Entre renovaci¨®n y esclerosis
En las listas del PP vemos desgaste de liderazgo, incapacidad para adaptarse a los tiempos e impotencia de G¨¦nova 13 frente a ciertos cacicatos locales
No crean que, dej¨¢ndome arrastrar por la moda, me haya convertido en un fan¨¢tico del rejuvenecimiento de nuestros representantes pol¨ªticos, en un obseso del relevo generacional a todo trance. Sin embargo, resulta chocante que, en plena eclosi¨®n de partidos nuevos, cuando aspiran a la presidencia del Gobierno ¡ªo de la Generalitat¡ª l¨ªderes en la treintena, persistan en las papeletas para el pr¨®ximo d¨ªa 20 casos flagrantes de anquilosamiento, ejemplos heroicos de resistencia a ceder el puesto, continuidades que parecen desafiar el paso del tiempo. En Catalu?a, tales fen¨®menos se acumulan sobre todo en lo alto de las listas del Partido Popular.
Su n¨²mero uno por Barcelona, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, se incorpor¨® a la directiva barcelonesa de Alianza Popular en febrero de 1983, devino concejal de la capital catalana al mes siguiente y, desde aquel oto?o, alcanz¨® la presidencia provincial del partido. Por aquel entonces, Albert Rivera comenzaba a frecuentar la guarder¨ªa e In¨¦s Arrimadas era todav¨ªa un beb¨¦. Huelga reproducir aqu¨ª el resto del curr¨ªculo pol¨ªtico del se?or Fern¨¢ndez D¨ªaz, o detallar sus siete legislaturas como diputado al Congreso. En su caso, la condici¨®n de ministro, y de ¨²nico ministro catal¨¢n de Rajoy, justifica quiz¨¢ que alguien tan poco novedoso sea cabeza de cartel.
Rivera, Arrimadas y dem¨¢s son j¨®venes, guapos y parecen siempre reci¨¦n duchados. Pero, ?es preciso pon¨¦rselo as¨ª de f¨¢cil, contraponi¨¦ndoles tantas telara?as y tanta caspa?
Pero no puede decirse que quienes le siguen en la papeleta corrijan la sensaci¨®n de d¨¦j¨¤ vu: Jorge Moragas S¨¢nchez -la eminencia de la operaci¨®n Camarga, aquel que confiaba en Vicky ?lvarez para ¡°salvar a Espa?a¡±¡ª; Alicia S¨¢nchez-Camacho ¡ªla cual, sea dicho con todos los respetos, est¨¢ m¨¢s amortizada que el caramelo de Kojak¡ª; y Dolors Montserrat Montserrat. ?sta ¨²ltima la m¨¢s joven del grupo, s¨ª, pero con la antig¨¹edad gen¨¦tica que le otorga ser hija de Dolors Montserrat Culler¨¦, dirigente del PP catal¨¢n nada menos que desde 1988. Parecida seudorenovaci¨®n din¨¢stica ofrece la cabeza de lista por Girona, Concepci¨® Veray Cama. No s¨®lo porque, en la c¨²pula provincial desde el 2000, ha sido alcaldable en la capital varias veces a lo largo de los ¨²ltimos tres lustros y ya fue diputada al Congreso en 2011. Tambi¨¦n porque es hija de Jaume Veray Batlle, destacado dirigente de AP-PP en la demarcaci¨®n entre 1982 y 2000.
Pero donde la esclerosis de liderazgo, la incapacidad de ofrecer una imagen m¨ªnimamente adaptada a los tiempos, la impotencia de G¨¦nova 13 ante ciertos cacicatos locales resultan m¨¢s flagrantes es en la circunscripci¨®n de Lleida, encabezada una vez m¨¢s por el incombustible Jos¨¦ Ignacio Llorens Torres. Fraguista de la ¨¦poca de los tirantes rojigualdos y del ?la calle es m¨ªa!, Llorens ya fue cabeza de lista de Alianza Popular por Lleida ¡ªy obtuvo el acta de diputado¡ª en los comicios generales de 1982, cuando Pablo Iglesias andaba por segundo de preescolar, y desde entonces ha revalidado su esca?o en todas las legislaturas espa?olas excepto dos, la 1989-93 y la 2004-2008; ello a pesar de una trayectoria intrapartidaria cualquier cosa menos discreta.
En efecto: entusiasta del Manuel Fraga m¨¢s jupiterino, Jos¨¦ Ignacio Llorens se convirti¨® luego en un ferviente palad¨ªn del hoy olvidado Antonio Hern¨¢ndez Mancha, y despu¨¦s se adapt¨® sin problemas ¡ªel objetivo ha sido siempre mantenerse en lo alto de la cuca?a¡ª al liderazgo de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. En clave interna de Catalu?a, rindi¨® pleites¨ªa a Miguel ?ngel Planas y acatamiento a Jorge Fern¨¢ndez en los a?os ochenta, result¨® m¨¢s tarde un celoso vidalquadrista de conveniencia..., y se acomod¨® velozmente a la ca¨ªda del catedr¨¢tico en 1996.
Eso s¨ª: su hostilidad al ¡°giro catalanista¡± promovido por Josep Piqu¨¦ fue frontal; por el giro, pero sobre todo en respuesta a la osad¨ªa del exministro, que quiso jubilarlo del esca?o y desalojarlo del mandarinato provincial. ¡°Piqu¨¦ vino a Catalu?a para liquidar el PP¡±, sentenciaba el leridano en 2004. Aquel noviembre intent¨® sin ¨¦xito presentarse como candidato alternativo al de Vilanova en el XI? congreso del PPC; en diciembre, durante el congreso provincial de Lleida, Llorens insult¨® p¨²blicamente a Piqu¨¦, y hubo que pararle para evitar la agresi¨®n f¨ªsica. Tal haza?a, sin embargo, no empa?¨® la confianza de Rajoy: una vez que Piqu¨¦ hubo tirado la toalla, Madrid reinvisti¨® al irascible Llorens candidato en 2008, en 2011 y ahora en 2015.
Vale, de acuerdo: Rivera, Arrimadas y dem¨¢s son j¨®venes, guapos y parecen siempre reci¨¦n duchados. Pero, ?es preciso pon¨¦rselo as¨ª de f¨¢cil, contraponi¨¦ndoles tantas telara?as y tanta caspa?
Joan B. Culla i Clar¨¤ es historiador.
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