Las Galer¨ªas Dalmau, ¡®reabren¡¯ en internet

Duchamp, Picabia, Gleizers, Delaunay, Van Dongen, pero tambi¨¦n Torres-Garcia, Gris, Picasso y Dal¨ª expusieron en Barcelona gracias a la visi¨®n abierta del marchante y pintor (expuso en el templo modernista de Els Quatre Gats) Josep Dalmau. Este emprendedor fue el propietario de las galer¨ªas del mismo nombre ¡ªque entre 1911 y 1930, primero en la calle del Pi, luego en Portaferrisa y, al final, en el Paseo de Gr¨¤cia¡ª, fueron el foco de las vanguardias hist¨®ricas en Barcelona y por extensi¨®n de Catalu?a, adem¨¢s de impulsor de nuevos artistas y nuevas corrientes.

La documentaci¨®n de las Dalmau fue adquirida por el historiador del arte y cr¨ªtico Rafael Santos Torroella y su mujer Maite Bermejo. Tras el fallecimiento de la pareja, en 2014, el Ayuntamiento de Girona se qued¨® con el fondo art¨ªstico reunido por Santos y recibi¨® la donaci¨®n del archivo y la biblioteca por parte de los descendientes de Bermejo; una documentaci¨®n que tiene como parte fundamental los papeles y documentaci¨®n de la galer¨ªa barcelonesa y que ahora pueden consultarse libremente por internet.

A Dalmau hay que reconocerle su buen ojo para captar las nuevas corrientes art¨ªsticas. Y que no le daban miedo las cr¨ªticas. Por eso, en 1912, al a?o siguiente de 'nacer' el arte cubista en una exposici¨®n en Par¨ªs, que estuvo marcada por la pol¨¦mica, no dud¨® en traer el nuevo arte a Barcelona reuniendo obras de Gris, Agero, Gleizes y Duchamp, entre otros muchos, y organizando la primera exposici¨®n cubista fuera de Par¨ªs.

Esta galer¨ªa es la que celebr¨® las primeras exposiciones individuales de dos artistas universales como son Joan Mir¨® (en 1918), que fue tildado de loco y no vendi¨® casi ninguna de las cerca de 200 obras que expuso. Tambi¨¦n expuso a Salvador Dal¨ª, en 1922 por primera vez y en 1925 con su primera individual. En la segunda se pudieron ver cuadros como Muchacha en la ventana, hoy en el Reina Sof¨ªa de Madrid, una de las muchas pinturas inspiradas en su hermana Anna Maria, su modelo en estos momentos de juventud, antes de la llegada en 1929 de Gala. Dal¨ª cosech¨® tal ¨¦xito que dos a?os despu¨¦s repiti¨® con nuevas obras En el caso de Mir¨®, adem¨¢s, Dalmau fue el que impuls¨® su carrera internacional organizando una exposici¨®n en Par¨ªs en 1921, que se sald¨® con un gran fracaso de ventas, pero represent¨® el primer intento de exportaci¨®n de la pintura catalana en el extranjero.

En 1922, las Dalmau acogieron una exposici¨®n con 46 obras de Francis Picabia, con un cat¨¢logo editado por Andr¨¦ Breton. Dalmau tambi¨¦n colabor¨® con la edici¨®n de la revista del artista 391.

El fondo accesible est¨¢ constituido unas 800 piezas (de los 30.000 del fondo Santos Torroella), entre textos, fotograf¨ªas, prensa ¡ªsobre todo cr¨ªticas de las exposiciones¡ª, adem¨¢s de los cat¨¢logos e invitaciones y cartas entre el galerista y los artistas. Un fondo de primer orden para conocer este periodo desde la vertiente del mercado del arte, no solo barcelon¨¦s sino mundial, de las primeras d¨¦cadas del siglo XX. De Josep Dalmau, aparte de los documentos que ahora se han hecho p¨²blicos, se conserva un impresionante retrato que pint¨® en 1911 M¨¦la Muter (en el MNAC), el mismo a?o en el que expuso esta artista en Barcelona, en las Galer¨ªas Dalmau.