Un paseo por el arte del grabado
La Biblioteca Nacional expone la valiosa colecci¨®n de Ce¨¢n Berm¨²dez, que incluye a la escuela flamenca o Goya
¡°Quien no sabe ver, no puede sentir, y el que no siente, no?goza¡±, escribi¨® el historiador del arte Ce¨¢n Berm¨²dez (no confundir con el pol¨ªtico Cea Berm¨²dez) en 1827, dos a?os antes de su muerte. Unas palabras que suenan actuales ante la sobreabundancia de im¨¢genes con la que vivimos hoy. Con ellas el analista asturiano ven¨ªa a decir que eran necesarias unas bases s¨®lidas para poder mirar. Y nadie mejor que ¨¦l para indicarlo, poseedor de una de las m¨¢s importantes colecciones de estampas de la ¨¦poca, autor de una imponente historia europea del arte e impulsor de un diccionario art¨ªstico que, con los a?os, se ha visto fundamental. Adem¨¢s de ser creador de multitud de tratados de gran importancia para el mundo de la arquitectura, la escultura y la pintura.
Por eso resulta extra?o que hasta fecha reciente la figura de Ce¨¢n Berm¨²dez no hubiera recibido mayor atenci¨®n medi¨¢tica. Ha tenido que ser la Biblioteca Nacional y una de sus bibliotecarias em¨¦ritas, Elena Santiago, quienes se han encargado de poner algo de luz mediante la exposici¨®n Ce¨¢n Berm¨²dez. Historiador del arte y coleccionista ilustrado (hasta el 11 de septiembre).
¡°Es un representante perfecto de su ¨¦poca¡±, explica Santiago, responsable durante 25 a?os del servicio de dibujos y grabados de la biblioteca. ¡°Su vida esta determinada por los acontecimientos hist¨®ricos: el final del reinado de Carlos IV, la invasi¨®n francesa y la llegada de Fernando VI¡±. El devenir de Berm¨²dez estar¨¢ ligado al de otro ilustrado de aquel periodo Gaspar de Jovellanos, representante de los idearios de la Ilustraci¨®n.
¡°El considera que los artistas son representantes important¨ªsimos de la identidad espa?ola y lo reivindica continuamente¡±, comenta Santiago. De esta manera, realiza el diccionario hist¨®rico de los m¨¢s ilustres profesores de las Bellas Artes en Espa?a, en 1800, cuyos seis vol¨²menes siguen siendo de consulta obligada.
¡°Busca formar una historia del grabado a trav¨¦s de su propia colecci¨®n. Estas obras le permitieron conocer la pintura de Tintoretto, Rafael, Rembrandt o Van Dyck¡±, cuenta Santiago. ¡°La primera colecci¨®n que hizo estaba formada por 745 estampas. Aunque al final de su vida llego a tener unas 13.000. ?l no compraba por comprar. Iba a por los pintores que tambi¨¦n hab¨ªan grabado y a por los mejores grabadores de reproducciones¡±. La mayor¨ªa de estas estampas, algunas muy raras, las obten¨ªa en Sevilla y Madrid, donde hab¨ªa un importante mercado. Se re¨²nen trabajos fant¨¢sticos de la escuela flamenca, italiana y alemana, que nunca antes hab¨ªan sido mostrados juntos.
Aunque probablemente las obras que m¨¢s valor tengan son aquellas que muestran su amistad con Francisco de Goya: tres dibujos que hizo copiando cuadros de Vel¨¢zquez para pasarlos al grabado, entre ellos uno de Las Meninas y varios retratos del propio Ce¨¢n. ¡°Goya cuando conoce a alguien lo hace vivir en sus retratos. Les debieron de presentar en Sevilla, cuando Ce¨¢n fue desterrado y estuvo dirigiendo el Archivo de Indias¡±, indica la comisaria sobre un momento convulso en lo pol¨ªtico, pero de gran compromiso cultural. ¡°Establaron una relaci¨®n muy estrecha. El historiador le asesora en la ordenaci¨®n de las estampas de la tauromaquia y le ayudara en la elecci¨®n de los t¨ªtulos de ¡®Los caprichos¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.