Pasi¨®n vegetal
La Huerta de Caraba?a lleva la pasi¨®n por la frescura y lo verde a todos los p¨²blicos
Caraba?a es una peque?a localidad a unos 50 kil¨®metros de Madrid regada por el r¨ªo Taju?a y donde proliferan las huertas. Ah¨ª decidi¨® plantar en 2007 Roberto Cabrera con un objetivo: ¡°Recuperar variedades tradicionales de hortalizas abandonadas por su baja productividad, pero que poseen una alta calidad¡±. Ahora, con esa materia prima, cocina en La Huerta de Caraba?a (calle de Jorge Juan 18; calle de Lagasca, 32).
En tres ideas
Lo mejor... La versatilidad que le da poseer dos espacios y su reivindicaci¨®n de las verduras sabrosas y frescas.
Lo peor... Que alguien lo confunda con un restaurante exclusivamente vegetariano.
Ideal para llevar a... Exvegetarianos, adictos al equilibrio en los platos o acudir a desayunar con el amante de turno.
¡°Pretendemos acercar productos que diariamente se recolectan en el campo para disfrutarlos en diferentes elaboraciones y respetando su frescura¡±, cuenta Cabrera, diplomado en Le Cordon Bleu de Par¨ªs. ¡°Todo proviene de la huerta¡±, incide el cocinero, que define su concepto gastron¨®mico como un viaje ¡°desde el campo hasta la mesa¡± y que cuenta con la complicidad del chef Ricardo ?lvarez, que estuvo 11 a?os en Santceloni, con dos estrellas Michelin.
El principal objetivo de ambos es extender su pasi¨®n por la frescura y lo verde a todos los p¨²blicos. Por eso han dividido su restaurante en dos espacios: el Bistr¨® (desde 30 euros por persona) y el Restaurante (50 euros por persona), ambos ideados por el interiorista Pepe Leal. En el primero realizan una propuesta informal, que ofrece desde desayunos hasta cenas y que est¨¢ especializado en arroces, mientras que en el segundo apuestan por una contenida elegancia y platos originales. Por la mesa desfilan suaves croquetas, crema de colmenillas con esp¨¢rragos silvestres o un delicioso br¨®coli con trufa rallada y queso parmesano.
Pero que nadie se confunda: ¡°Es un restaurante vegetal, que no vegetariano¡±, apunta Cabrera. As¨ª aparecen cuidados pescados ¡ªlubina o un delicioso pargo¡ª adem¨¢s de carnes en su punto. Todo regado por una agradable carta de vinos, que incluye, evidentemente, referencias ecol¨®gicas como Verdling, de la bodega Ossian.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.