M¨¢s currantes que turistas en la L9 del metro

La l¨ªnea 9 Sud del metro de Barcelona, la que pasa por la feria de L¡¯Hospitalet, los pol¨ªgonos, el centro de El Prat y llega al aeropuerto, registr¨® en mayo una media de 47.000 pasajeros diarios los d¨ªas laborables. De estos, casi 6.800 entraron o salieron por la estaci¨®n de la T1 del aeropuerto, seg¨²n Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), y 2.300 por la estaci¨®n de la T2. Esta cifra (9.100 en total) y pasar unas horas en los vagones y andenes y hablar con los empleados basta para constatar que, por ahora, es una l¨ªnea m¨¢s utilizada para desplazamientos locales como ir y volver de trabajar, que para ir al aeropuerto, que cuesta 4,50 euros.

Lo que es complejo es valorar si 47.000 pasajeros son muchos o pocos, pero ah¨ª van algunas comparaciones con otras l¨ªneas de metro o con las l¨ªneas de bus metropolitanas que tienen como destino el aeropuerto. Por ejemplo, los 47.000 pasajeros diarios de la L9 Sud se acercan a los 50.000 de la l¨ªnea menos presionada de la ciudad, que es precisamente la suma de la L9 en el tramo norte, hacia Santa Coloma, y su ramal a Badalona, la L10. En conjunto, la red de metro tiene 1,3 millones de usuarios diarios. Otra comparativa, sumando el Aerob¨²s (15.200 personas que van y vienen directas del aeropuerto por 5,90 el trayecto) y las cuatro l¨ªneas metropolitanas (9.200), hay 24.400 personas que cada d¨ªa viajan en buses que van a las terminales.

Hay otro dato revelador, y es que los 47.000 viajeros diarios de la L9 Sud suponen el 63 % de la demanda prevista cuando haya pasado un a?o, en febrero de 2017. Un dato que teniendo en cuenta que la l¨ªnea es nueva, perif¨¦rica y que su estreno ha coincidido con una tanda de huelgas, fuentes de TMB entienden como satisfactoria, aunque recuerdan que la propia empresa est¨¢ promocionando el nuevo servicio. Del total de viajeros, 25.000 validan sus billetes en alguna de las 15 estaciones que hay entre Zona Universit¨¤ria y Aeroport T1. El resto de viajeros utilizan la L9 procedentes de otras l¨ªneas, transbordando en Torrassa (L1), Collblanc (L5) o Zona Universit¨¤ria (L3).

La L9 Sud es un servicio con varias singularidades. Es nueva, est¨¢ en un extremo de la ciudad y no est¨¢ conectada con la L9 Nord, tiene paradas en trama urbana pero tambi¨¦n en pol¨ªgonos o en Mercabarna, tambi¨¦n en un punto tan dependiente de eventos como la Feria de Montju?c, y adem¨¢s finaliza en el aeropuerto. De ah¨ª que el uso de muchas estaciones var¨ªe mucho por franjas horarias. ¡°Tu ven de seis a ocho de la ma?ana¡±, invitan los empleados de estaciones como Mercabarna o Parc Log¨ªstic. Son horas en las que los vagones van llenos.

En cambio, a media ma?ana de un jueves, es posible que durante un cuarto de hora nadie ¨Cliteralmente, la suma de tres trenes, uno cada cinco minutos¡ªpise un and¨¦n de estaciones como Mas Blau o Parc Log¨ªstic. ¡°Aqu¨ª las horas valle son muy valle¡±, dice un trabajador. Estaciones, por cierto, que son una gozada para los ojos: las de Mercabarna, Parc Log¨ªstic y Europa / Fira, proyectadas por Garc¨¦s-De Seta-Bonet, acaban de recibir un premio FAD de interiorismo.

Tambi¨¦n a primera hora hay afluencia de trabajadores del aeropuerto, como los de las tiendas o las cafeter¨ªas. Y el goteo de personal de tripulaci¨®n es constante durante todo el d¨ªa. Todos estos empleados, por su condici¨®n de trabajadores del aeropuerto, no pagan los 4,50 euros del billete, sino que llegan a la instalaci¨®n con una T-10 especial. En cambio, los viajeros con maleta, aumentan a partir de los jueves por la tarde y durante todo el fin de semana. Hay otra curiosidad, y es el poco tr¨¢fico que registra la parada Aeroport T2, una cuarta parte del de la T1: porque es m¨¢s barato llegar en cercan¨ªas, por el m¨®dico precio de la T-10.