Beethoven, Beethoven, Beethoven....

Media hora antes de que comenzara el ¨²ltimo de los conciertos de la integral de las sinfon¨ªas de Beethoven, con el plato fuerte de la Novena cerrando, algunas personas intentaban, sin ¨¦xito, comprar alguna entrada a los que las llevaban en la mano. Era como un tesoro que no se vend¨ªa por nada. Y una hora y media despu¨¦s el Palau estallaba en un interminable y sonoro aplauso tras guardar un silencio casi reverencial en los cuatro tiempos de la sinfon¨ªa, probablemente la m¨¢s conocida del compositor alem¨¢n.

Antes de entrar se palpaba la sensaci¨®n de las grandes citas musicales, esas que no se suelen olvidar. La Novena de Beethoven es mucho m¨¢s que una composici¨®n, expresa la armon¨ªa total. Como dec¨ªa el propio Dudamel al presentar los conciertos la semana pasada es el ¡°esp¨ªritu de la fraternidad, de la uni¨®n y de la bondad¡±. Todo eso lleg¨® a transmitir ayer el director venezolano y su orquesta. Con un coro, el Orfe¨® Catal¨¤ y el Cor de Cambra absolutamente motivados. Las voces de la soprano Julianna Di Giacomo, la mezzo Tamara Mumford, el tenor Joshua Guerrero y el bajo Solomon Howard redondearon el conjunto de voces en un escenario en el que se apretujaban los m¨²sicos y los coros. 200 personas en la escena frente a 2.000 personas que estaban entregadas desde que ha levantado la batuta en el primer comp¨¢s.

Fue la guinda de un pastel de cinco conciertos en cuatro d¨ªas consecutivos, un marat¨®n musical que ha atra¨ªdo a 10.000 personas, 600 de ellas han asistido a todos los conciertos. La integral de Beethoven es todo un tour de force porque adem¨¢s de los conciertos hay que sumar los ensayos, que en este caso han sido 21 horas. Un esfuerzo que es muy dif¨ªcilde realiazar, prueba de ello son las pocas veces que se interpretan. Ayer, la ¨²ltima de las sinfon¨ªas congreg¨® tambi¨¦n a representantes de las Administraciones, y entre ellas estaban la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y varios regidores del Consistorio barcelon¨¦s.

Ma?ana se ver¨¢ el mismo concierto en el Auditorio de Madrid y luego la integral se repetir¨¢ en Hamburgo y Viena, la cuna de Beethoven.