El aut¨¦ntico canal del cuerpo humano

Este paciente empez¨® a sentirse mal en su trabajo de camarero en un restaurante de San Fernando. Sent¨ªa dolores de atr¨¢s hacia adelante en la parte media de la columna. Primero le recetaron calmantes y anest¨¦sicos sin que los m¨¦dicos supieran exactamente qu¨¦ es lo que ten¨ªa. Cuando le vieron en cardiolog¨ªa, se percataron de que ten¨ªa un aneurisma (dilataci¨®n) en la aorta. Se puso en manos del jefe del servicio de Cirug¨ªa Cardiaca del Puerta de Hierro, Alberto Forteza.

La unidad de la aorta la forman tambi¨¦n especialistas de cirug¨ªa vascular, anestesi¨®logos, cardi¨®logos, radi¨®logos y enfermeras. Es una de las que existe en Madrid junto a la del Hospital Cl¨ªnico, que es la decana. ¡°La unidad surge porque cada vez hay m¨¢s prevalencia de las enfermedades de este vaso. Como toca muchas especialidades a la vez, en cada centro se interviene de una manera distinta¡±, reconoce el jefe de servicio. La aorta arranca del coraz¨®n y se prolonga por el cuerpo hasta las venas iliacas, en la parte media del cuerpo humano.

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¡°Lo que se intenta es que el paciente pueda recibir las ¨²ltimas t¨¦cnicas y los mejores avances en esta materia¡±, a?ade el adjunto del departamento de Cirug¨ªa Vascular, Jos¨¦ Gil Sales. Las patolog¨ªas que puede padecer la arteria son de extraordinaria gravedad. Pueden ir desde lesiones que dejen de suministrar la sangre a otros ¨®rganos del cuerpo humano hasta romperse y causar una muerte s¨²bita del paciente.

Una de las enfermedades m¨¢s graves es el llamado s¨ªndrome de Marfan, que es hereditario y es una de las m¨¢s comunes entre la poblaci¨®n. Se da mucho en jugadores de baloncesto con un fenotipo muy caracter¨ªstico: personas altas, con miembros muy largos y que pueden sufrir problemas oculares como desprendimiento de retina. Lo sufrieron personajes famosos como el presidente de los Estados Unidos Abraham Lincoln y el m¨²sico Niccolo Paganini, entre otros. Eso s¨ª, ninguno de ellos muri¨® por esta enfermedad. El primero de un disparo. El segundo, de s¨ªfilis y tuberculosis.

Esa fue la enfermedad que sufri¨® Santamar¨ªa. Durante un tiempo se le intent¨® controlar con medicaci¨®n, pero poco a poco se vio que era insuficiente y que al estar tan dilatada la arteria se pod¨ªa romper en cualquier momento, con el riesgo de morir en el acto. ¡°No entr¨¦ al quir¨®fano nervioso. Estaba muy tranquilo, porque sab¨ªa que era o eso o poder morir en cualquier momento porque, si se romp¨ªa la arteria, lo m¨¢s probable es que no tuviera tiempo de llegar al hospital¡±, reconoce.

La intervenci¨®n dur¨® unas ocho horas y consisti¨® en extirparle la arteria da?ada y sustituirla por una pr¨®tesis vascular artificial, que hace las mismas funciones. ¡°Lo importante de esta unidad es que est¨¢n todos los especialistas trabajando a la vez y se sigue un mismo protocolo tras analizar el caso¡±, analiza el doctor Forteza.

La vida del vecino de San Fernando de Henares ha cambiado radicalmente. Antes no pod¨ªa hacer ning¨²n esfuerzo. Tambi¨¦n tuvo que dejar el deporte, en especial el f¨²tbol, y ni levantar ning¨²n objeto pesado. Al principio, le dieron una minusval¨ªa por la que cobraba unos 1.200 euros, pero ahora se la han bajado y recibe unos 500 al mes. ¡°Todav¨ªa no puedo hacer muchas cosas porque no tengo fuerza en los brazos, pero en cuanto me recupere de nuevo empezar¨¦ con la bicicleta y a correr, que es lo que hac¨ªa antes¡±, reconoce este paciente. ¡°Como no puedo hacer mucho ejercicio f¨ªsico ni estar mucho tiempo de pie, voy a cambiar de profesi¨®n. Estoy estudiando electr¨®nica y rob¨®tica¡±, explic¨®.

Una simple ecograf¨ªa

Una recomendaci¨®n de los doctores, entre los que tambi¨¦n est¨¢ el cirujano vascular Jos¨¦ Porto, es que los pacientes de m¨¢s de 71 a?os se hagan un estudio de la arteria, en especial una ecograf¨ªa, porque es cuando se da mayor probabilidad de sufrir alg¨²n problema grave. ¡°La gente hoy en d¨ªa vive m¨¢s, tambi¨¦n fuma m¨¢s y existen pruebas diagn¨®sticas para poder evitar cualquier problema grave¡±, a?ade el doctor Gil Sales.

Santamar¨ªa no ha recibido todav¨ªa el alta. El pr¨®ximo 8 de octubre tendr¨¢ que pasar por quir¨®fano para una revisi¨®n y comprobar que el implante funciona con total seguridad. ¡°Estoy tranquilo. Ya s¨¦ que he pasado lo peor y que estoy en las mejores manos¡±, concluye el paciente.