¡°Todos los catalanes deber¨ªan visitar su museo¡±
La viuda del violonchelista intenta localizar grabaciones y documentos personales para reforzar su mensaje
En el mundo hay m¨¢s de 400 calles con el nombre de Pau Casals, de ellas, 237 est¨¢n en Catalu?a; son innumerables las bibliotecas y auditorios que llevan el nombre del maestro violonchelista y es uno de los nombres que se citan ¡ªcasi de forma inconsciente¡ª como uno de los catalanes universales. Sin embargo, probablemente la figura de Casals sea m¨¢s conocida fuera de Catalu?a y de Espa?a. Esa es la sensaci¨®n que tiene la viuda del maestro, Marta Casals, que ha visitado Barcelona con motivo del acto ¡°Pau Casals, m¨²sica y compromiso humanitario¡± organizado por la Fundaci¨®n Pau Casals con la participaci¨®n del comit¨¦ catal¨¢n de ACNUR. Impulsora de la Fundaci¨®n junto con su marido ¡ªla crearon en 1972, un a?o antes de la muerte del maestro¡ª , no entiende c¨®mo es posible que el museo que lleva su nombre en Sant Salvador (El Vendrell ) ¡ªen la que fue su casa hasta que se exili¨® en 1939¡ª no tenga m¨¢s p¨²blico: ¡°Una visita al museo sirve para entender mucho mejor al maestro, hay cartas que emocionan, objetos que le rodearon en su vida, pinturas excepcionales. Pido a todos los catalanes que lo visiten un d¨ªa, que se desplazen a Tarragona, es un viaje muy corto hoy en d¨ªa¡±, afirma su viuda, una mujer muy vital que no ceja en promover el legado, musical y humanitario, del hombre del que fue su alumna ¡ªten¨ªa tan solo 14 a?os cuando le conoci¨®¡ª y con el que se cas¨® en 1957, cuando ella ten¨ªa 20 a?os y el maestro 60 m¨¢s.
Las cifras del n¨²mero de visitantes del museo dan la raz¨®n a su reivindicaci¨®n porque el a?o pasado recibi¨® 18.000 visitas ¡ª al margen del programa educativo ¡ª las mismas que tuvo en 2001, cuando se reabri¨® tras una profunda reforma.
Casals no quiere entrar en pol¨¦mica cuando se le pregunta sobre qu¨¦ actitud tendr¨ªa el maestro ¡ªque pronunci¨® el mundialmente famoso I'm a catalan en su intervenci¨®n en la ONU en 1971¡ª sobre los anhelos independentistas de Catalu?a: ¡°Era muy catal¨¢n pero a la vez muy universal. No puedo imaginar qu¨¦ pensar¨ªa y, adem¨¢s, las circunstancias son muy diferentes¡±.
Violonchelista, tom¨® la decisi¨®n de dejar su carrera profesional en 1958, despu¨¦s de tres conciertos en los que toc¨® con la Sinf¨®nica de Puerto Rico bajo la direcci¨®n del maestro, ya su marido. Y opt¨® por consagrarse a ¨¦l y ayudarle en su lucha humanitaria ¡ª¡±me imagino qu¨¦ dir¨ªa ahora con el drama de Siria¡±¡ª adem¨¢s de acompa?arle en su ¨²ltima etapa como m¨²sico: ¡°hizo m¨¢s de 38 audiciones por diferentes pa¨ªses de El Pessebre en los ¨²ltimos diez a?os de vida, con m¨¢s de 80 a?os. Era incansable¡±.
Uno de los objetivos de la viuda del violonchelista ¡ªque se neg¨® a pisar Rusia, Alemania y se exili¨® de Espa?a por los reg¨ªmenes fascistas¡ª es recuperar todas las grabaciones que pueda de los conciertos que realiz¨® ¡°y, por supuesto, todas las fotograf¨ªas que se pudieron registrar, cartas y objetos que tuvieron relaci¨®n con ¨¦l. Hace poco hemos localizado una pel¨ªcula de cuya existencia no sab¨ªamos nada. Queremos tener todo el material posible que reafirme el testimonio del maestro¡±. Y una forma de mantener su esp¨ªritu vivo es la beca Pau Casals ¡ªcon 32 a?os de historia¡ª creada para apoyar a j¨®venes violonchelistas y que aspira a convertir en un ¡°referente mundial¡±.
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