Caso Castor, sellado pero activo
La Plataforma Ciutadana en Defensa de les Terres del S¨¦nia denuncia las indemnizaciones
Ya no tiene gas y le falta poco para ser sellado definitivamente, pero el proyecto Castor sigue activo en los tribunales, en Europa y ahora ante la Comisi¨®n Nacional de Mercados y Competencia. La Plataforma Ciutadana en Defensa de les Terres del S¨¦nia ha presentado ante Competencia una denuncia para pedir la suspensi¨®n urgente del aumento tarifario en los recibos de gas de los consumidores. ¡°Vamos a asumir un pago por un servicio que no recibiremos. Adem¨¢s, las prisas por aprobar el real decreto y la adjudicaci¨®n sin concurrencia ni publicidad a Enag¨¢s, le ha dado a esta firma una posici¨®n privilegiada sobre el resto de las empresas del sector¡±.
As¨ª lo explica Cristina S¨¢nchez, miembro de la Plataforma, que se refiere al decreto por el que, de forma urgente, se indemniz¨® a la empresa concesionaria de Castor, Escal UGS (participada en un 66,7% por la firma ACS), y se pas¨® la gesti¨®n de la planta a Enag¨¢s Transporte, que asum¨ªa esta indemnizaci¨®n y las inversiones necesarias para el sellado del Castor. Enag¨¢s recuperar¨¢ su inversi¨®n en los pr¨®ximos 30 a?os a partir del recibo del gas de los consumidores. La Plataforma calcula que el montante total superar¨¢ los 4.000 millones de euros.
Pero la Plataforma no se queda ah¨ª. S¨¢nchez tambi¨¦n ha anunciado una reclamaci¨®n ante la Direcci¨®n General de Medio Ambiente de la Uni¨® Europea en la que solicitan el resarcimiento a los h¨¢bitats naturales afectados por la instalaci¨®n de la planta terrestre y sobre todo del gasoducto que comunicaba con la planta marina. El objetivo de esta segunda reclamaci¨®n, seg¨²n Cristina S¨¢nchez, es ¡°que nos digan qu¨¦ ha pasado y que se depuren responsabilidades ante una infracci¨®n grave de directivas ambientales¡±.
Las dos denuncias coinciden en el tiempo con las declaraciones por el caso Castor en el juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 4 de Vinar¨°s, que investiga presuntas irregularidades en la concesi¨®n de autorizaciones, ante el que ya han desfilado 16 de los 18 imputados. De ellos, una de las m¨¢s destacadas fue la declaraci¨®n Recaredo del Potro, presidente del consejo de administraci¨®n de Escal-UGS, la concesionaria del Castor.
Del Potro ¡°se present¨® en Vinar¨°s como un rey midas, no faltaba a ning¨²n acontecimiento local, patrocin¨® eventos y prometi¨® cerca de 200 puestos de trabajo
Del Potro atribuy¨® los terremotos de la zona a una ¡° casualidad y coincidencia en el tiempo¡±, y elimin¨® cualquier relaci¨®n entre la inyecci¨®n de gas en la planta y los movimientos s¨ªsmicos. Tambi¨¦n le rest¨® importancia a la intensidad de los mismos y los compar¨® con ¡°la vibraci¨®n que experimenta la fachada de un edificio cuando le pasa un cami¨®n por delante¡±. Esta comparaci¨®n indign¨® especialmente a vecinos y asociaciones de Vinar¨°s y de la zona afectada por los sismos. ¡°No era un cami¨®n, era un terremoto de 4,3, y los que vivimos los terremotos lo pasamos muy mal, pasamos noches sin dormir y con miedo por nuestros hijos y por nosotros. Ahora no puede venir a re¨ªrse de nosotros y a tomarnos el pelo¡±, lamenta Evelio Monfort, miembro de la plataforma ciudadana de defensa de les Terres del S¨¦nia.
La figura de Del Potro genera especial irritaci¨®n entre aquellas entidades que se opusieron al proyecto. ¡°Eran conscientes de lo que hac¨ªan. Estaban desarrollando un pelotazo que la naturaleza se ha encargado de desmontar con terremotos¡±, explica Joan Ferrando, presidente de la Plataforma. Para Ferrando, Del Potro ¡°se present¨® en Vinar¨°s como un rey midas, no faltaba a ning¨²n acontecimiento local, patrocin¨® eventos y prometi¨® cerca de 200 puestos de trabajo, pero todo era humo y a los que protestamos desde un primer momento, nos humill¨®, se ri¨® de nosotros y nos acus¨® de alarmistas y envidiosos¡±. En el proceso, a¨²n quedan dos representantes de la empresa por declarar como imputados.
Fueron hasta 500 movimientos s¨ªsmicos, que ganaron intensidad conforme avanzaba la inyecci¨®n del gas colch¨®n
Junto a la representaci¨®n de la empresa, de la cual han declarado cinco miembros m¨¢s del Consejo de Administraci¨®n, el juez tambi¨¦n ha escuchado las explicaciones de responsables del Instituto Geol¨®gico Minero de Espa?a, IGME, y de los Ministerios de Medio Ambiente e Industria quienes negaron el conocimiento de los riesgos s¨ªsmicos. Evelio Monfort, miembro de la plataforma, cree que las declaraciones de los t¨¦cnicos demuestran su profesionalidad. ¡°Eso es una de las primeras obligaciones cuando uno hace una perforaci¨®n, ellos mismo se est¨¢n diciendo: yo soy un inepto. Los vecinos esperamos ir a juicio y que se haga justicia. Yo no quiero que nadie vaya a la c¨¢rcel, pero quiero que les digan que son culpables y que se sepa que esas cosas no se pueden hacer¡±.
Historia de un fracaso
El proyecto Castor se aprob¨® en 2008 para cubrir el suministro de gas en momentos de desabastecimiento. Era un almac¨¦n estrat¨¦gico, el quinto m¨¢s grande del pa¨ªs, con capacidad para 1.900 millones de metro c¨²bicos. Todo ello aprovechando una planta ya existente a 22 kil¨®metros frente a las costas de Vinar¨°s (Castell¨®n). El proyecto contemplaba la construcci¨®n de una planta terrestre, en el mismo municipio, y una canalizaci¨®n subterr¨¢nea hasta la planta marina, como gasoducto.
En el verano de 2013 la empresa concesionaria, Escal UGS, comenz¨® a inyectar el denominado gas colch¨®n, como paso previo al almacenaje. D¨ªas despu¨¦s, el municipio de Vinar¨°s percibi¨® los primeros terremotos. Este fue, seg¨²n Joan Ferrando, el peor momento. ¡°Cuando el Observatorio del Ebro le dijo a Escal que era preocupante el nivel de los terremotos, la empresa no hizo caso y continu¨®. Lo tenemos estudiado, cuando se inyectaba gas a m¨¢s potencia, a las pocas horas, se produc¨ªa un terremoto m¨¢s fuerte. Podr¨ªa haber pasado algo muy grave¡±.
Fueron hasta 500 movimientos s¨ªsmicos, que ganaron intensidad conforme avanzaba la inyecci¨®n del gas colch¨®n. El m¨¢s intenso fue de 4,2 y se not¨® desde C¨¤lig (Castell¨®n), hasta San Carles de la R¨¤pita (Tarragona). Desde el inicio de los temblores, los vecinos de la zona se movilizaron en contra del proyecto y lamentaron la escasa informaci¨®n que hab¨ªan recibido sobre lo que era exactamente Castor. El gobierno orden¨® el cierre de la instalaci¨®n y la empresa concesionaria fue indemnizada 1.350 millones.
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