Siete d¨ªas repletos de recuerdos y estrenos

ARTE. Frida y Leo.

Pocos artistas hay en la historia del arte que despierten tanta fascinaci¨®n como la mexicana Frida Kahlo (Coyoac¨¢n, 1907-1954). Casada dos veces con el pintor Diego Rivera, la fr¨¢gil y enfermiza Frida consigui¨® que el mundo en el que reinaba su omnipresente esposo se fijara en su obra. Unos trabajos en los que se mezclaban la identidad nacional de los mexicanos, las proclamas del marxismo en el que militaba y los aut¨¦nticos dramas cotidianos de una mujer impedida y frustrada por no poder ser madre. Su magnetismo, basado en su elaborada imagen, su peculiar belleza y su fascinante mirada, la convirti¨® en el objetivo favorito de los grandes fot¨®grafos mexicanos de su ¨¦poca y de muchos de los estadounidenses y europeos que llegaron a tratarla en persona: Lola ?lvarez Bravo, Tina Modotti, Imogene Cunningham, Dora Maar, Peter Juley, Martin Munkacsi, Nickolas Muray, Carl van Vechten y Edward Weston, entre otros muchos.

Aunque ninguno como Leo Matiz (Aracataca, 1917-Bogot¨¢, 1998) supo extraer la personalidad de la Frida m¨¢s ¨ªntima. La exposici¨®n Frida Kahlo. Fotograf¨ªas de Leo Matiz en La Casa Azul se puede ver en el Instituto de M¨¦xico en Espa?a (IMEX. Carrera de San Jer¨®nimo 46) hasta el 11 de noviembre. Comisariada por Angustias Freijo y Mario Mart¨ªn Pareja, la muestra exhibe medio centenar de im¨¢genes en blanco y negro realizadas en La Casa Azul ¡ªdonde naci¨® y vivi¨® la artista¡ª y su entorno. Inst¨¢nt¨¢neas en las que la pintora posa para el m¨ªtico fot¨®grafo colombiano, uno de los m¨¢s importantes renovadores del fotoperiodismo.?Frida Kahlo y Leo Matiz se conocieron cuando el fot¨®grafo viaj¨® a M¨¦xico para retratar el ambiente intelectual y art¨ªstico de las vanguardias surgido al calor de la revoluci¨®n mexicana. El entorno de La Casa Azul, hoy convertida en museo, pero entonces residencia de Rivera y Frida (all¨ª vivieron entre 1929 y 1954) fue el escenario perfecto para su reportaje. A ella, tercera de las cuatro hijas del fot¨®grafo Guillermo Kahlo, le fascinaba mirar a la c¨¢mara y Matiz no pudo encontrar mejor c¨®mplice. La exposici¨®n recoge aquellos encuentros y tambi¨¦n las im¨¢genes que Leo Matiz tom¨® de la casa despu¨¦s de la muerte de Frida.

DANZA. Inspiraci¨®n pl¨¢stica.?

Los bailarines y core¨®grafos italianos Antonio de Rosa y Mattia Russo, solistas de la Compa?¨ªa Nacional de Danza, fundaron Kor'sia, un laboratorio de experimentaci¨®n de nuevos lenguajes esc¨¦nicos. ?De Rosa y Russo, junto a otros artistas de la CND y a sus coterr¨¢neos Diego Tortelli y Giuseppe D'Agostino, idearon una primera obra que crecido hasta convertirse en Cul de sac; un trabajo inspirado en la pl¨¢stica y las esculturas de Juan Mu?oz y soportado por m¨²sica de Arvo P?rt, entre otros. Obra que podr¨¢ verse en una funci¨®n ¨²nica el s¨¢bado 15 de octubre en el teatro del Cuartel del Conde Duque (Conde Duque, 9). ?La escena principal se desarrolla en un interior umbroso donde solos, d¨²os y piezas de conjunto se engarzan en una sucesi¨®n de propuestas severas, rigurosas en la presentaci¨®n y no exentas de un refinado humor misterioso. Cul de sac no establece una narraci¨®n lineal sino que, sobre una est¨¦tica casi tenebrista, abre m¨²ltiples sugerencias visuales y acciones que rozan el absurdo.

HIP HOP. Envidiables raperos descerebrados.

En las fotos de Enter the Wu Tang Clan ¡ªlegendario debut del colectivo de hip hop neoyorquino¡ª Ghostface Killah aparec¨ªa cubierto con una m¨¢scara. Lo mismo ocurr¨ªa en los v¨ªdeos del grupo, por lo que corri¨® un rumor: Killah no quer¨ªa ser reconocido porque estaba en busca y captura.

No era cierto. Lo que realmente pasaba es que Dennis Coles (Nueva York, 1970) estaba fascinado por los superh¨¦roes. Por uno en concreto: Ironman. Con ese nombre t¨ªtul¨® su estreno en solitario en 1996. Cuentan, incluso, que en los hoteles se registraba como Tony Stark; nombre real del millonario que se convierte en Ironman para combatir a las fuerzas del mal. Tras 20 gloriosos a?os de carrera en solitario, esta noche Ghostface Killah aparece en la sala Pen¨¦lope con Killah Priest, un afiliado al clan, en una gira llamada Wu GOO (nombre comercial de los cartuchos de aceite de hach¨ªs para cigarrillos electr¨®nicos).?S¨ª, adem¨¢s de ser leyendas vivas del rap conservan un envidiable descerebre.

TEATRO. Buscando en los recuerdos.

En la ¨²ltima edici¨®n de Surge Madrid se presentaron interesante propuestas como Los tres sin padre, escrita, dirigida e interpretada por Patricia Benedicto, Miguel Barderas y Eugenio G¨®mez.

A ra¨ªz de una experiencia compartida ¡ªPatricia no conoci¨® a su padre, Miguel lo perdi¨® cuando ten¨ªa 14 a?os y Eugenio con 40 a?os¡ª decidieron plantearse un juego entre la realidad y la ficci¨®n. La ausencia del padre ha afectado a cada uno de manera diferente, en etapas vitales distintas, pero todos comparten la necesidad de mirar hacia ese progenitor que no est¨¢ y que, sobre todo, no estar¨¢.

¡°No es una obra de teatro al uso, ya que no hay personajes. Tiene tintes de thriller y juegacon la complicidad del p¨²blico¡±, cuentan los creadores de este montaje, que se repone en el Teatro del Arte (San Cosme y San Dami¨¢n, 3). ¡°Saltamos al vac¨ªo en un intento de comprender nuestra propia existencia¡±, a?aden.

CL?SICA. Torres y Vel¨¢zquez, en el Auditorio.

Los cuadros de Vel¨¢zquez viajan entre las escenas cortesanas, los fantasiosos conjuntos mitol¨®gicos y el costumbrismo espa?ol retratado como nunca se hab¨ªa hecho. El universo del pintor sevillano configura una monta?a de creaci¨®n inabarcable revestida de un talento sin l¨ªmites. En esa obra velazquiana se mira el compositor Jes¨²s Torres para el estreno que protagonizar¨¢ este lunes de la mano de la Orquesta de Cadaqu¨¦s. Tres pinturas velazquianas se escuchar¨¢ por primera vez en un estreno absoluto en el Auditorio Nacional de Madrid.?A esta pieza la acompa?ar¨¢n en el programa dos caprichos singulares. De un lado, una selecci¨®n de cantos y danzas de la muerte de Mussorgski para poner el lado t¨¦trico pero suntuoso a la velada. Y para terminar, la otra cara de Rusia, el romanticismo desbordante de Chaikovski y su Suite para orquesta n¨²mero 4, apodada Mozartiana.?Una noche para el recuerdo en la que se encargar¨¢ de poner voz a la pieza central la mezzosoprano Olga Borodina.

CINE. La maternidad era eso

En el futuro la maternidad no ser¨¢ tal y como la entendemos. En el futuro de l¨ªneas claras, de uniformes ascetas y sobriedad est¨¦tica de ?volution, de la francesa Lucile Hadzihalilovic, la especia humana procrea por mera supervivencia. O no. Esas madres no son muy humanas. ?volution gan¨® el premio del jurado del festival de San Sebasti¨¢n de 2015 y all¨ª la cineasta incidi¨® en la reflexi¨®n que ten¨ªa su pel¨ªcula -rodada en Canarias para que los escenarios volc¨¢nicos acent¨²en la ciencia ficci¨®n- sobre la reproducci¨®n, en especial hurgando con el lado misterioso. ¡°Prefiero no explicar todo porque, como espectadora, no encuentro interesante que me lo expliquen a m¨ª¡±. Tras a?os buscando financiaci¨®n, la ambici¨®n puede que derrumbe parte de ¡®?volution¡¯, pero vista como cine fant¨¢stico, y sabiendo que la directora pas¨® una larga temporada en su infancia ingresada en un festival, deja un poso interesante: ¡°Vi constantemente pel¨ªculas de terror hasta que tuve 20 a?os. Eso me ha marcado y por eso me ha parecido natural ir hacia lo imaginario, hacia lo fantasmag¨®rico¡±. El resultado se puede ver hoy a las 20.00 en La Casa Encendida, dentro de su ciclo Cine contempor¨¢neo ?Wow!, sobre pel¨ªculas con universos paralelos al actual.