El PDECat y los trabajos de H¨¦rcules
Es dif¨ªcil cambiar de piel en cuesti¨®n de meses para un partido que hizo estandarte durante d¨¦cadas del liderazgo caudillista
Converg¨¨ncia tratar¨¢ esta primavera de perder parte de su vieja piel. Sin embargo, la metamorfosis para llegar a multicolor mariposa no es f¨¢cil. El ¡°a?o de refer¨¦ndum¡±, como califican al 2017 los nuevos dirigentes del partido, viene con hambre atrasada. Mientras, seg¨²n la coordinadora general del PDECat, Marta Pascal, se pondr¨¢ en marcha la gran conferencia ideol¨®gica para fijar su modelo de pa¨ªs, el PDECat tambi¨¦n deber¨¢ aclarar c¨®mo son las primarias para elegir al pr¨®ximo candidato del partido y tendr¨¢ que acreditar c¨®mo hacer la tortilla de la desconexi¨®n ¡ªcon permiso de la fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional¡ª sin romper muchos huevos y evitando fugas de votantes.
Es dif¨ªcil cambiar de piel en cuesti¨®n de meses para un partido que hizo estandarte durante d¨¦cadas del liderazgo caudillista. Jordi Pujol ungi¨® a Artur Mas como su sucesor y ¨¦ste, a su vez, obligado por la CUP, decidi¨® que Carles Puigdemont fuera su relevo. Mas intent¨® revestir la anomal¨ªa con el argumento internacionalista de que el PNV hab¨ªa separado hist¨®ricamente la presidencia del Euzkadi Buru Batzar ¡ªel ejecutivo del partido¡ª de la del Gobierno vasco. Necesidades del gui¨®n o no, lo cierto es que Converg¨¨ncia y el Partido Popular comparten ex aequo el cuadro de honor del dedazo para decidir sus liderazgos. Las bases las carga el diablo, tal como se ha visto con Pedro S¨¢nchez en el PSOE. Por lo tanto, primer trabajo de H¨¦rcules: primarias en el PDECat sin que el dedo Artur Mas asome excesivamente por debajo de la puerta.
El presidente 129 de la Generalitat ¡ªcomo ¨¦l mismo se denomina¡ª ha negado que vaya a ser candidato, esgrimiendo su convencimiento de que la Audiencia Nacional le inhabilitar¨¢ por organizar la consulta del 9-N. No obstante, en las pr¨®ximas semanas se evidenciar¨¢ qui¨¦n manda en el PDECat. Y el liderazgo para encabezar la candidatura es una prueba de peso.
Una vez muerto y despellejado el le¨®n de Nemea, le tocar¨¢ el turno al segundo trabajo herc¨²leo: presentar el modelo de sociedad, o lo que es lo mismo, matar a la Hidra de Lerna. El Consell Nacional del PDECat conocer¨¢ a finales de enero los ¨¢mbitos en que se mueve el corpus ideol¨®gico.
El partido debe presentar un proyecto que en ¨¦poca de crisis como la actual deber¨¢ asemejarse m¨¢s a la izquierda que a la derecha. De no ser as¨ª, poco inter¨¦s tendr¨¢ el anzuelo de la independencia para los sectores sociales m¨¢s desfavorecidos. Por lo tanto, Converg¨¨ncia deber¨¢ revertir toda su historia anterior y recuperar la herencia de aquel viejo Jordi Pujol de la transici¨®n (en la oposici¨®n al franquismo), que propon¨ªa seguir a la socialdemocracia sueca. Los socios de proyecto independentista ¡ªERC y la CUP¡ª colocan al PDECat en la tesitura de constre?irse en la izquierda.
Si el ¨¦xito del independentismo catal¨¢n consiste en vender que debemos administrarnos nosotros mismos para hacerlo ¡°mejor¡± (m¨¢s escuelas, m¨¢s hospitales, m¨¢s calidad en los servicios sociales), nadie entender¨¢ una pol¨ªtica restrictiva de gasto en ¨¦poca de crisis. Bueno, de hecho, nadie entiende por qu¨¦ unos presupuestos auton¨®micos son condici¨®n sine qua non para llegar a la independencia. Nadie comprende que, una vez dispuestos al desaf¨ªo al Gobierno central con el refer¨¦ndum, se precisen unos presupuestos auton¨®micos que no revierten los recortes y cuyo gasto social est¨¢ un 11% por debajo de los presupuestado en 2010.
El tercer trabajo de H¨¦rcules no es la captura de la cierva Cerinea, sino conservar votos sin indignar a Artemisa. Es decir, hacer la tortilla sin romper huevos. Hay convergentes conservadores que ven una quimera la desconexi¨®n y el refer¨¦ndum unilateral. Entretanto, H¨¦rcules deber¨¢ afrontar nuevos trabajos. Quiz¨¢s el m¨¢s dif¨ªcil de todos ellos se halle en esas 55 sesiones del juicio del caso Palau. En los 60.784 folios de la causa, en los que, adem¨¢s de F¨¨lix Millet y Jordi Montull, aparece imputado Daniel Os¨¢car, ex tesorero del CDC. La propia Converg¨¨ncia es se?alada por lucrarse con dinero p¨²blico y privado con el cobro de presuntas comisiones por obras como la L¨ªnea 9 del metro o la Ciutat de la Just¨ªcia de Barcelona, donde se celebrar¨¢ la vista. La opaca cris¨¢lida convergente, seg¨²n el juez, contiene en su interior 5,1 millones de euros en comisiones de Ferrovial. Mucha metamorfosis y mucho trabajo para H¨¦rcules.
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