La Generalitat admite que peligra el suministro de agua en caso de sequ¨ªa

Siete a?os despu¨¦s del ¨²ltimo episodio de sequ¨ªa se mantiene el problema: Catalu?a a¨²n no tiene asegurado el suministro de agua de toda su poblaci¨®n en el caso de un nuevo cap¨ªtulo con bajas reservas. La Agencia Catalana del Agua (ACA) reconoce que ahora faltar¨ªan dos metros c¨²bicos de agua por segundo o, lo que es lo mismo, lo que podr¨ªa producir una desalinizadora como la de El Prat de Llobregat. Las previsiones son m¨¢s graves a partir del a?o 2021. El cambio clim¨¢tico podr¨ªa triplicar ese d¨¦ficit hasta los seis metros c¨²bicos de agua.

La ACA ha realizado un detallado an¨¢lisis en el Plan de Gesti¨®n del Distrito de Cuenca Fluvial de Catalu?a ¡ªqueda fuera la del Ebro¡ª, el documento que ha de marcar la planificaci¨®n hidrol¨®gica de la Generalitat en los pr¨®ximos seis a?os (2016-2021) y que est¨¢ pendiente de aprobaci¨®n. En ese documento se hace la diagnosis de la situaci¨®n de Catalu?a y, pese a que asegura que ha habido mejoras respecto a la aprobaci¨®n del ¨²ltimo plan, tambi¨¦n admite que el esfuerzo realizado en inversiones y en concienciaci¨®n ciudadana todav¨ªa no son suficientes. Sobre todo en el caso del sistema Ter-Llobregat, la principal red de suministro de agua que permite asegurar la llegada de ese recurso b¨¢sico a la regi¨®n metropolitana de Barcelona. Su falta de agua ha obligado a tomar medidas restrictivas en el suministro en cinco ocasiones en los ¨²ltimos 25 a?os, situaci¨®n que podr¨ªa volver a repetirse.

Es en ese sistema en el que faltar¨ªan los dos metros c¨²bicos por segundo de agua para poder evitar las restricciones. Eso en el corto plazo, porque el documento esgrime que se pueden agravar las cosas con el tiempo: ¡°A medio plazo (2021-2027), las afecciones derivadas del cambio clim¨¢tico podr¨ªan incrementar la necesidad de esta fuente complementaria hasta los 4 m3/s. A m¨¢s largo plazo (2033-2045), en funci¨®n de la evoluci¨®n de los crecimientos demogr¨¢ficos y la din¨¢mica de las demandas de agua, as¨ª como de la intensificaci¨®n de los impactos clim¨¢ticos, la necesidad podr¨ªa llegar a los 6 m3/s¡±. Tambi¨¦n se detecta un d¨¦ficit h¨ªdrico en la cuenca fluvial del r¨ªo Muga, para la que se necesitar¨ªa una fuente alternativa capaz de aportar 0,25 metros c¨²bicos de agua.

As¨ª lo escribieron los t¨¦cnicos que realizaron el documento en 2015, mientras que, seg¨²n el Observatorio Fabra, avanzaba el a?o m¨¢s c¨¢lido y seco en Barcelona en un siglo. Las reservas de los embalses contin¨²an siendo ahora altas (un 73%), pero un 10% menos que hace un a?o.

El Plan de Gesti¨®n no entra en las soluciones necesarias para sortear otra sequ¨ªa sin cortes de suministro. Con el Gobierno de Artur Mas enfrentado al estatal por el proceso soberanista en el que se encuentra sumida Catalu?a, el documento asume que tanto ¡°la definici¨®n y la financiaci¨®n de las soluciones al d¨¦ficit estructural del distrito de cuenca fluvial de Catalu?a se trasladan al futuro Plan Hidrol¨®gico Nacional, dada la magnitud de la aportaci¨®n complementaria requerida¡±.

Todos los expertos consultados, tanto del ¨¢mbito industrial, institucional, como ecologista, sacan sus propias conclusiones de esa afirmaci¨®n: la Generalitat cede el protagonismo al Estado con dos posibilidades para resolver ese d¨¦ficit. Uno ser¨ªa el trasvase del Ebro; otro traer agua del R¨®dano, r¨ªo del sur de Francia, que esta legislatura ha llegado a analizar el Ministerio de Agricultura, Alimentaci¨®n y Medio Ambiente y al que ha dado su visto bueno, mediante carta, el actual consejero en funciones de Territorio, Santi Vila. Un experto asegura que si se hubiera construido la desaladora prevista en el Foix se hubiera resuelto el d¨¦ficit a corto plazo.

Uno de los consultados contrastaba el plan pendiente de aprobar con el vigente: ¡°El primero se hizo en un marco de d¨¦ficit hidrol¨®gico y bonanza econ¨®mica y este se ha elaborado desde la abundancia hidrol¨®gica y la sequ¨ªa econ¨®mica¡±. El ¨²ltimo plan dise?ado contempla unos 917,9 millones de euros de inversiones, de los que 484,6 millones los tendr¨ªa que ejecutar la Agencia Catalana del Agua. Ese compromiso choca con los 9.405 millones contemplados en inversiones en el anterior (2009-2015), en el que la Generalitat asumi¨® planificaci¨®n e inversiones para dar garant¨ªa de suministro. Se construy¨® la nueva desalinizadora (con capacidad para ofrecer 60 hect¨®metros c¨²bicos por a?o), se ampli¨® la de la Tordera (se gan¨® una capacidad de 10 hm3/ a?o), se pusieron en marcha proyectos de reutilizaci¨®n en el Camp de Tarragona (6,5 hm3/a?o) y los usos complementarios para la reutilizaci¨®n de agua de la depuradora de El Prat de Llobregat, que se utiliza para riego pero podr¨ªa ser potabilizada en caso de sequ¨ªa.

Pero uno de los mejores ejercicios de la ¨²ltima d¨¦cada para conseguir m¨¢s agua han sido las propias sequ¨ªas y los efectos de concienciaci¨®n sobre la poblaci¨®n. Desde la sequ¨ªa de los a?os 2007 y 2008 el consumo urbano e industrial de agua en Catalu?a se ha reducido un 12%, el equivalente a unos 90 hect¨®metros c¨²bicos anuales.

De momento, con la actual situaci¨®n, los expertos consideran que se rebajar¨¢n los caudales ambientales del Llobregat y del Muga hasta que no exista una soluci¨®n incluida en el Plan Hidrol¨®gico Nacional.