Condenado a 14 a?os y 3 meses el acusado de violar a su hijastra

La Audiencia de Girona ha condenado a 14 a?os, 3 meses y un d¨ªa de c¨¢rcel a Edal Adalid Gonz¨¢lez Amador, el vecino de Girona de origen hondure?o que entre 2007 y 2008 viol¨® repetidamente a su hijastra de 12 a?os y la dej¨® embarazada. La madre ech¨® al marido cuando descubri¨® los hechos, pero decidi¨® no denunciar para que no quedaran estigmatizadas. El caso no se destap¨® hasta 8 a?os despu¨¦s, en abril de 2015, cuando la pareja de la chica, que este mi¨¦rcoles cumple 22 a?os, coincidi¨® con el agresor y le peg¨® una paliza. Los Mossos lo detuvieron despu¨¦s de que ¨¦l les contara toda la historia y la confirmaran con la v¨ªctima.

La sentencia de la secci¨®n 3? de la Audiencia de Girona, de la que ha sido ponente la magistrada Sonia Losada, no da ninguna credibilidad a la versi¨®n del acusado, en la que negaba los hechos y le condena por un delito continuado de abusos sexuales a menor de trece a?os.

S¨ª considera probado el escrito seg¨²n el que en noviembre de 2006 la ni?a, que ten¨ªa 11 a?os, lleg¨® de Honduras y empez¨® a convivir con su madre y la pareja de ¨¦sta en el domicilio familiar. El acusado empez¨® a tocarle el culo en varias ocasiones. La ni?a se lo cont¨® a su madre, ¨¦sta reprendi¨® a su pareja y un d¨ªa, al volver del trabajo, ¨¦l entr¨® en el dormitorio de la peque?a. Con la intenci¨®n de satisfacer su ¨¢nimo libidinoso y aprovech¨¢ndose de la facilidad, pues conviv¨ªan, la cogi¨® por la espalda y le dijo ¡°ahora ver¨¢s lo que le dijiste a tu madre, mejor no le hubieras dicho nada¡±, la tir¨® en la cama, le quit¨® la parte de abajo del pijama, le agarr¨® los brazos penetr¨¢ndola por la vagina sin utilizar preservativo¡± y la amenaz¨® con matarla si le dec¨ªa algo a su madre. Estas violaciones se repitieron varias veces por semana durante un a?o, mientras la ni?a se encontraba sola en casa porque la madre trabajaba.

La sentencia tambi¨¦n considera probado que las violaciones cesaron en 2008, poco despu¨¦s que en enero llegara a la vivienda procedente de Honduras una hermana mayor de la peque?a. La hermana se percat¨® en seguida de que algo le pasaba a la v¨ªctima y, tras insistir, la peque?a le confes¨® que su padrastro la violaba y la ten¨ªa amenazada. Se lo contaron a la madre y aunque lo ech¨® de casa, decidi¨® que lo mejor era no denunciar para evitar que la gente hablara y la estigmatizaran. En marzo supieron que estaba embarazada y abort¨®, a los 13 a?os.

La magistrada considera que estos hechos ¡°no solo han generado un da?o psicol¨®gico que ha influido en su desarrollo ¨Cy le han dejado unas secuelas que le impiden tener una vida afectiva y sexual normal¨C, sino tambi¨¦n una tensi¨®n afectiva negativa hacia la persona de su madre¡± ¨Ca la que guarda rencor por no haber denunciado¨C. Por ello condena al procesado a indemnizarla con 30.000 euros.