional

Reclaman ¡°un pa¨ªs radicalmente democr¨¢tico¡±, ¡°con limitaci¨®n de mandatos y sin puertas giratorias¡±. Esta declaraci¨®n de principios proviene de personas que durante mucho tiempo adularon a alguien que lleva treinta a?os liderando el partido y ocupando cargos de representaci¨®n pol¨ªtica. Y no olvidemos a los principales referentes de Dem¨°crates de Catalunya: Antoni Castell¨¤, que acumula seis elecciones auton¨®micas consecutivas (desde 1999) siendo elegido diputado, y N¨²ria de Gispert, que cuenta con m¨¢s de treinta a?os ocupando cargos en la Administraci¨®n y en el Parlament. En cuanto a las puertas giratorias, poco cr¨¦dito merecen aquellos que se beneficiaron de ellas y que en su actividad pol¨ªtica toleraron el amiguismo y el favoritismo.

¡°Dem¨°crates de Catalunya nace para ser un partido del siglo XXI¡±, pero la estructura organizativa interna prevista en sus estatutos es la misma que ya se utilizaba en el siglo XIX: un comit¨¦ y un consejo nacional; una organizaci¨®n territorial con comit¨¦s regionales, comarcales y locales; una comisi¨®n de garant¨ªas y otra econ¨®mica, y un congreso nacional. Nada nuevo. El ¨²nico cambio es que los afiliados, como dice el art¨ªculo 1, pasan a denominarse voluntarios y su cotizaci¨®n al partido es opcional. Quieren formar un partido que sea referente de funcionamiento interno democr¨¢tico, pero para ello antes deber¨¢n desaprender aquellas pr¨¢cticas abusivas destinadas a depurar a disidentes, como saben muy bien los miembros del colectivo El Mat¨ª, que, escarmentados, no han querido saber nada de este nuevo experimento partidista.

Los l¨ªderes de Dem¨°crates de Catalunya, que en su d¨ªa arroparon a los condenados por corrupci¨®n y financiaci¨®n ilegal de Uni¨® Democr¨¤tica del caso Turisme y del caso Treball, y que dejaron este partido cuando la deuda a las entidades bancarias ascend¨ªa, seg¨²n el Tribunal de Cuentas, a 16,7 millones de euros, ahora aseguran que el nuevo partido renunciar¨¢ a los cr¨¦ditos bancarios para financiar su actividad ordinaria (nada dicen de la extraordinaria) y que solo se financiar¨¢ a trav¨¦s de los voluntarios que lo deseen y del micromecenazgo. Y para ahondar en el contraste, ahora afirman sentirse inspirados por Pere Casald¨¤liga y desean ¡°un partido pobre para ser libre¡±.

Sin duda, la vocaci¨®n de Dem¨°crates de Catalunya, que ha plagiado el logo del Partido Dem¨®crata norteamericano, es copiar tambi¨¦n a Uni¨® como partido ap¨¦ndice de CDC y seguir viviendo a costa de los convergentes, como ya se ha visto en las candidaturas para el 27S y el 20D. En los tiempos que corren, no parece muy necesario para el sistema de partidos catal¨¢n un nuevo partido de cuadros, o de cargos.

Jordi Matas Dalmases, Catedr¨¢tico de Ciencia Pol¨ªtica de la UB.