Se?oras (bien) de China

La tesis central de la exposici¨®n podr¨ªa resumirse as¨ª: la mujer en China es un pilar fundamental en la construcci¨®n actual de aquel pa¨ªs. Se transmite cierto aire propagand¨ªstico, pues todas las fotos narran historias de ¨¦xito m¨¢s que rebuscar en las injusticias que puedan persistir: la denuncia es lo habitual en el fotoperiodismo y por ejemplo, no se habla del caso de las denominadas ¡°mujeres sobrantes¡±: solteras, mayores de 27 a?os, que, seg¨²n informa la BBC, sufren una preocupante estigmatizaci¨®n.

La exposici¨®n prefiere centrarse en los avances feministas de esa sociedad con informaci¨®n de inter¨¦s. Tambi¨¦n es de valorar el empe?o de la asociaci¨®n ¡ªformada por 21.000 miembros procedentes de 60 asociaciones fotogr¨¢ficas de todo el pa¨ªs¡ª en difundir los progresos de la mujer en diferentes ¨¢mbitos de la vida profesional, pol¨ªtica, deportiva o cultural. ¡°Es una exposici¨®n que ha pasado por varios pa¨ªses tratando de difundir esos progresos. Son fotos donde conviven adem¨¢s los aspectos m¨¢s tradicionales de la sociedad china con las caracter¨ªsticas propias de la vida actual¡±, opina Mar¨ªa Jes¨²s Magro, directora de la Fundaci¨®n Pons. De la ceremonia del t¨¦ a la penetraci¨®n de la telefon¨ªa m¨®vil.

Las im¨¢genes transitan entre las piezas m¨¢s puramente documentales y aquellas que persiguen fines m¨¢s est¨¦ticos, con un delicado gusto oriental. Pero todas cuentan historias: las de las mujeres m¨¦dico, que suponen la mitad de los m¨¦dicos colegiados; la del creciente n¨²mero de f¨¦minas trabajando como agentes de movilidad; o la de creciente proporci¨®n de profesoras en la ense?anza primaria y secundaria, que ya ha alcanzado el 53%. Tambi¨¦n la de la multitud de obreras en las f¨¢bricas chinas, que inundan el mundo con sus productos, o la buena noticia de la reducci¨®n de la tasa de mortalidad infantil hasta un 9,5%, ahora m¨¢s cercana a la de los pa¨ªses m¨¢s avanzados.

Entre las im¨¢genes m¨¢s sugerentes se encuentra El olor del campo, de Tang Daihong, que muestra una on¨ªrica estampa rural de la soja secando en un pintoresco pueblo de piedra con un mar de monta?as al fondo. O Melod¨ªa del Taichi, de Lu Ruisheng, que muestra a una mujer practicando este milenario y sereno arte marcial que, seg¨²n la doctrina tao¨ªsta, integra a las personas con los ritmos del universo. O la muy pict¨®rica Regresando de la pesca al atardecer, de Zhang Minghua, en la que unas pescadoras regresan de su faena por la playa h¨²meda bajo un violento cielo morado y naranja, incendiado, tal vez, por secretos dragones m¨¢s all¨¢ del horizonte.