La m¨¢quina del tiempo de Hiroshi Sugimoto

De la misma forma que la caja negra de un avi¨®n tiene la capacidad de recuperar la verdad sobre un accidente a¨¦reo; de dar una visi¨®n de lo que no se puede ver; la caja negra de la c¨¢mara permite que la fotograf¨ªa documente y pruebe aspectos del mundo y de sus habitantes desde su invenci¨®n en el siglo XIX. Con esa filosof¨ªa, o cuestion¨¢ndola, trabaja el fot¨®grafo japon¨¦s Hiroshi Sugimoto (Tokio, 1948) desde hace cuarenta a?os, creando unas enormes e impactantes im¨¢genes en blanco y negro, en las que reinterpreta la tradici¨®n de la fotograf¨ªa cl¨¢sica, imprimiendo un giro conceptual a naturalezas muertas, retratos, mares y cielos. 41 de sus fotograf¨ªas, de cinco de sus m¨¢s destacadas series, pueden verse, por primera vez en Espa?a, en la Fundaci¨®n Mapfre de Barcelona dentro de la exposici¨®n Black Box, comisariada por Philip Larratt-Smith; un recorrido por sus principales trabajos, que abre sus puertas ma?ana, invitando a meditar sobre la percepci¨®n, la ilusi¨®n, la representaci¨®n, la vida y la muerte.

Sugimoto, conocido tambi¨¦n por ser el autor de Boden Sea, una litograf¨ªa que acab¨® siendo la portada del disco de U2 No Line on the Horizon, explic¨® este mi¨¦rcoles que ¡°no nac¨ª artista, me convert¨ª en uno de ellos cuando me traslad¨¦ a Estados Unidos en 1970 a estudiar fotograf¨ªa¡±; que se considera un ¡°artista conceptual que reivindica el car¨¢cter artesano de sus creaciones¡±. Tambi¨¦n, que rechaza la tecnolog¨ªa digital en favor de los m¨¦todos tradicionales. De hecho, las im¨¢genes de su serie, Lightning fields, (Campos de rel¨¢mpagos) que comenz¨® en 2006, est¨¢n realizadas sin c¨¢mara. Tan solo, descargas el¨¦ctricas de rayos y su efecto en los negativos, con el resultado de im¨¢genes on¨ªricas que aparentan contornos de r¨ªos.

El recorrido de la exposici¨®n comienza en la planta baja del noble edificio Garriga Nogu¨¦s ¡ªque acogi¨® hasta hace poco la Fundaci¨®n Godia¡ª con nueve fotograf¨ªas de la serie Seascapes (Paisajes marinos, que comenz¨® en 1980 y no ha concluido); una serie de localizaciones que tienen el cielo y el mar como protagonistas. ¡°Son paisajes primigenios como los que vieron nuestros antepasado, que son representaci¨®n y abstracci¨®n¡±, explic¨® sobre sus im¨¢genes de mares tan m¨ªticos como el Tirreno, el de Liguria, el B¨¢ltico o el Egeo. Tras subir la impresionante escalera que lleva al primer piso recibe Enrique VIII y sus seis esposas. Forman parte de Portraits (Retratos, 1994-1999), otra de las series de Sugimoto en la que tambi¨¦n aparecen Juan Pablo II, Fidel Castro, el emperador Hirohito o Lenin. Son im¨¢genes que el fot¨®grafo ha realizado a algunas de las figuras de cera del museo de Madame Tussauds de Londres, tras llev¨¢rselas a su estudio. Su calidad y su detalle, equiparable a los est¨¢ndares de los retratos pict¨®ricos, les da, tambi¨¦n, un car¨¢cter siniestro. ¡°La c¨¢mara es una m¨¢quina del tiempo, capaz de transportarnos a momentos lejanos del tiempo y de la historia¡±, dijo Sugimoto.

Visita al Liceo y el Palau

Theaters (Cines), es la tercera de las series, en las que Sugimoto coloc¨® en diferentes cines y autocines una c¨¢mara en la que dej¨® abierto el obturador durante la proyecci¨®n de una pel¨ªcula, que solo cerro al final de la proyecci¨®n. El resultado de esta sobreexposici¨®n del negativo tiene como efecto que la pantalla acaba convertida en un rect¨¢ngulo en blanco, vac¨ªo y brillante, rebosante de luminosidad. Cierra la muestra las no menos impactantes fotograf¨ªas de Dioramas (1976-2012), una serie que re¨²ne fotograf¨ªas realizadas en el Museo de Historia Natural de Nueva York de montajes de paisajes ideales, con sus correspondientes animales embalsamados que parecen, de forma enga?osa, reales. Ante los ojos del espectador aparecen ping¨¹inos en el Polo Sur, lobos en Alaska, c¨®ndores de California o hienas en la tundra africana. ¡°No importa c¨®mo de falso sea un tema, una vez fotografiado es como si fuera real¡±. Y no hay duda con sus trabajos.

Sugimoto ha aprovechado su estancia en Barcelona para visitar el Liceo, el Palau y la catedral. ¡°Prepara una serie, todav¨ªa estado embrionario, sobre una expedici¨®n de japoneses en el siglo XVI por Espa?a, desde Lisboa hasta Barcelona¡±, explic¨® Carlos Gollonet, conservador de fotograf¨ªa de la Fundaci¨®n. La exposici¨®n de Sugimoto, que viajar¨¢ en junio a Madrid, pretende, seg¨²n Pablo Jim¨¦nez, director de Cultura de la fundaci¨®n, repetir el ¨¦xito de la primera muestra en Barcelona,?El triunfo del color. De Van Gogh a Matisse. Colecciones de los museos d'Orsay y de l'Orangerie, que visitaron m¨¢s de 161.000 personas.