Un viaje por el desarrollo a orillas del asfalto

La Autov¨ªa del 92 serpentea Andaluc¨ªa de este a oeste como el r¨ªo Guadalquivir. Por su cauce circulan m¨¢s de 169 millones de veh¨ªculos de media al a?o, que van dejando atr¨¢s la campi?a, campos de olivos, espacios naturales y hasta un desierto. Por delante tienen m¨¢s de 500 kil¨®metros salpicados de localidades que han levantado a orillas del asfalto su tejido industrial. Un trayecto de unas cuatro horas que sirve de espejo para ver la transformaci¨®n econ¨®mica y social que ha experimentado la comunidad en estos 25 a?os. Un desarrollo en el que la A-92 ha sido un elemento clave. ¡°Era una infraestructura absolutamente imprescindible y necesaria para un proyecto llamado autonom¨ªa¡±, afirma el profesor del departamento de Geograf¨ªa Humana de la Universidad de Granada Luis Miguel S¨¢nchez. ¡°Su impacto econ¨®mico es indudable. Y el objetivo de articular pol¨ªtica y socialmente la comunidad tambi¨¦n se ha conseguido¡±, opina el exconsejero de Pol¨ªtica Territorial Jaime Montaner. ¡°La A-92 ha revalorizado el papel de esas comarcas, de esas ciudades medias que se quedaron marginadas en la concepci¨®n radial desde Madrid¡±, apunta el profesor, quien resalta que las infraestructuras contribuyen ¡°a reforzar una din¨¢mica, pero no son la varita m¨¢gica¡±.

Un impacto ¡°indiscutible¡±

La avenida de Andaluc¨ªa en Sevilla se difumina con la A-92 sin que el conductor se d¨¦ cuenta. Las vallas publicitarias, los paneles informativos y los letreros de empresas se suceden antes de llegar a Alcal¨¢ de Guada¨ªra. ¡°Es una de las localidades que mayor protagonismo ha ganado y que mejor ha sabido posicionarse¡±, apunta S¨¢nchez. Y las cifras as¨ª lo demuestran. En estas dos d¨¦cadas, Alcal¨¢ ha experimentado un crecimiento poblacional del 44% y ha multiplicado por tres el n¨²mero de pol¨ªgonos industriales, de seis a 18. ¡°El desarrollo experimentado es indiscutible, y ahora mucho m¨¢s con la SE-40¡±, explica el delegado de Pol¨ªtica de Desarrollo del Ayuntamiento, Salvador Escudero, quien adelanta que se estudia convertir ese tramo de la A-92 en un bulevar comercial. ¡°El objetivo es desviar los veh¨ªculos pesados por otras v¨ªas para evitar los atascos que se producen en diferentes puntos y convertir la autov¨ªa en una prolongaci¨®n urbana de Sevilla, dotarla de esa vocaci¨®n comercial que tiene la avenida de Andaluc¨ªa¡±, explica.

Tras salir de Alcal¨¢, la campi?a comienza a tomar protagonismo interrumpida por mantos de olivos y estaciones de servicio en las que se repiten los camiones estacionados. Arahal, La Puebla de Cazalla, Estepa,... ¡°El desarrollo que han experimentado estas localidades no se puede concebir sin la A-92¡±, asegura S¨¢nchez. Y todo ello pese a las dudas que, en un primer momento, gener¨® la obra. ¡°Hubo que convencer a los empresarios de que era beneficioso desviar el tr¨¢fico de la antigua carretera nacional a la autov¨ªa. Es cierto que algunos bares peque?os de esa traves¨ªa tuvieron que cerrar, pero era lo mejor¡±, apunta Montaner, quien recuerda el peregrinaje de empresas del centro de Estepa al nuevo emplazamiento. ¡°En su momento tambi¨¦n se temi¨® que cayera el n¨²mero de turistas que, principalmente, nos visitan durante la campa?a del mantecado, pero no fue as¨ª¡±, a?ade el alcalde, Salvador Mart¨ªn.

Al calor de la A-92, Estepa cuenta hoy con dos pol¨ªgonos industriales, que suman m¨¢s de 150 empresas. ¡°Tanto Arahal como La Puebla o Estepa, eran zonas que ya ten¨ªan una actividad, ya fuese el aceite, el mantecado¡­ pero la rentabilidad de la producci¨®n y las posibilidades de expansi¨®n se abrieron con esta obra¡±, apunta S¨¢nchez. ¡°Antes de la A-92 pod¨ªamos tardar cinco o seis horas en llegar a Granada, ahora solo unas tres. Adem¨¢s, hoy cualquier veh¨ªculo puede hacer el recorrido; antes, debido a la sinuosidad de la carretera, no¡±, explica el presidente del Consejo Regulador de Mantecados y Polvorones de Estepa, Eusebio Olmedo.

A unos 20 minutos, en el horizonte se descubren los molinos de un parque e¨®lico. Y a unos cuantos kil¨®metros m¨¢s, la Pe?a de los Enamorados. El asfalto conduce hacia la comarca de Antequera. ¡°La A-92 y la A-45 han convertido esta zona en el pivote fundamental del desarrollo de Andaluc¨ªa¡±, apunta la catedr¨¢tica de Geograf¨ªa Humana de la Universidad de Sevilla y exconsejera de Obras P¨²blicas, Josefina Cruz. En estas dos d¨¦cadas, esta vega anteriormente agr¨ªcola se ha ido transformando en un verdadero polo industrial con casi seis millones de metros cuadrados de suelo, estaci¨®n de AVE incluida. Y acogiendo parques empresariales, pol¨ªgonos industriales y centros log¨ªsticos de compa?¨ªas como Mercadona, que en 2013 tambi¨¦n opt¨® por abrir otro centro de este tipo a orillas de la A-92 en Guadix. ¡°Ambos emplazamientos son estrat¨¦gicos para la compa?¨ªa por estar en pleno nudo de comunicaciones, algo crucial para una mayor eficiencia log¨ªstica¡±, defiende esta empresa, que en ambas zonas da empleo a 755 y 174 personas, respectivamente.

Este crecimiento tambi¨¦n se ha vivido en municipios como Mollina, cuya poblaci¨®n ha crecido un 59%. ¡°Contamos con dos pol¨ªgonos industriales que generan unos 200 empleos, y trabajamos para su ampliaci¨®n¡±, explica el alcalde de Mollina, Eugenio Sevillano, quien conf¨ªa en el impacto que puede generar el puerto seco proyectado en Antequera.

Que los m¨¢rgenes de la autov¨ªa auton¨®mica m¨¢s larga de Espa?a se convirtieran en un im¨¢n queda patente en la historia de muchas empresas. Es el caso de Neum¨¢ticos Adri¨¢n Moreno, en Mollina. ¡°Elegimos instalarnos cerca de la A-92 porque ten¨ªamos claro que se iba a convertir en un punto estrat¨¦gico¡±, asegura la jefa de administraci¨®n, Florentina Jord¨¢n, quien resalta que la compa?¨ªa trabaja en M¨¢laga, Granada y Almer¨ªa. ¡°Nos supone un ahorro de tiempo y costes muy importante¡±, a?ade. Seg¨²n un estudio de Analistas Econ¨®micos de Andaluc¨ªa, para el 40% de los empresarios la A-92 influy¨® a la hora de ubicar ah¨ª su negocio.

Otro ejemplo de ello se encuentra en Loja (Granada). El empresario Francisco Mart¨ªn decidi¨® vender sus negocios y abrir un hotel con zona de servicio junto a la autov¨ªa: el Abades Loja. ¡°Fue una apuesta arriesgada¡±, recuerdan sus hijos Juli¨¢n y Antonio Mart¨ªn. Pero acertada, tanto, que el grupo tiene otros dos establecimientos junto a esta v¨ªa: en La Roda y Guadix. ¡°Se sab¨ªa que la A-92 ser¨ªa el corredor natural de Andaluc¨ªa. Comunicar¨ªa transversalmente la regi¨®n y servir¨ªa de enlace entre el levante espa?ol y el sur de Portugal. El flujo de personas iba a ser importante¡±, explican.

La parada en la zona metropolitana de Granada demuestra, como dicen los expertos, que el desarrollo experimentado al borde de la A-92 es m¨¢s palpable en estos n¨²cleos. Municipios como Albolote, Atarfe, Santa Fe o Peligros han visto crecer tanto su poblaci¨®n como sus empresas. ¡°El mercado inmobiliario ha sido brutal en V¨ªznar y Alfacar, que se han convertido en puntos de primera o segunda residencia¡±, asegura S¨¢nchez. ¡°En 10 de los 14 municipios de la comarca Vega-Sierra Elvira, el crecimiento demogr¨¢fico ha sido del 80,5%, cuadriplicando pr¨¢cticamente el de la comunidad¡±, explica el presidente de la asociaci¨®n Promovega, Juan de Dios Jim¨¦nez, quien resalta la oferta de metros cuadrados de suelo industrial en municipios como L¨¢char (1,6 millones de metros cuadrados) o Chauchina (1,1 millones). ¡°Adem¨¢s de la accesibilidad y el estar a 15 minutos del aeropuerto, estar junto a la A-92 es tener un escaparate las 24 horas del d¨ªa que pueden ver miles de personas¡±, explica Mar¨ªa Dolores Ruiz, de Cortijo Cuevas, productora y envasadora de manzanas y peras.

Movimiento demogr¨¢fico

Tras salir de la capital, la traves¨ªa se complica al cruzar el parque natural de Hu¨¦tor. Pocos conductores habr¨¢n olvidado los problemas en el tramo entre Alfacar y Diezma, que en estos a?os ha sumado la mayor¨ªa de las obras de reparaciones. Dificultades que tambi¨¦n se reflejan en el desarrollo de esta zona. Desde la llegada de la autov¨ªa, Guadix ha perdido un 6% de poblaci¨®n. ¡°Quiz¨¢s la A-92 ha servido para que mucha gente prefiera poner un negocio o vivir en Granada, que queda a solo 25 ¨® 30 minutos¡±, se?ala S¨¢nchez. ¡°Esto siempre es as¨ª, y no es solo cosa de la A-92, las infraestructuras acercan, dan m¨¢s accesibilidad tanto para llegar como para irte¡±, apunta la catedr¨¢tica. Tambi¨¦n han perdido poblaci¨®n municipios como C¨²llar (21%) o Gor (41%). ¡°El pueblo tiene pocos recursos, un poco de agricultura, la gente es mayor... Muchos emigraron a Catalu?a y vuelven por vacaciones¡±, explica Jos¨¦ Antonio Jim¨¦nez, vecino de Gor y farmac¨¦utico. ¡°El efecto es congregar donde m¨¢s hay. La autov¨ªa tiende a favorecer al que ya estaba en una posici¨®n de ventaja¡±, resume S¨¢nchez.

En Guadix, la A-92 se divide en dos: hacia el norte para comunicar la comunidad con el Levante y hacia el sur para llegar a Viator (Almer¨ªa). Por el norte, la carretera contin¨²a hasta V¨¦lez Rubio, situado junto al parque natural Sierra de Mar¨ªa-Los V¨¦lez. ¡°En esta zona, al igual que en la sierra de Hu¨¦tor, en el parque natural de la sierra de Baza, en la cara norte de Sierra Nevada, es imposible concebir el flujo tur¨ªstico que se ha experimentado sin la A-92. Los que vivimos rodeados de contaminaci¨®n podemos estar en una hora en medio de la naturaleza¡±, explica S¨¢nchez. ¡°En los ¨²ltimos 10 a?os, el turismo se ha duplicado. Ha aumentado considerablemente el n¨²mero de alojamientos rurales y hay proyectados otros tantos¡±, explica el alcalde de V¨¦lez-Rubio, Miguel Mart¨ªnez-Carl¨®n.

Al filo de la cordillera Penib¨¦tica y tras atravesar el desierto de Tabernas, la denominada A-92 Sur muere en una rotonda en Viator, donde duerme el proyecto de llegar a la capital almeriense. ¡°El pol¨ªgono La Juaida se desarroll¨® a la par de la llegada de la autov¨ªa¡±, recuerda el alcalde de Viator, Manuel Jes¨²s Flores, quien apunta que la econom¨ªa local se basa en el sector servicios. ¡°La A-92 propici¨® una mayor expansi¨®n y un crecimiento m¨¢s r¨¢pido. Muchas empresas se dieron cuenta de que esta era una zona estrat¨¦gica para establecerse. Sin la autov¨ªa, muchos empresarios no se habr¨ªan fijado en Viator¡±, reconoce.