Los afectados por el ERE del Incas¨°l demandan a un tercio de la plantilla

El Expediente de Regulaci¨®n de Empleo (ERE) que present¨® el Incas¨°l en 2012 a¨²n colea en los tribunales y ha generado una de las situaciones m¨¢s rocambolescas que se recuerden en los juzgados de lo social en los ¨²ltimos a?os. Casi un tercio de la actual plantilla, de 294 trabajadores, est¨¢ codemandada por sus antiguos compa?eros en las denuncias individuales contra la empresa por los despidos. Los sindicatos ahora se desmarcan de la estrategia de los abogados que contrataron en su d¨ªa para defender a los 170 afectados por el ERE.

M¨¢s informaci¨®n

L¨¢grimas entre los 173 despedidos del Incas¨°l

El Incas¨°l gasta 207.000 euros en comunicaci¨®n mientras reduce plantilla

El Incas¨°l, obligado a readmitir de nuevo a su exjefe de prensa

Los juicios comenzaron el lunes pasado y pueden durar varios meses. Se celebran en 12 juzgados diferentes. Cada uno de los despedidos que ha decidido ir a los tribunales present¨® una lista de excompa?eros que, en su opini¨®n, deber¨ªan haber sido despedidos en su lugar. Los despedidos agumentan que hubo alg¨²n tipo de error en la valoraci¨®n por parte de la direcci¨®n del ente catal¨¢n, bien sea en la puntuaci¨®n o de car¨¢cter material. ¡°Hay empleados con hasta 10 codemandas. Y tienes que ir a cada juicio, ?A qu¨¦ hora trabajas?¡±, se queja un trabajador que prefiere el anonimato. ¡°Se han recibido notificaciones del caso de un afectado por el ERE que falleci¨® hace dos a?os. Ahora el proceso supuestamente lo contin¨²an sus herederos. Los abogados van a saco¡±, se queja otro.

Las demandas individuales llegan despu¨¦s de que la defensa de los trabajadores despedidos agotara la v¨ªa de la denuncia colectiva. En 2012, el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC) dio la raz¨®n al ente que depende del Departamento de Territorio y Sostenibilidad. El comit¨¦ de empresa de ese momento, liderado por CATAC, impugn¨® esta resoluci¨®n judicial pero, dos a?os despu¨¦s, el Tribunal Supremo le volvi¨® a dar la raz¨®n a la empresa p¨²blica y acredit¨® los tres motivos alegados por la direcci¨®n: econ¨®micos, organizativos y productivos.

¡°Los trabajadores que se vieron afectados y a los que se les va a extinguir el contrato van a ser debidamente indemnizados en las cantidades que preve¨ªa la ley¡±, recuerda el instituto en un comunicado. Tras el ERE, el comit¨¦ de empresa sigui¨® apoyando la defensa e incluso los trabajadores votaron en una asamblea pagar de su bolsillo la asesor¨ªa jur¨ªdica que a¨²n contin¨²a y cuya estrategia pasa por ir, ir¨®nicamente, en contra de sus intereses. ¡°Nunca participamos en el dise?o de la estrategia de la defensa, esto est¨¢ enfrentando a antiguos colegas. Se tendr¨ªa que ir contra la empresa, no contra los compa?eros¡±, explica Felipe Olivera, portavoz de CATAC.

El Incas¨°l ha contratado un bufete de abogados para que asistan a sus empleados de manera gratuita. Tambi¨¦n pueden recurrir a los servicios de UGT. Ante el posible colapso que implica la avalancha de procesos, los abogados de la empresa y los sindicatos pidieron que se agrupar¨¢n en un solo juicio, pero la petici¨®n no fue aceptada.

De momento, en el primero de los procesos, el juez ha considerado que no exist¨ªan fundamentos en la base de la demanda. ¡°Muchos excompa?eros se asombran cuando les decimos que nos han demandado. Dicen que es un error y que ya han pasado p¨¢gina. Pero las demandas no se retiran¡±, se queja otro trabajador del Incas¨°l. El conflicto actual ha pasado factura al sindicalismo, siendo CATAC el m¨¢s afectado al perder peso dentro del comit¨¦.