Los jueces anulan cientos de multas de botell¨®n por falta de pruebas
Los magistrados aducen que es insuficiente el testimonio del polic¨ªa municipal para denunciar al infractor
Los jueces est¨¢n anulando de manera sistem¨¢tica las multas que ha impuesto el Ayuntamiento de Madrid por consumo de alcohol en la v¨ªa p¨²blica (botell¨®n). Las resoluciones judiciales mantienen que no existen pruebas fehacientes, aparte del testimonio del polic¨ªa, que permitan verificar que el infractor estaba bebiendo alcohol. Estas sentencias se unen a las quejas de la Defensora del Pueblo, que denunciaba que los infractores no pod¨ªan acogerse a las reducciones del 40% si no lo hac¨ªan en los primeros diez d¨ªas. En los nueve primeros meses del a?o, el Ayuntamiento ha tramitado 23.022 denuncias.
El procedimiento sancionador que realizan los polic¨ªas municipales es sencillo. Acuden a los lugares en los que se concentran los j¨®venes, se acercan a ellos y, tras pedirles la documentaci¨®n, extienden la correspondiente acta de denuncia. Este documento se env¨ªa a Madrid Salud, que es el encargado de imponer la sanci¨®n. Aqu¨ª existen dos modalidades. Si el agente ha denunciado por la ley regional contra sustancias adictivas, las multas pueden llegar hasta los 600 euros (500 en caso de ser menores). Si el funcionario utiliza la Ley estatal de Seguridad Ciudadana, la conocida como Ley Mordaza, el precio se rebaja hasta los 100 euros.
El gerente de Madrid Salud, Antonio Prieto, reconoce que en los ¨²ltimos meses est¨¢n recibiendo sentencias por parte de los jueces, en las que anulan las multas, en especial las impuestas entre los a?os 2012 y 2014. Los magistrados mantienen que el procedimiento no es garantista, ya que se basan solo en el testimonio del polic¨ªa municipal. Este, pese a tener presunci¨®n de veracidad, no aporta m¨¢s pruebas. ¡°Los jueces no est¨¢n diciendo que es como, si cuando se hace un control de alcoholemia a un conductor, se aportara solo el testimonio del polic¨ªa y no la prueba del etil¨®metro¡±, reconoce Prieto.
La soluci¨®n no es f¨¢cil, ya que no existe en la actualidad un aparato homologado que mida que en el vaso que tenga el supuesto infractor hay una bebida alcoh¨®lica. Algunas empresas las tienen, pero no han recibido a¨²n el visto bueno de la Administraci¨®n. Adem¨¢s, los polic¨ªas tambi¨¦n tendr¨ªan que ir con un aparato bastante voluminoso que emitiera un recibo para adjuntarlo a la denuncia. ¡°Hemos recibido ya entre 300 y 400 sentencias en las que se declara inocente a la persona denunciada¡±, a?ade el gerente de Madrid Salud. Esto supone que el Ayuntamiento tenga que devolver el dinero recaudado y el pago de las costas procesales.
Otro problema para Madrid Salud es que, cuando el proceso llega a los tribunales, los jueces piden todo el expediente y la contestaci¨®n al recurso del supuesto infractor. Esto ralentiza el funcionamiento de este departamento.
Dos procedimientos sancionadores
Uno de los problemas a los que se enfrenta la Polic¨ªa Municipal es que en actualidad conviven dos procedimientos contra el botell¨®n.
El m¨¢s restrictivo se basa en el art¨ªculo 60 de la Ley regional 5/2002 sobre Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos. Este recoge que el consumo de alcohol en la v¨ªa p¨²blica supone multas de 500 euros para los menores y de 600 para los adultos. En caso de pronto pago (en los 10 primeros d¨ªas), se reduce un 40%.
El m¨¢s ben¨¦volo, el de la Ley estatal 4/2015 de Seguridad Ciudadana, la llamada Ley Mordaza, s¨®lo se aplica ¡°cuando perturbe gravemente la tranquilidad ciudadana¡±. Las multas son de 100 euros y permiten una reducci¨®n del 50% en periodo voluntario.
El criterio que utilizan los polic¨ªas municipales para denunciar no est¨¢ claro, ya que pueden aplicar la ley regional (mucho m¨¢s dura y menos garantista) o la estatal. En teor¨ªa, la primera castiga el consumo de alcohol por el da?o que produce a la salud. Por el contrario, la segunda penaliza la molestia a los ciudadanos. Elegir una u otra depende del polic¨ªa, que goza de independencia total a la hora de sancionar. ¡°Con este sistema se da una sanci¨®n menor cuando las situaciones m¨¢s graves, como son las molestias a los vecinos. Lo que vamos a hacer es pon¨¦rselo dif¨ªcil a la cadena de botell¨®n y controlar ya desde la venta de las bebidas¡±, reconoci¨® el concejal de Seguridad, Javier Barbero, el martes en comisi¨®n.
Hasta el 15 de septiembre, el Ayuntamiento hab¨ªa recibido 23.022 actas de sanci¨®n, lo que supone un n¨²mero similar al mismo periodo de 2015 (22.568). Del total, la gran mayor¨ªa corresponde a la ley regional (18.858, el 82%) frente a la ley estatal (4.164, el 18%). Un peque?o porcentaje de estas sanciones es rechazado por razones diversas como tener datos incorrectos, no constar en el domicilio facilitado o no recibir a tiempo la notificaci¨®n el supuesto infractor, si vive fuera de la capital.
Hasta el pasado agosto, se han denunciado a 159 menores por botell¨®n frente a los 127 que se detectaron en todo 2015, seg¨²n datos de la Polic¨ªa Municipal. En el mismo periodo (en los ocho primeros meses del a?o pasado) se sancion¨® a 79, la mitad que en 2016.
Periodo voluntario
La defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ya advirti¨® que se estaba incumpliendo el proceso sancionador al empezar a contar el tiempo de pago voluntario cuando se entregaba la copia de la denuncia al infractor. Muchos no lo sab¨ªan por lo que perd¨ªan el derecho a reducci¨®n del 40%. Eso se ha modificado y ahora no cuenta hasta que no se le notifica en su casa.
El Ayuntamiento cuenta con dos programas para reducir el botell¨®n. El primero es de ocio alternativo (la noche m¨¢s joven y la tarde m¨¢s joven) incluye la cesi¨®n de espacios culturales y deportivos como alternativas al alcohol. El segundo (No_t_pases_entera_t) consiste en educadores sociales de Cruz Roja que informan a los j¨®venes en las zonas de botell¨®n. En breve, se sumar¨¢n otros dos programas m¨¢s.
Un problema de ocio saludable y de educaci¨®n
El problema del botell¨®n se debe a un d¨¦ficit del fomento del ocio saludable y a la falta de educaci¨®n para concienciar en los problemas que acarrea el consumo de alcohol. As¨ª de tajante se muestra el profesor de Sociolog¨ªa de la Universidad Nacional de Educaci¨®n a Distancia (UNED), ?scar Iglesias. Este propone medidas a medio y largo plazo para evitar que los ni?os caigan en esta pr¨¢ctica.
"No se est¨¢ dando una educaci¨®n en los colegios de h¨¢bitos de vida saludable. Adem¨¢s, por parte de la Administraci¨®n se est¨¢n consintiendo macrobotellones de miles de personas y se deja a los j¨®venes hasta que ocurre alguna desgracia", describe este soci¨®logo. "Si hay menores consumiendo, es porque alg¨²n adulto se lo ha comprado o se lo ha vendido. Es necesario radicar esa pr¨¢ctica de ra¨ªz por parte de las autoridades", a?ade Iglesias, que apuesta por un fomento de actividades deportivas y culturales, junto con un cumplimiento estricto de la ley. "Hay que poner recursos suficientes y no se est¨¢ haciendo", concluye.
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