Colau mantiene a los antidisturbios, pero les vac¨ªa de atribuciones

Ada Colau prometi¨®, antes de llegar a la alcald¨ªa de Barcelona, que eliminar¨ªa la unidad antidisturbios de la Guardia Urbana. Nueve meses despu¨¦s, no lo ha hecho y los agentes de esa unidad (la USP) siguen actuando en Barcelona con la misma est¨¦tica y elementos represivos (casco, escudos, chalecos antitrauma...). Aunque siguen existiendo, el equipo de Colau les ha retirado sus funciones y ya no realizan ninguna tarea de orden p¨²blico. El domingo, durante una manifestaci¨®n en la Rambla, la unidad se retir¨® cuando empezaron los problemas.

¡°Debe quedar muy claro que la Guardia Urbana de Barcelona ni realiza ni realizar¨¢ intervenciones de antidisturbios o de orden p¨²blico¡±, explic¨® esta semana, en una entrevista telef¨®nica con EL PA?S, el comisionado de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Amadeu Recasens. La pol¨¦mica se arrastra desde la candidatura de Colau. El programa electoral de Barcelona en Com¨² contaba con una promesa en materia de seguridad: la ¡°disoluci¨®n¡± de la Unidad de Polic¨ªa Administrativa y de Seguridad (UPAS). Colau asegur¨® entonces que el actual modelo policial tiene ¡°parte represiva sobredimensionada¡± y apost¨® por la proximidad y la mediaci¨®n.

La promesa electoral era, a priori, f¨¢cil de cumplir. La UPAS, dise?adas por el exalcalde socialista Joan Clos, fueron transformadas por Xavier Trias en la Unidad de Soporte Policial (USP). Son agentes con distinto uniforme y equipados con escudos y material defensivo que desarrollan las funciones de antidisturbios. Con la llegada de Colau, la unidad no ha vuelto a realizar servicios de antidisturbios. Sin embargo, la unidad sigue en las calles y con la misma est¨¦tica represiva que en el anterior mandato.

Un ejemplo de esta situaci¨®n se vivi¨® el pasado domingo. La USP form¨® una barrera policial en plena Rambla ante una manifestaci¨®n de vendedores ambulantes ilegales. ¡°La situaci¨®n se complic¨® y lo que era una concentraci¨®n se convirti¨® en un problema de orden p¨²blico, por lo que dimos a la Guardia Urbana la orden de retirarse y de que los Mossos d¡¯Esquadra se encargaran de la situaci¨®n¡±, inform¨® Recasens.

Para ?ngel Marcos Gonz¨¢lez, el secretario general de Sapol ¡ªsindicato mayoritario del cuerpo¡ª acciones como esta son ¡°humillantes para los agentes¡±. Gonz¨¢lez asegura que el dispositivo del domingo estaba programado y ¡°se sab¨ªa de sobra que era una manifestaci¨®n¡±. ¡°Nos pidieron ir con el chaleco antitrauma y el casco en m¨¦todo transporte por si hab¨ªa palos¡­ minutos m¨¢s tarde nos ordenaron la retirada del lugar¡±, lamenta Gonz¨¢lez. ¡°?Por qu¨¦ nos env¨ªan si no tenemos funciones de antidisturbios? Si las competencias son de los Mossos, que vayan ellos o que los manifestantes campen a sus anchas¡±.

Las funciones de los que hasta ahora eran antidisturbios se encuentran en el limbo. ¡°La USP no s¨®lo hac¨ªa de antidisturbios, tambi¨¦n protege dispositivos y edificios del Ayuntamiento y ayuda en situaciones excepcionales a los compa?eros que no cuentan con los mismos medios¡±, alega Recasens.

Los agentes seguir¨¢n en ese limbo hasta que, en mayo, se presente el nuevo Plan Director. Recasens explica que se trata de reorganizar el cuerpo ¡°desde dentro¡± y bajo criterios de ¡°territorio, proximidad y transparencia¡±. Seg¨²n Recasens, la ciudadan¨ªa agradecer¨¢ que la Guardia Urbana no disponga de antidisturbios ¡°porque no todo acaba corriendo por la Rambla, una imagen que detesto de cuando era joven y yo era de los que corr¨ªa¡±. Gonz¨¢lez critica el plan: ¡°No saben qu¨¦ quieren hacer ni si van a quitar la USP¡±.