¡°Somos expertos en forjarnos la infelicidad¡±
N¨²ria Cadenes, ex independentista radical, publica su tercera novela, ¡®Tota la veritat¡¯
¨²ria Cadenes (Barcelona, 1970) solo quiere hablar de literatura. Viniendo de ella no es una declaraci¨®n de intenciones cualquiera. ¡°La literatura es lo que me hace feliz y lo que me hace sufrir. Est¨¢ bien sentarse para hablar de literatura, para variar, porque siempre acabamos en lo mismo¡±. ¡°Lo mismo¡± es su lucha independentista cofundando Maulets, sus cuatro a?os de prisi¨®n por participar en un atentado fallido de Terra Lliure en 1988 y su reciente experiencia como dirigente del partido Solidaritat Catalana. Cadenes ha ganado el VII premio de novela negra Crims de tinta con Tota la veritat (RBA-La Magrana), relato sobre el asesinato de un empresario.
Cadenes hace 17 a?os que reside en Valencia, donde se traslad¨® por amor. Es la librera del Octubre Centro de Cultura Contempor¨¢nea, buque insignia de Acci¨® Cultural. Naci¨® con el apellido Cadenas, pero firma Cadenes: ¡°Normalizo el apellido, con el permiso de mi padre¡±. La librer¨ªa del Centre Octubre conserva un mural de los almacenes El Siglo, que ocupaban antiguamente el edificio, combinados con una escultura de Mariscal que representa el cemento devorando la huerta valenciana.
Rodeada de libros, Cadenes parece feliz, quiz¨¢ por esto no quiere hablar ni de su pasado. Es persona de trato agradable que sorprende que en Tota la veritat desprenda tanta amargura. Hay una violencia cotidiana, expuesta por ejemplo en repetidas muertes brutales de animales, que golpean al lector. Cadenes explica que escribe ¡°sobre una violencia que parece normal, y que no lo deber¨ªa ser. Una manera de matar gatos, que conozco personas que lo hacen, es cogerlos cuando nacen y estamparlos contra una pared. Lo hace un chaval de 15 a?os y no lo hace como una cosa sanguinaria; lo hace y punto. Lo encontramos normal, envuelto en nuestra civilidad cotidiana hasta que sale en las noticias y todos nos fustigamos. Pero esto nos rodeaba y lo encontr¨¢bamos normal... La realidad puede ser horripilante¡±, sentencia.
La visi¨®n que ofrece de la maternidad es traum¨¢tica, y para conseguirlo se inspira en Maria Merc¨¨ Mar?al: ¡°Intent¨¦ crear el personaje de Ver¨®nica, que no quer¨ªa tener hijos. Por eso ve a su hija con frialdad. Los versos de Mar?al me ayudaron a dibujar este perfil. Aquellas im¨¢genes tan salvajes de ella, la hiedra que alimentas y al mismo tiempo te estrangula, o como si un tibur¨®n te arranca el brazo y lo lanza a la playa, que es una de las im¨¢genes del parto m¨¢s bestias que se han escrito¡±.
Ver¨®nica es una de las protagonistas de Tota la veritat. Cadenes es severa con el car¨¢cter que ha escrito para ella, una mujer que renuncia a sus ambiciones para acomodarse a los caprichos del marido. El marido dir¨ªa que la sociedad ha obligado a Ver¨®nica a renegar de su voluntad, pero la autora no es tan benevolente con el personaje: "Los individuos tenemos capacidad de reacci¨®n. Si no nos queda esto, ?qu¨¦ har¨ªamos? Tus actos son tambi¨¦n responsabilidad tuya. Somos expertos en forjarnos la infelicidad. ?Por qu¨¦ hacemos esto o aquello si nos est¨¢ destrozando la vida? Pensamos que es culpa de factores externos , pero somos nosotros los que sembramos nuestra infelicidad¡±.
Tota la veritat tiene pocos pasajes pol¨ªticos. Uno de estos dice: ¡°¡®Si no nosotros, ?qui¨¦n? Si no ahora, ?cu¨¢ndo?¡¯ Con esta frase justificaba sus fiestas. Un carpe diem de la cultura Baader Meinhof¡±. Puede entenderse como una visi¨®n ir¨®nica de una generaci¨®n, pero Cadenes dice que quiere ser cr¨ªtica. ¡°Si no es hoy, ser¨¢ ma?ana; y si no somos nosotros, ser¨¢n otros. El mundo no se acaba contigo. Intenta ser una cr¨ªtica a un personaje arribista como Robert. Es quien ondea la bandera m¨¢s encendida, y quiz¨¢ la m¨¢s vac¨ªa. Es el ¨²nico de la obra para quien no hallo justificaci¨®n¡±.
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