El plan rector del Guadarrama se aprobar¨¢ a finales de a?o
Se propone que senderistas y ciclistas transiten por rutas marcadas
El documento que regir¨¢ los usos y la gesti¨®n del Parque Nacional de la Sierra del Guadarrama estar¨¢ listo este a?o, asegura la Consejer¨ªa de Medio Ambiente y Ordenaci¨®n del Territorio. El plan tendr¨¢ una vigencia de 10 a?os y fijar¨¢ las normas de utilizaci¨®n, conservaci¨®n y protecci¨®n del parque. Ayer, los diferentes grupos de trabajo ¡ªest¨¢n participando cient¨ªficos, t¨¦cnicos y representantes de las administraciones, entidades, sectores y agentes sociales¡ª se reunieron para debatir sobre un borrador que ahora se enriquecer¨¢ con sus aportaciones y que dar¨¢ lugar a un documento inicial del Plan Rector de Uso y Gesti¨®n (PRUG).
Una vez est¨¦ finalizado, se someter¨¢ a informaci¨®n p¨²blica para que cualquier particular o entidad p¨²blica pueda emitir alegaciones. Los planes de la consejer¨ªa apuntan a que vea la luz a finales de a?o.
La regulaci¨®n de las actividades deportivas en una zona que se encuentra tan solo a 50 kil¨®metros de la capital es imperativo para proteger el entorno. En el borrador se propone que el senderismo se realice por las v¨ªas se?alizadas de forma preferente y acotar la circulaci¨®n de bicicletas tambi¨¦n a itinerarios marcados y con limitaci¨®n de velocidad. En cuanto a las rutas de escalada, se pretende que no se abran nuevas v¨ªas que precisen el uso de elementos fijos. El plan tambi¨¦n espera poder compatibilizar el vuelo libre y la actividad ecuestre, siempre bajo determinadas condiciones.
Al mismo tiempo, se est¨¢ analizando la forma de compatibilizar los usos ganaderos tradicionales, o permitir que los vecinos recojan le?as muertas del suelo para autoconsumo. Las actividades comerciales o de turismo que se permitan se someter¨¢n a autorizaci¨®n, lo que permitir¨¢ ejercer un mayor control sobre ellas.
?ngeles Nieto, de Ecologistas en Acci¨®n, advierte de que este primer documento ¡°no se puede considerar un PRUG¡±. La conservacionista critica que ¡°para empezar¡± no se sabe si hablan del ¨¢mbito del parque, de la zona perif¨¦rica de protecci¨®n o de ambos. ¡°M¨¢s que nada es un listado de actividades de ocio y recreo y poco m¨¢s¡±, sostiene. Como muestra explica que se habla de pirag¨¹ismo, ¡°cuando en el parque nacional no existe tal opci¨®n, as¨ª de perdidos est¨¢n¡±.
En su opini¨®n, lo razonable ser¨ªa tomar como punto de partida el plan director y las normativas anteriores. ¡°Lo que est¨¢ regulado no lo cambiemos, por ejemplo, si el plan rector de algunas zonas ya regulaba el uso de bicicletas, empecemos por ah¨ª y luego se ver¨¢ donde es necesario profundizar¡±, propone. Nieto espera que el texto, que es ¡°muy inicial¡±, mejore de ¡°forma dr¨¢stica¡± antes de someterlo a informaci¨®n p¨²blica.
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