El juez exculpa a Prat y Mant¨¦ de coaccionar al Ayuntamiento de Reus
El auto resuelve que si se hicieron maniobras contra el alcalde para evitar que el caso les salpicase, no tuvieron relevancia penal
No hay indicios para seguir investigando las presuntas coacciones que Carles Mant¨¦ y Josep Prat habr¨ªan ejercido sobre el Ayuntamiento de Reus para asegurarse salir exonerados de la trama de corrupci¨®n Innova. As¨ª lo manifiesta el juez instructor de la macrocausa judicial, en un auto que levanta el secreto de sumario sobre la que se conoce como pieza 13 del expediente y que ha hecho p¨²blica el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a. El juez de Reus desmonta la teor¨ªa de los investigadores de la Guardia Civil, seg¨²n la cual Mant¨¦, exdirector del Servei Catal¨¤ de la Salud (CatSalut), y Prat, expresidente del Institut Catal¨¤ de la Salud (ICS) y principal encausado por el caso Innova, movieron hilos para presionar a Carles Pellicer, alcalde de Reus, y a Teresa Gomis, exteniente de alcalde.
La l¨ªnea argumental de los investigadores de la Guardia Civil derivaba de la documentaci¨®n aparecida en los domicilios de Josep Prat, en Tarragona, y de Carles Mant¨¦, en Matar¨®.
La detenci¨®n y el registro de las viviendas de Prat y Mant¨¦, en febrero del 2013, puso a cuerpo descubierto una gran cantidad de documentaci¨®n sobre Innova y otras operaciones relacionadas con la sanidad p¨²blica catalana. La Guardia Civil descubri¨® una cartera de piel de la marca Balmain Paris con papeles manuscritos en los cuales el exdirector del CatSalut trazaba una presunta estrategia de presi¨®n contra altos cargos del ayuntamiento de Reus.
Con estas maniobras, Mant¨¦ habr¨ªa pretendido que no se descubrieran las facturas que cobraba del holding de empresas municipales y asegurarse no salir salpicado de las pr¨¢cticas irregulares a Innova. En el documento figuran expresiones como ¡°carnaza contra el alcalde¡±, ¡°alcalde hacer bajar el sufl¨¦; abrir expediente informativo¡± y ¡°preparado documento contra Teresa y alcalde¡±. En cuanto a Prat, la Guardia Civil sospechaba que el expresidente del ICS ten¨ªa informaci¨®n comprometida de familiares de Pellicer y Gomis y que estaba dispuesto a hacerla p¨²blica si no lo proteg¨ªan.
A pesar de todo, el auto judicial resuelve ahora que "no hay rastro que las presiones, si existieron, tuvieran suficiente entidad para tener relevancia penal".
Esta es la primera pieza del colosal expediente judicial que archiva el juez Diego ?lvarez de Juan. En la resoluci¨®n el juez aprovecha para hacer menci¨®n de la dificultad que implica investigar una causa como esta, con m¨¢s de 110 imputados, desde un juzgado escaso de recursos como es el de Reus. Unos juzgados que, dice el magistrado, "est¨¢n condenados a sobrevivir en un hundimiento insoportable y quiz¨¢s infinito, hasta que no se creen m¨¢s juzgados". En este contexto, admite que los plazos que se hab¨ªa fijado para instruir la causa "han saltado por los aires".
Gomis, bajo la lupa
Por otro lado, el juez tambi¨¦n ha levantado el secreto de sumario sobre la pieza 13, la que investiga un posible trato de favor del Ayuntamiento de Reus hacia el grupo Bon Preu. Fue la Guardia Civil qui¨¦n, en un operativo que llev¨® a Teresa Gomis a pasar tres d¨ªas en los calabozos, llevo a cabo varios registros para encontrar documentaci¨®n que aclarara la venta de un solar municipal a la empresa Bon Preu. Los registros eran consecuencia de una denuncia an¨®nima que hab¨ªa puesto los agentes sobre la pista de los supuestos privilegios que dispensaba el consistorio a la cadena comercial de Osona para que pudiera abrir un supermercado en la zona del Tecnoparc. El juez inici¨® una investigaci¨®n y localiz¨® varias correos electr¨®nicos intercambiados entre Teresa Gomis y Joan Font, propietario de Bon Preu, y donde quedaba clara la voluntad del Ayuntamiento de hacer una subasta a medida para adjudicar los terrenos a Bon Preu.
El juez instructor no se?ala directamente la comisi¨®n de ning¨²n delito pero s¨ª invita a la Fiscal¨ªa y a las acusaciones particulares a que valoren si aprecian la concurrencia de alguna conducta il¨ªcita en la conducta de Teresa Gomis.
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