Inundan una finca protegida con toneladas de tierra
Tras la denuncia de Ecologistas en Acci¨®n, el Gobierno regional ha paralizado las obras
Los ecologistas dieron la voz de alarma. Los propietarios de una finca situada en terreno protegido del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares estaban vertiendo tierras en grandes cantidades. Como consecuencia, se ha elevado la cota de la parcela de 70.000 metros cuadrados en varias zonas. Los due?os cuentan con un permiso de regeneraci¨®n de la finca que permit¨ªa realizar "ligeros movimientos de tierras¡±. La Comunidad de Madrid ha paralizado la actuaci¨®n.
El continuo tr¨¢fico de camiones por el camino de tierra de acceso a la finca pegada al monte de El Pardo levantaba una densa polvareda amarillenta. Ecologistas en Acci¨®n calcula que han estado entrando en la parcela unos 70 tr¨¢ileres diarios, con capacidad para transportar 20 metros c¨²bicos de tierra, que, dicen, proced¨ªan del vaciado de terrenos en Montecarmelo y Arroyofresno.
Los propietarios de la parcela compactaban posteriormente este material y lo aplanaban en diferentes zonas. Ten¨ªan permiso de la Consejer¨ªa de Medio Ambiente para llevar a cabo una restauraci¨®n de la finca, que inclu¨ªa la plantaci¨®n de unos 800 ¨¢rboles de especies aut¨®ctonas.
Pero los "ligeros movimientos de tierra" autorizados se convirtieron en un vertido de grandes dimensiones, que par¨® debido a la denuncia de Ecologistas en Acci¨®n. Algunos de sus miembros se plantaron a las puertas de la finca desplegando una pancarta en un intento de que se pusiera fin al relleno.
En la parcela, explica ?ngeles Nieto de la organizaci¨®n ecologista, crec¨ªa vegetaci¨®n tipo matorral, sobre todo retama, y encinas. ¡°Buena parte se ha eliminado", sostiene. A la vez se ha destruido el relieve ondulado, formada por resaltes y vaguadas, lo que afectar¨¢ a la escorrent¨ªa y cursos de agua de la zona, puntualiza la ecologista.
El permiso concedido inclu¨ªa la retirada de los escombros y vertidos ¡ªacumulados en la finca antes de que la adquirieran los nuevos due?os¡ª. Adem¨¢s, se les permit¨ªa la aportaci¨®n de tierras limpias, que se utilizar¨ªan para tapar los agujeros producidos al retirar dichos restos, y suavizar taludes con el objetivo de evitar escorrent¨ªas.
Tanto el Gobierno regional como la Guardia Civil (Seprona) abrieron una investigaci¨®n, que ha conducido a la paralizaci¨®n de la obra. "No hay constancia de que hayan retirado los escombros y los movimientos que est¨¢n realizando necesitan una evaluaci¨®n de impacto ambiental simplificada", indican fuentes de la Consejer¨ªa de Medio Ambiente.
Los due?os sostienen que su ¨²nica intenci¨®n es recuperar la finca, muy degradada, y con unas vistas impresionantes tanto a la ciudad como a la sierra madrile?a. "Los alrededores est¨¢n llenos de vertidos de obras de los que nadie se ocupa y lo ¨²nico que queremos es disfrutar de nuestra propiedad", explican.
Desde la organizaci¨®n ecologista recuerdan que el terreno est¨¢ clasifica como suelo no urbanizable de especial protecci¨®n en el plan general de ordenaci¨®n urbana de Madrid, son colindantes con la tapia del monte de El Pardo, y est¨¢n incluidas en zona B3 (Parque Comarcal Agropecuario a Regenerar) y en Zona de Especial Conservaci¨®n Red Natura.
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