Las elecciones al rectorado de la UB fijan los retos de la universidad

Siete candidatos. Todos hombres. Nunca antes unas elecciones a rector de la Universidad de Barcelona (UB) hab¨ªa contado con tantas candidaturas. A dos d¨ªas de la primera vuelta de los comicios ¡ªsi no sale ninguno por mayor¨ªa absoluta, los dos candidatos m¨¢s votados ir¨¢n a una segunda vuelta el 1 de diciembre¡ª, la campa?a electoral toca a su fin. El relevo generacional, la estabilizaci¨®n de las plantillas y la mejora de la financiaci¨®n p¨²blica han marcado el camino hacia el rectorado de la universidad espa?ola mejor posicionada en las listas internacionales.

Los siete candidatos coinciden en su postura ante las cuestiones universitarias m¨¢s controvertidas. En cualquier caso, el rector que salga de estos comicios tendr¨¢ que enfrentarse y liderar los retos futuros que se ciernen sobre las universidades catalanas, mermadas por los tijeretazos de los ¨²ltimos a?os.

Financiaci¨®n. Seg¨²n un informe de la Asociaci¨®n Catalana de Universidades P¨²blicas, la financiaci¨®n p¨²blica de las universidades se ha reducido un 18,4% desde 2010. La Administraci¨®n pas¨® de destinar 901,5 millones de euros a transferir 735,1 en 2015. ¡°Es un atentado que a la primera instituci¨®n acad¨¦mica del pa¨ªs nos miren de una forma tan injusta. Tenemos que reivindicar el valor estrat¨¦gico de la universidad p¨²blica¡±, dice Joan Guardia. Eduardo L. Mari?o propone ¡°renegociar la financiaci¨®n haciendo valer la posici¨®n de la UB en los r¨¢nquines y buscar fuentes alternativas de financiaci¨®n¡±. En ello insiste tambi¨¦n Norbert Bilbeny, que apuesta por ¡°denunciar el da?o de los recortes y contribuir a corregirlos¡±, y Joan El¨ªas, que apunta a que el gobierno ¡°ha de poner a la universidad en la agenda pol¨ªtica como una prioridad¡±. David Vallesp¨ªn apuesta adem¨¢s por ¡°buscar diferentes v¨ªas para complementar la financiaci¨®n p¨²blica y fomentar la v¨ªa del mecenazgo¡±. Rafael Franco aboga por ¡°adelgazar la estructura no acad¨¦mica que est¨¢ burocratizada excesivamente, ir con datos objetivos a pedir m¨¢s presupuesto a la Generalitat y generar recursos propios¡±. Marius Rubiralta ve necesaria ¡°una negociaci¨®n profunda con las Administraciones y una correcci¨®n de ciertos aspectos del modelo de financiaci¨®n¡±.

Decreto 3+2. El proyecto que abre la posibilidad a que los campus establezcan voluntariamente carreras de tres a?os y m¨¢steres de dos ha generado el rechazo de buena parte de la comunidad educativa, por miedo al encarecimiento de los precios y a que no asegura la igualdad de oportunidades. ¡°El 3+2 puede ser adecuado en otros pa¨ªses pero no para el modelo espa?ol. No tiene sentido que el m¨¢ster sea m¨¢s caro que el grado o que cada grado tenga un precio distinto¡±, sostiene Franco. Vallesp¨ªn opta por ¡°instar a las Administraciones a retirar el modelo mientras no se haga un an¨¢lisis amplio de lo que implicar¨ªa su aplicaci¨®n¡±. Rubiralta dice que ¡°se ha de trabajar para que los estudios de grado y m¨¢ster tengan el mismo precio por cr¨¦dito¡±. El¨ªas[TEX]<MC> [/TEX]apunta que ¡°no todas las ense?anzas son iguales y en algunas tiene sentido este proyecto y en otras, no¡±, pero, en cualquier caso, pide ¡°consenso¡± entre las instituciones y que el precio del grado y del m¨¢ster ¡°sea el mismo¡±. Bilbeny asegura que ¡°cada centro debe examinar el inter¨¦s por aplicar el decreto¡± pero, si se pone en marcha, ¡°se har¨¢ cuidando la calidad acad¨¦mica y sin sobrecoste para ella o el estudiante¡±. Mari?o apuesta por ver cada caso en concreto y, si el grado de tres a?os da el mismo nivel de formaci¨®n sin ning¨²n incremento del coste de grado y postgrado, ¡°se pod¨ªa pensar en alguna iniciativa para nuevas titulaciones¡±. Joan Guardia limita el modelo 3+2 ¡°s¨®lo a titulaciones nuevas y diversas¡±.?

Situaci¨®n laboral. Un informe del Observatorio del Sistema Universitario revela que las facultades p¨²blicas han perdido casi a uno de cada cuatro profesores en los ¨²ltimos cinco cursos. Mari?o denuncia ¡°la brecha generacional de dif¨ªcil soluci¨®n¡± que se ha producido y plantea ¡°un plan de choque lo m¨¢s r¨¢pido posible¡±. Guardia exige ¡°recuperar el control del cap¨ªtulo I de los presupuestos¡± y tacha de ¡°obsoleto¡± el modelo de financiaci¨®n. Rubiralta apuesta por ¡°actuar con rapidez para evitar una mayor destrucci¨®n del tejido docente, evaluando la estabilizaci¨®n con una estrategia equilibrada de las necesidades de los centros¡±. Bilbeny defiende ¡°un plan de choque¡± en el que ¡°se revisen los contratos para ajustarlos a los intereses acad¨¦micos de cada profesor y a las necesidades docentes y facilitar recursos para la acreditaci¨®n y promoci¨®n del personal¡±. ¡°No puede ser que un catedr¨¢tico se jubile y en vez de entrar un lector, entren cuatro asociados. Hay que poner en funcionamiento la rueda otra vez¡±, exige El¨ªas. Vallesp¨ªn pide que ¡°la Generalitat retorne a las universidades su autonom¨ªa en pol¨ªticas de profesorado¡± y promete ¡°medidas de estabilizaci¨®n y reclamar la figura del profesor ayudante¡±. Franco quiere hacer ¡°una planificaci¨®n inmediata, definiendo las proporciones del modelo mixto funcionarial-contractual¡± y ¡°estabilizar a los profesores que ya tienen acreditaciones¡±.

Tasas universitarias. Catalu?a es la comunidad espa?ola donde m¨¢s caro resulta estudiar muchas carreras. El¨ªas dice que ¡°hay que plantarse para que bajen las tasas universitarias¡±. Vallesp¨ªn aboga por alcanzar ¡°una reducci¨®n de las tasas del 30% pero que no se implemente a costa de la financiaci¨®n p¨²blica de las universidades¡±. Bilbeny defiende ¡°una pol¨ªtica de becas equitativa, reducir dr¨¢sticamente los precios e incrementar la oferta propia de becas¡±. Rubiralta quiere ¡°volver a la situaci¨®n de precios de 2010¡± y propone ¡°reducir al menos un 10% los precios p¨²blicos¡± y mantener el programa de ayudas de la UB. Mari?o apoya ¡°adecuar los costes a los ingresos familiares, mejorar el sistema de becas y reducir un 30% sobre el coste del a?o pasado¡±. Franco propone crear un vicerrectorado de igualdad de oportunidades ¡°para que ninguna persona con capacidad se quede sin grado o m¨¢ster por problemas econ¨®micos y para romper el techo de vidrio que hace que s¨®lo un 20% de mujeres sean catedr¨¢ticas¡±. Guardia aboga tambi¨¦n por reducir un 30% los precios de las matr¨ªculas y ampliar la pol¨ªtica de becas.