La c¨¢mara de Villaronga rinde un gran homenaje al talento de la Novell

Era inevitable sentir algunas dudas a priori acerca de El testament de la Rosa, la pel¨ªcula que muestra a la actriz Rosa Novell ciega y poco antes de morir de c¨¢ncer ensayando ante la c¨¢mara el que deb¨ªa ser su ¨²ltimo trabajo esc¨¦nico y que nunca lleg¨® a realizarse. Lo normal era sentir prevenci¨®n ante lo que podr¨ªa haber sido un ejercicio de f¨²nebre melancol¨ªa o incluso de imp¨²dica necrofilia. Despu¨¦s de ver la pel¨ªcula no hay lugar para los reparos: es un filme bell¨ªsimo, emocionante y que por encima de todo muestra a una gran actriz en la cima de su talento, haciendo de la mejor manera aquello para lo que naci¨®, actuar.

La cinta de Agust¨ª Villaronga, estrenada anoche en la Filmoteca de Catalu?a en una sesi¨®n con familiares y amigos revestida de much¨ªsima emoci¨®n, tiene momentos absolutamente extraordinarios, sublimes, en los que la vida ¡ªy la muerte¡ª de Rosa Novell se incardina con inmensa sabidur¨ªa (la del cineasta y la de la actriz) en la obra que se ensaya, El testament de Maria, de Colm T¨®ib¨ªn, un mon¨®logo de la Virgen en primera persona que finalmente llevaron a escena Villaronga y Blanca Portillo.

Uno de esos momentos se?eros de la pel¨ªcula es cuando Rosa Novell relata la crucifixi¨®n de Cristo ofreciendo una inmensa lecci¨®n interpretativa plena de detalles que la c¨¢mara de Villaronga capta con respeto y cari?o pero tambi¨¦n con la glotoner¨ªa de un artista que reconoce el genio de otro (y la excepcionalidad de su situaci¨®n) y se recrea en ¨¦l. El blanco y negro de la pel¨ªcula, de calidad expresionista en muchos momentos, muestra a la Novell en medio de una verdadera epifan¨ªa, parad¨®jicamente muy vital, en la que su rostro y su cuerpo d¨¦biles y asolados se revisten de una majestuosidad que hace pensar en la Juana de Arco de Jean Seberg o en la de Ren¨¦e Jeanne Falconetti filmada por Dreyer. Otro momento estremecedor de la pel¨ªcula, que se proyecta en los cines Texas a partir del viernes, es, dadas sus connotaciones, el relato que la Novell como Mar¨ªa, hace del episodio de la muerte y resurrecci¨®n de L¨¢zaro. Las frases e im¨¢genes fluyen en un juego de significados y alusiones de los que, evidentemente, son muy conscientes tanto la actriz como el cineasta, que aparece en la pel¨ªcula d¨¢ndole la r¨¦plica a la Novell y dirigi¨¦ndola.

No pueden dejar de se?alarse otras escenas que dejan una honda impresi¨®n en la retina y la memoria, como las de la actriz caminando desenfocada, tendida en el lecho o sentada junto a su marido, el escritor Eduardo Mendoza, mientras este le lee. Esas y otras im¨¢genes ¨ªntimas, as¨ª como retratos de juventud, se mezclan con las de los ensayos, cruzando lo personal y lo profesional. El filme incluye algunos momentos distendidos que hasta hicieron re¨ªr al p¨²blico.

Antes de la proyecci¨®n, en la sala abarrotada (entre los presentes estaban la alcaldesa Ada Colau y la presidenta del Parlament, Carme Forcadell), presentaron el filme su director y la productora, Isona Passola; Mendoza, el hermano Queco Novell, y el director adjunto y buen amigo de la actriz, Octavi Mart¨ª.

¡°Ella quiso aprovechar hasta el ¨²ltimo momento para hacer teatro¡±, se?al¨® Passola, que recalc¨® que ese fue el motivo de que la Novell aceptara que la rodaran ensayando El testament de Mar¨ªa. ¡°No ve¨ªa y sin embargo ten¨ªa una luz tremenda que es la que transmite la pel¨ªcula¡±. Villaronga destac¨® ¡°la entrega de Rosa¡± y dijo que lo que empez¨® como un favor a ella, para hacerle algo m¨¢s llevadera la enfermedad, ¡°se convirti¨® en un favor a todos nosotros¡±.

Mendoza explic¨® que cuando Passola y Villaronga fueron a proponerle hacer una pel¨ªcula a la Novell, ¨¦l se opuso. Le parec¨ªa una locura ante su fragilidad. ¡°Yo me equivocaba¡±, continu¨®. ¡°Cuando uno est¨¢ al lado de un enfermo est¨¢ m¨¢s pendiente del convaleciente que de la persona. Ella quer¨ªa hacer esta pel¨ªcula. Quer¨ªa morir haciendo de actriz¡±. El escritor dijo que ha visto la pel¨ªcula pero que anoche no iba a volver a verla. ¡°A¨²n no. Me golpe¨® mucho. Vi que no era un documental sino una verdadera pel¨ªcula, y una buena pel¨ªcula. No es un documento misericordioso sobre una persona a las puertas de la muerte e invidente, sino el trabajo de una actriz actuando, y muy bien dirigida¡±.

Queco Novell dijo que a ¨¦l tambi¨¦n le cost¨® entender al principio el proyecto pero que le pareci¨® bueno que hiciera pensar a la actriz en algo que no fuera la situaci¨®n en que se encontraba. Para finalizar, Pasola ley¨® un mensaje del director Hermann Bonnin (que fue profesor de la Novell y que comparti¨® con ella montajes y rodajes), que concluy¨® con un ¡°contra la muerte, arte¡±.

A recordar el texto que Rosa Novell recita sobre un montaje de fotos suyas: ¡°El encanto y la belleza que irradiaba necesitaban de otro reino en el que prosperar¡±.