¡°Una demolici¨®n es como la muerte de una persona¡±
El decano del Colegio de Arquitectos inicia una campa?a de la entidad para pedir que se proteja la arquitectura contempor¨¢nea madrile?a
Es f¨¢cil comprender que un edificio con dos o tres siglos de antig¨¹edad es patrimonio hist¨®rico, pero resulta m¨¢s complejo verlo cuando se trata un inmueble reciente. Pero ¡°el patrimonio no se hace por viejo, sino por lo que aporta a la sociedad¡±, dice el arquitecto urbanista Jos¨¦ Mar¨ªa Ezquiaga (Madrid, 1957), que desde mayo de 2015 es el decano del Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM). Por eso, presenta un plan para proteger la arquitectura contempor¨¢nea madrile?a.
Pregunta. ?C¨®mo se puede evitar que se derriben edificios contempor¨¢neos valiosos?
Respuesta. Desde el COAM creemos que hay que trabajar en tres aspectos: en primer lugar, hay que hacer pedagog¨ªa con la opini¨®n p¨²blica para que est¨¦ atenta a estos casos, para que entienda que la arquitectura contempor¨¢nea es patrimonio; en segundo lugar, hay que hablar con los municipios para que sean conscientes de que tienen elementos de valor en su pueblo y deben protegerlos. Por eso, vamos a hacer una campa?a para enviar las gu¨ªas de arquitectura a todos los alcaldes de los municipios madrile?os y pedirles que las utilicen cuando hagan los nuevos cat¨¢logos de protecci¨®n. En tercer lugar, si alg¨²n Ayuntamiento decide que no quiere proteger el patrimonio, se lo pediremos a la Comunidad de Madrid a trav¨¦s de la Direcci¨®n General de Patrimonio Cultural, para que protejan cautelarmente los bienes en riesgo. ?Qui¨¦n devuelve a su estado natural a la Casa Guzm¨¢n? Eso es imposible. Una demolici¨®n es como el fallecimiento de una persona.
P. ?En qu¨¦ consisten estas gu¨ªas que comenta?
R. En los ¨²ltimos a?os, el COAM ha ido elaborando gu¨ªas de arquitectura de todos los municipios de la Comunidad, donde est¨¢ incluida la arquitectura tradicional y tambi¨¦n la contempor¨¢nea. Por ejemplo, en Algete est¨¢ el antiguo pueblo rural y la iglesia parroquial, pero tambi¨¦n la Urbanizaci¨®n Santo Domingo, donde se encontraba la Casa Guzm¨¢n y otras casas contempor¨¢neas muy valiosas. Estas gu¨ªas han sido un trabajo que ha llevado d¨¦cadas, donde participaron cientos de expertos. Se empezaron a elaborar cuando fue decano Fernando Chueca Goitia, hace 12 a?os, y se han continuado hasta la etapa de Paloma Sobrini, actual directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno regional.
P. ?Qu¨¦ deber¨ªan hacer los alcaldes que reciban su propuesta?
R. El COAM es una instituci¨®n de expertos, y las gu¨ªas de arquitectura recogen todos aquellos edificios que estimamos que tienen valor, pero quienes tienen la capacidad de protegerlos son los Ayuntamientos a trav¨¦s de los planes generales de ordenaci¨®n urbana. Tambi¨¦n puede hacerlo la Comunidad de Madrid a trav¨¦s de distintas figuras de protecci¨®n. Ser¨ªa necesario que los municipios hicieran propias estas gu¨ªas y tomaran las medidas oportunas para protegerlos. Los municipios tienen la responsabilidad de decidir en primera instancia qu¨¦ es lo que hay que proteger.
P. Pero, ?qu¨¦ ocurre si los Ayuntamientos no lo hacen?
R. Visto que hoy en d¨ªa hay mucho riesgo de que se vayan a perder arquitecturas contempor¨¢neas importantes, estamos animando a la Comunidad a que tambi¨¦n incorpore como bienes de inter¨¦s cultural arquitecturas contempor¨¢neas que est¨¢n en riesgo de demolici¨®n. Estamos trabajando con ellos muy bien, porque tenemos la enorme suerte de que Paloma Sobrini [directora general de Patrimonio] es muy sensible al tema. Adem¨¢s, vamos a hacer una campa?a con la Comunidad para pedirle a los municipios que, si no tienen cat¨¢logo de edificios protegidos, aprovechen la llegada de la gu¨ªa para dotarse de un cat¨¢logo. Y les ofrecemos nuestra colaboraci¨®n.
P. A¨²n no se entiende el valor de la arquitectura moderna.
R. Sin duda, falta conciencia de que la arquitectura contempor¨¢nea sea patrimonio. Pero los edificios contempor¨¢neos tienen un valor. Por ejemplo, la opini¨®n p¨²blica cree que el Edificio Espa?a ya forma parte del perfil de Madrid. Pero para los expertos, arquitect¨®nicamente, nos merece m¨¢s reservas, es decir, era m¨¢s importante la Casa Guzm¨¢n. Pero el Edificio Espa?a tiene un impacto en el paisaje muy importante y ya se considera como algo de todos, que no soportar¨ªamos que se perdiera. Tambi¨¦n pasa con la T-4, la ampliaci¨®n del Museo del Prado, y varios edificios de la Castellana: la gente los ha hecho suyos. Pero son edificios que no est¨¢n protegidos y se podr¨ªan tirar. Tenemos que ser conscientes es que el patrimonio no se hace por viejo, sino por lo que aporta a la sociedad. Las puertas de Cristina Iglesias en el Museo del Prado son recientes y ya nos parecen patrimonio. Pues igual de patrimonio es la ampliaci¨®n del museo que proyect¨® Rafael Moneo.
P. Un caso como el derribo de la Casa Guzm¨¢n, ?podr¨ªa volver a ocurrir?
R. S¨ª, ma?ana mismo. Los inmuebles que est¨¢n m¨¢s en peligro son los m¨¢s recientes, los que tienen menos de 30 a?os de antig¨¹edad, porque han cubierto un ciclo de su vida y se puede pensar en modificarlos o demolerlos. Cuando conocimos el derribo de la Casa Guzm¨¢n, hicimos el ejercicio de ver cu¨¢ntos edificios similares hay en las urbanizaciones de Madrid, y nos encontramos con viviendas de Antonio Fern¨¢ndez Alba, Alberto Campo Baeza, Javier Carvajal y otros muchos arquitectos que han hecho casas unifamiliares en urbanizaciones con una ordenanza de menor volumen que la actual, por ejemplo, con una sola planta, donde ahora las normas urban¨ªsticas permiten tres plantas. El planeamiento incita a derribar esos edificios y sustituirlos por otros m¨¢s grandes.
P. ?Qu¨¦ otras medidas se podr¨ªan tomar?
R. Por una parte, proteger esos edificios y, por otra, con desgravaciones fiscales para que el propietario tenga alguna compensaci¨®n, al estilo de los bienes de inter¨¦s cultural, que no pagan IBI, o l¨ªneas de cr¨¦dito para la rehabilitaci¨®n. Cuando se protege un edificio, la sociedad le pide un esfuerzo extra al propietario, por eso hay que compensarle. Otra opci¨®n es conservar un inmueble peque?o y compensar al edificio con un aprovechamiento en otra zona. Y, sobre todo, debemos conseguir que quien tiene un edificio protegido entienda que posee algo ¨²nico, que da prestigio.
P. ?Cu¨¢l es la arquitectura que est¨¢ m¨¢s en peligro?
R. La arquitectura m¨¢s dif¨ªcil de conservar es la que llamamos del Movimiento Moderno, que arranca desde la II Rep¨²blica, se pierde durante la posguerra, porque el r¨¦gimen franquista abominaba de ella, y se retoma en los a?os 50. Esta arquitectura se caracteriza por la ausencia de ornamento, por una volumetr¨ªa limpia, unos materiales m¨¢s sencillos, como el edificio que es sede del Colegio de Arquitectos. Al ser tan sencilla, la opini¨®n p¨²blica no le atribuye valor. Y, sin embargo, cualquier edificio de principios de siglo se considera patrimonio. Gaud¨ª, tan barroco, se considera art¨ªstico, y sin embargo un edificio del Movimiento Moderno, apol¨ªneo, minimalista, es considerado como meramente funcional, y no valioso. Pero no es verdad. Desde el punto de vista espacial, el Movimiento Moderno cre¨® una nueva manera de entender el espacio urbano y dom¨¦stico del cual somos herederos. Igual que somos capaces de ver arte en una pintura o un grabado reciente, tenemos que ser capaces de ver arte en la arquitectura.
P. ?Hay m¨¢s conciencia arquitect¨®nica en otras ciudades? que en Madrid?
R. Siempre se ha dicho que Madrid es la ciudad m¨¢s norteamericana de Espa?a, porque somos una ciudad muy abierta, muy din¨¢mica, pero el contrapeso es que es una ciudad que no ha tenido una identidad cultural tan fuerte a lo largo de los siglos, como s¨ª la tienen Valencia, Bilbao o Barcelona. Sin embargo, Madrid tiene una arquitectura fabulosa, primero palaciega, ya que es capital desde 1561, aunque se desarroll¨® sobre todo durante un siglo XVIII espectacular, y luego contempor¨¢nea, que se refleja en edificios de viviendas, f¨¢bricas y oficinas. Quiz¨¢ la gente de Madrid, al no tener un fuerte sentimiento de pertenencia, no entiende que Alejandro de la Sota es un patrimonio de los madrile?os, igual que Gaud¨ª lo es de los barceloneses.
P. ?Considera que hay buena arquitectura en la ciudad?
R. Madrid ha tenido y tiene muy buenos arquitectos: Francisco de As¨ªs Cabrero, Rafael Moneo, Francisco S¨¢enz de Oiza, Corrales y Molez¨²n, Alejandro de la Sota¡ y la ciudad est¨¢ muy identificada con estos arquitectos. A nivel internacional, Madrid es muy reconocida, y en las facultades de arquitectura de todo el mundo se habla de la Escuela de Madrid, una s¨ªntesis del Movimiento Moderno con elementos identitarios como el trabajo con lo necesario, materiales y formas austeras, un trabajo m¨¢s con la especialidad que con la exuberancia.
La Comunidad pide actualizar los cat¨¢logos
Paloma Sobrini, directora general de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid, se muestra dispuesta a colaborar con el COAM, pero para ello pide revisar las gu¨ªas de arquitectura: "No todos los edificios que aparecen en las gu¨ªas merecen la misma protecci¨®n. Hay que actualizar los cat¨¢logos. En eso vamos a trabajar junto a la Direcci¨®n General de Urbanismo y el Colegio de Arquitectos. Porque a los peque?os ayuntamientos les supone un coste enfrentarse a esta actualizaci¨®n, as¨ª que desde la Comunidad vamos a ayudarles ofreci¨¦ndoles estudios, t¨¦cnicos y toda la ayuda que necesiten".
Seg¨²n Sobrini, en el momento en el que haya una solicitud de modificar o demoler un edificio incluido dentro del cat¨¢logo, que est¨¢ digitalizado, saltar¨¢ una alarma. "Pero eso tampoco es suficiente.?La arquitectura contempor¨¢nea est¨¢ indefensa y vamos a tomar medidas para protegerla, pero la fundamental tiene que ser actualizar los cat¨¢logos". La arquitecta le pide al Ayuntamiento de Madrid que modifique su plan general, "que es la principal herramienta para proteger edificios".
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