El Supremo da la raz¨®n por tercera vez a unos vecinos de Barcelona
El alto tribunal se?ala al Consistorio por intentar ¡°legalizar¡± con un cambio urban¨ªstico una edificaci¨®n declarada ilegal en Sarri¨¤
Los vecinos de Sarri¨¤ (Barcelona) han logrado que el Tribunal Supremo les d¨¦ la raz¨®n no una ni dos, sino tres veces. Conf¨ªan en que esta sea la ¨²ltima. Llevan 20 a?os pleiteando contra el Ayuntamiento de Barcelona por un proyecto urban¨ªstico (la manzana Sandoz) que consideran ilegal. En una resoluci¨®n a la que ha tenido acceso EL PA?S, el Supremo ha ratificado la sentencia que hace dos a?os conden¨® al consistorio y ratific¨® que parte del conjunto inmobiliario debe ser derruido.
La guerra comenz¨® a mediados de los 90. El Ayuntamiento, gobernado entonces por el PSC, aprob¨® un plan urban¨ªstico para una manzana de Sarri¨¤ que, hist¨®ricamente, hab¨ªa acogido los laboratorios Sandoz. En ese espacio, situado entre las calles de Fontcuberta, Santa Am¨¨lia, D¡¯Osi y Cardenal Vives y Tut¨®, la constructora Indret Vertical levant¨® tres edificios de 185 viviendas.
Ya en 2004, el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC) anul¨® los tr¨¢mites urban¨ªsticos que aprob¨® el Ayuntamiento para dar luz verde a la promoci¨®n inmobiliaria. Declar¨® ilegales los balcones (por la amplitud de la calle) y los sobre¨¢ticos (porque no se ajustaban a la normativa) y orden¨® su derribo. En derecho urban¨ªstico, sin embargo, la ejecuci¨®n de las sentencias es compleja. Muchas veces, como en este caso, el edificio ya est¨¢ construido y acoge a cientos de familias. Las partes afectadas optan, en ocasiones, por intentar dar cobertura legal a la construcci¨®n con un cambio normativo a posteriori.
Seis a?os despu¨¦s, en 2010, el Supremo confirm¨® esa sentencia y dio por primera vez la raz¨®n a los vecinos. Mientras tanto, sin embargo, el Ayuntamiento de Barcelona ya hab¨ªa iniciado un nuevo tr¨¢mite urban¨ªstico (la modificaci¨®n del plan general metropolitano) que, de nuevo, top¨® con la oposici¨®n de los vecinos. El TSJC les dio la raz¨®n en primera instancia ya en 2009 con una sentencia contundente en la que acusaba al consistorio de practicar un ¡°urbanismo a la carta¡± y ¡°contrario al inter¨¦s general¡±. Como los recursos de casaci¨®n son lentos, no fue hasta 2013 que el Supremo volvi¨® a pronunciarse.
La resoluci¨®n dictada ahora por el Supremo, la tercera, recuerda todo ese periplo. Y confirma la ¨²ltima de las dictadas por el TSJC, en julio de 2014. Esa resoluci¨®n de hace dos a?os declara nulas las modificaciones de planeamiento que el Ayuntamiento impuls¨® en su empe?o por hacer legal lo ilegal. El TS acusa al Ayuntamiento de incurrir en una ¡°desviaci¨®n de poder¡±. Su intenci¨®n, ¡°apenas disimulada¡±, no tiene nada que ver con el escrupuloso cumplimiento de las normas urban¨ªsticas, sino m¨¢s bien con ¡°el deseo de legalizar las edificaciones¡± de la manzana Sandoz. Adem¨¢s de rechazar su en¨¦simo recurso, le impone el pago de las costas.
La agon¨ªa judicial ha causado malestar en los vecinos de Sarri¨¤, que se han sentido deso¨ªdos (y ferozmente combatidos) por la administraci¨®n. El consistorio siempre se ha mantenido firme en su estrategia. Ya en 2004, tras la primera resoluci¨®n, el entonces primer teniente de alcalde, Xavier Casas, asegur¨® que los elementos ¡°esenciales¡± del proyecto eran correctos y que los magistrados se equivocaron al medir la anchura de las calles.
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