Boloencierro de Mataelpino, marca registrada
Un peque?o pueblo madrile?o ha empezado a exportar su particular versi¨®n de la celebraci¨®n popular
La cosa tiene su intr¨ªngulis. Al parecer, hay que calcular bien la trayectoria, porque si no te puede dar un buen golpe esa gigantesca bola de poliesp¨¢n de tres metros de di¨¢metro y 200 kilos de peso que persigue cada a?o a los corredores del peculiar Boloencierro de Mataelpino, un peque?o pueblo de 1.700 habitantes a los pies de la sierra de Guadarrama, a 50 kil¨®metros de capital. Se trata de un encierro muy parecido al que se hace con toros ¡ªvallas de protecci¨®n a los lados de las calles, participantes amontonados que corren y esquivan¡ª, pero en lugar de animales lo que se lanza cuesta abajo es esa enorme pelota de corcho blanco. Y el pasado fin de semana se celebr¨® por sexto a?o consecutivo.
La famosa escena de Indiana Jones perseguido por una gran piedra que abre En busca del arca perdida estaba sin duda en la imaginaci¨®n del grupo de vecinos de Mataelpino que idearon esta peculiar celebraci¨®n. Aquel a?o, 2011, en plena crisis econ¨®mica, el municipio no ten¨ªa presupuesto para celebrar festejos taurinos durante las fiestas patronales de agosto, las de San Bartolom¨¦. Pero los lugare?os se negaban a quedarse sin encierro, explica Javier de los Nietos (PSOE), alcalde de El Boalo, la localidad a la que pertenece Mataelpino; as¨ª que, a falta de toros, ah¨ª estaba el poliesp¨¢n y la geograf¨ªa inclinada del municipio.
Desde entonces, aquello que empez¨® medio por sorpresa no solo ha ido ganando aficionados y notoriedad ¡ªhan recibido a televisiones hasta del Jap¨®n y de la China, recalca el alcalde¡ª, sino que se ha convertido en la marca tur¨ªstica del peque?o pueblo. Literalmente: desde hace unos meses, Boloencierro Mataelpino es una marca registrada que ya est¨¢ empezando a exportar.
Lo hacen con la versi¨®n para ni?os, que se practica con bolas m¨¢s peque?as y mucho m¨¢s ligeras, fabricadas con formas irregulares para que vayan dando saltos y sea m¨¢s divertido. En este caso, el peligro no es que te pille la pelota, sino acabar por los suelos con un buen rasp¨®n entre los tropezones y empujones de la chavaler¨ªa. ¡°Recomendamos que se corra con pantalones largos y camisa de manga larga¡±, explica De los Nietos.
Este verano, llevar¨¢n el espect¨¢culo infantil a las fiestas patronales de cuatro pueblos de la Comunidad de Madrid: Torrelaguna (3 de septiembre), en las de Cercedilla (10 de septiembre), Navacerrada (11 de septiembre) y Moralzarzal (1 de octubre). El Consistorio serrano estuvo incluso en conversaciones para montarlo en el Sanferm¨ªn Txikito, la celebraci¨®n que completa en septiembre y en el barrio antiguo de Pamplona las famosas fiestas de la capital navarra. Al final no pudo ser, pero el alcalde de Mataelpino no pierde la esperanza de llevar su versi¨®n de la fiesta a la ciudad con los encierros m¨¢s famosos del mundo.
De momento, el pasado fin de semana se volvi¨® a celebrar por las calles de su municipio. Se suele hacer el s¨¢bado y el domingo de la primera semana de festejos. Primero se da la salida a la versi¨®n infantil con las bolas de colores y le sigue la adulta. En este caso, la pelota gigante se lanza dos veces y hasta una tercera si los asistentes as¨ª lo reclaman. El pasado domingo, sin embargo, ni siquiera se lleg¨® a completar la segunda porque a mitad de camino la bola choc¨® y se parti¨® en dos.
Tambi¨¦n hay toros
De los Nietos insiste en que en el pueblo, donde hay, asegura, gran afici¨®n taurina, se compaginan estos particulares encierros con los tradicionales: se celebra uno nocturno, que se suma a dos tentaderos p¨²blicos para los alumnos de la Escuela Taurina de Madrid y una suelta de reses ¡°para valientes solteros y casados¡± y otra suelta de vaquillas para aficionados. ¡°[El Boloencierro] no es algo que separe, sino que une a taurinos y antitaurinos; todos pueden disfrutar de la celebraci¨®n¡±, insiste el alcalde.
?l, que en su d¨ªa fue novillero y corre los dos tipos de encierros, habla de las diferencias entre uno y otro. ¡°Con la bola lo que te sientes es muy peque?ito¡±, asegura. Explica, adem¨¢s, que hay que estar muy atento y no dejar de mirar atr¨¢s porque los golpes del boloncio pueden hacer mucho da?o, sobre todo si te empujan contra las tablas de la valla o contra el suelo, causando en el peor de los casos fuertes traumatismos en la cabeza que despu¨¦s requieren varios d¨ªas de observaci¨®n.
¡°De hecho, suele haber m¨¢s heridos en el Boloencierro que en los de los toros; supongo que porque en estos ¨²ltimos la gente est¨¢ m¨¢s preparada¡±, asegura el regidor. Este a?o, han sido cuatro los heridos corriendo delante del poliesp¨¢n. Dos de ellos tuvieron que ser trasladados al hospital, aunque ya est¨¢n bien, asegura el Ayuntamiento.
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