Denunciados en un a?o 791 clientes de prostitutas en la colonia Marconi

La colonia Marconi, situada junto al pol¨ªgono industrial de Villaverde, ha sufrido desde hace a?os los problemas de la prostituci¨®n. De poco han servido las medidas impuestas hace tiempo por el Ayuntamiento, como la ya derogada de restringir la circulaci¨®n a partir de las diez de la noche. La entrada en vigor de la Ley de Seguridad Ciudadana dio un nuevo instrumento a la polic¨ªa para frenar la prostituci¨®n. ¡°Sabemos que no podemos acabar con ello, porque no es un tema policial sino mucho m¨¢s amplio como servicios sociales¡±, reconoce el comisario jefe de la Unidad contra Redes de Inmigraci¨®n Ilegal y Falsedades Documentales (Ucrif) de Madrid, Jes¨²s Mar¨ªa G¨®mez Mart¨ªn.

Los agentes de Extranjer¨ªa patrullan en coches camuflados y a varias horas del d¨ªa y de la noche, adem¨¢s de los fines de semana. Se centran en especial en el llamado pol¨ªgono del Gato, en las proximidades de la avenida Real de Pinto y m¨¢s alejado de las viviendas. All¨ª las mujeres est¨¢n repartidas por nacionalidades. Durante las primeras horas, los polic¨ªas suelen denunciar a las prostitutas que est¨¢n sin ropa en la calle (con el pecho descubierto o sin tanga). Les imponen 100 euros por exhibicionismo (50 en caso de que paguen en periodo voluntario).

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La din¨¢mica de los agentes consiste en patrullar por las calles sin levantar sospechas. Basta con un conductor se pare y se ponga a hablar con una mujer de forma que obstaculice la v¨ªa p¨²blica. O que lo haga en un lugar frecuentado por menores. La multa va de los 601 euros a los 30.000. Eso s¨ª, la Delegaci¨®n del Gobierno en Madrid siempre suele imponer el m¨ªnimo. Por desobediencia o no querer identificarse, los agentes de la Ucrif han impuesto con la ley mordaza 141 sanciones.

Los polic¨ªas paran al conductor y le piden su documentaci¨®n. Un funcionario se pone a hablar con la mujer y le dice que, si es v¨ªctima de trata de personas, ellos les pueden sacar de la organizaci¨®n. ¡°Todas nos dicen que est¨¢n de manera voluntaria y que nadie les obliga a ejercer la prostituci¨®n¡±, afirma un agente de la Ucrif. Mientras, otros agentes tramitan la denuncia, que la remiten a la Delegaci¨®n del Gobierno.

Lo que reconocen los agentes que no existe un perfil tipo de los clientes. Los hay j¨®venes, mayores y de todas las clases sociales. As¨ª, no es raro ver coches utilitarios destartalados que se mezclan con flamantes turismos de lujo reci¨¦n estrenados. ¡°Vienen de todas las partes de Madrid y de las provincias lim¨ªtrofes, pero abundan sobre todo de Toledo¡±, relata un mando policial. El precio de los servicios oscila entre los 15 y los 20 euros, seg¨²n sea completo o no. ¡°Cuando a veces cacheamos a las mujeres, vemos que llevan las carteras llenas de dinero. Algunas nos dicen que pueden sacar hasta 400 euros al d¨ªa¡±, afirma una agente de Extranjer¨ªa. De ah¨ª, que muchas mujeres no quieran ejercer en clubes, donde tienen que repartir sus ganancias con el due?o del establecimiento.

¡°La situaci¨®n ha cambiado mucho. Hace siete u ocho a?os, hab¨ªa muchas m¨¢s mujeres. Lo que tambi¨¦n nos hemos dado cuenta es que ellas van y vienen. A veces las vemos en clubes y otras en la calle¡±, a?ade un oficial. ¡°En general son mujeres muy j¨®venes, de entre 18 y 20 a?os. Eso s¨ª, no hay ninguna menor¡±, a?ade el mando policial.

Mercado de pal¨¦s

Las mujeres est¨¢n las 24 horas del d¨ªa, haga fr¨ªo o calor, llueva o luzca un sol de justicia. La zona se ha convertido en un aut¨¦ntico estercolero, donde abundan los preservativos usados y los papeles tirados en los m¨¢rgenes de las calles. Las prostitutas se sit¨²an separadas varios metros para dejarse distancia y que los clientes puedan verlas. En invierno, existe hasta un mercado de pal¨¦s. Algunos se dedican a suministrar estas maderas que las usan para hacer fogatas y luchar contra el fr¨ªo.

Seg¨²n reconoce la polic¨ªa, las excusas que ponen los clientes para no ser sancionados son de todo tipo. Aseguran que les estaban preguntando por la direcci¨®n de una calle o por la estaci¨®n del metro. ¡°?Pero como te va a decir nada si no sabe ni decir hola en espa?ol?¡±, bromea un agente de la Ucrif. Otros afirman que es su novia o un familiar. ¡°Muchos nos dicen que les vamos a arruinar la vida o que les va a costar el divorcio. De poco les sirve, la denuncia se la llevan¡±, concluye el oficial de polic¨ªa.