?Qui¨¦n erosiona la democracia?

Esta vez, para identificar las amenazas antidemocr¨¢ticas no era preciso rastrear en YouTube, ni practicar un audaz periodismo de investigaci¨®n, ni disponer de un Anacleto, agente secreto, infiltrado en las filas del adversario. Esta vez, bastaba con acudir a la rueda de prensa convocada el pasado 28 de abril, en el Parlament, tras la presentaci¨®n a su presidenta del informe elaborado por el S¨ªndic de Greuges bajo el t¨ªtulo Retrocessos en mat¨¨ria de derts humans: llibertat d'expressi¨® dels c¨¤rrecs electes i separaci¨® de poders al Regne d'Espanya.

El documento, de unas 30 p¨¢ginas, consagra casi la mitad de estas a se?alar las regresiones que, en materia de derechos y libertades b¨¢sicas, se han producido durante estos ¨²ltimos a?os en el Estado espa?ol. Siempre poniendo tales retrocesos en contraposici¨®n al marco legislativo y jurisprudencial europeo, el S¨ªndic subraya las restricciones a la libertad de expresi¨®n que suponen la reforma del C¨®digo Penal, la Ley de Seguridad Ciudadana y la Ley de Seguridad Nacional, las tres de 2015. E ilustra las consecuencias pr¨¢cticas de tal amordazamiento con casos tan notorios como el procesamiento de unos titiriteros por ¡°enaltecimiento del terrorismo¡±, o la condena a Cassandra Vera por ¡°humillaci¨®n a las v¨ªctimas del terrorismo¡±, siendo la ¡°v¨ªctima¡± humillada el almirante Carrero Blanco, nada menos.

El texto se ocupa tambi¨¦n de la grave erosi¨®n del principio de separaci¨®n de poderes que vivimos. Por mucho que, en un informe de 2016, el GRECO (Grupo de Estados Contra la Corrupci¨®n, adscrito al Consejo de Europa) advirtiese ¡ªmirando a Madrid¡ª que ¡°las autoridades pol¨ªticas no deben intervenir en ninguna de las etapas de la designaci¨®n de los magistrados¡±, en Espa?a la partidizaci¨®n y la ideologizaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Constitucional (TC) contin¨²an tan pimpantes.

No solo eso. Por una parte la sentencia 42/2014 del TC ¡ªque permite someter a control jurisdiccional las resoluciones parlamentarias de car¨¢cter estrictamente pol¨ªtico, hasta entonces no impugnables¡ª y por otra la reforma en 2014 de la Ley Org¨¢nica del Constitucional ¡ªque dota a ¨¦ste de capacidad sancionadora¡ª, han modificado profunda y unilateralmente el papel del TC tal como fue consensuado durante el per¨ªodo constituyente y han da?ado su independencia, seg¨²n apuntaba el pasado marzo la Comisi¨®n de Venecia. Lo han hecho con la flagrante intenci¨®n de contrarrestar el proceso soberanista catal¨¢n, aunque fuese al precio de poner en manos del Constitucional ¡°medidas exorbitantes desde cualquier perspectiva democr¨¢tica del derecho sancionador, sea penal o administrativo¡±.

La segunda parte del informe del S¨ªndic analiza el deterioro experimentado por los derechos y libertades en Catalu?a, los casos concretos de persecuci¨®n penal contra cargos electos de car¨¢cter local y auton¨®mico, de Joan Coma a Artur Mas pasando por los miembros soberanistas de la Mesa del Parlament. Y no deja de expresar estupefacci¨®n ante la espesa capa de silencio e impunidad que ha cubierto todos los aspectos de la llamada Operaci¨®n Catalu?a, incluyendo las charlas conspirativas Fern¨¢ndez D¨ªaz-De Alfonso.

Perm¨ªtanme enfatizar que el documento al que aludo no habla de futuribles, de ¡°qu¨¦ haremos con los datos fiscales de la ciudadan¨ªa si...¡± o de ¡°qu¨¦ les ocurrir¨¢ a los funcionarios cuando...¡±. Habla de leyes vigentes cuya aplicaci¨®n ha supuesto a d¨ªa de hoy miles de multas, decenas de procesamientos y diversas condenas. Tampoco se trata de un panfleto ni del contenido de una charla propagand¨ªstica o agitatoria. El S¨ªndic de Greuges es una respetada e independiente instituci¨®n estatutaria cuyo actual titular ¡ªdesde 2004¡ª es Rafael Rib¨® i Mass¨®, exsecretario general del PSUC y expresidente de Iniciativa per Catalunya. A mayor abundamiento, han contribuido al informe los catedr¨¢ticos Joan Josep Queralt (penalista) y Joan Vintr¨® (constitucionalista), con la colaboraci¨®n puntual del exfiscal Jos¨¦ Mar¨ªa Mena. Vamos, no precisamente una banda de maulets...

Sin embargo, el informe ha tenido escaso eco informativo y de opini¨®n. Todas las vestales de la juridicidad, todos los celadores de la salud democr¨¢tica supuestamente en peligro a causa del proceso callan. Porque la democracia es importante, claro, pero la unidad de Espa?a lo es mucho m¨¢s.

Termino citando dos frases del informe del S¨ªndic; la que previene contra ¡°la imagen de la justicia utilizada como un instrumento servil en contra de una posici¨®n pol¨ªtica¡±; y aquella otra que constata: ¡°los sistemas pol¨ªticos inseguros por su falta de consenso social necesitan recurrir al derecho penal para proteger su prestigio¡±.

Joan B. Culla es historiador.