Mojica insta a las Administraciones a invertir en investigaci¨®n

El profesor de la Universidad de Alicante Francis Mojica ha defendido que para ayudar a las universidades a remontar despu¨¦s de a?os de crisis hace falta que las administraciones p¨²blicas "miren a la realidad y no hacia otro lado, que no esperen que los profesores salgamos a la calle a reclamar". "Tienen que ser conscientes de la realidad y mirar a otros pa¨ªses donde la inversi¨®n en investigaci¨®n se multiplica por diez", ha aseverado.

El cient¨ªfico alicantino se ha pronunciado en estos t¨¦rminos en una rueda de prensa previa a su investidura este martes como doctor honoris causa por la Universitat Polit¨¨cnica de Val¨¨ncia (UPV). El nombramiento reconoce la trayectoria de Mojica, que fund¨® en la Universidad de Alicante el grupo de investigaci¨®n en Microbiolog¨ªa Molecular centrado en el estudio de las secuencias CRISPR (Clustered Regularly Interspaced Short Palindromic Repeats), de las que fue su descubridor inicial.

"Soy profesor universitario y defiendo la educaci¨®n p¨²blica y entiendo es absolutamente necesaria y tambi¨¦n la investigaci¨®n en los centro p¨²blicos", ha subrayado el microbi¨®logo, para a?adir seguidamente que el hecho de recibir esta distinci¨®n y en su tierra es "una satisfacci¨®n". "No puedo aspirar a m¨¢s", ha indicado.

Mojica ha defendido que en la universidad espa?ola se "hace muy buena investigaci¨®n a pesar de los pesares y de que es bastante dif¨ªcil". "Me dicen que lo m¨ªo es un ejemplo, evidentemente todos hacemos cosas que pueden ser un ejemplo positivo o negativo, y en mi caso las circunstancias no eran ¨®ptimas en ese momento", pero "cuando se re¨²nen la buena voluntad y el esfuerzo de colaboradores que creyeron es una satisfacci¨®n y este proyecto salido de maravilla".

El investigador reconoce que los premios que le est¨¢n llegando por su trabajo -Mojica ha estado, incluso, a las puertas del Nobel- es "algo que supera a cualquiera". En cualquier caso, ha se?alado que tiene proyectos donde elegir, "y eso es algo positivo, aunque duele dejar" otros, "por eso es una mezcla de satisfacci¨®n y frustraci¨®n por no poder atender a todo el mundo".

Preguntado por la "receta" que pedir¨ªa a las administraciones p¨²blicas para remontar las universidades tras la crisis econ¨®mica, Mojica ha contestado: "Que miren a la realidad y no miren a otro lado, que no esperen que salgamos a la calle los profesores a reclamar porque no somos as¨ª, igual deber¨ªamos serlo".

"Creo que eso pasa en este pa¨ªs y en otros, --ha proseguido-- cuando hay problemas de dinero la investigaci¨®n queda en ¨²ltimo lugar y se financian otras cuestiones que socialmente van a ser m¨¢s reconocidas".

En este punto, el especialista ha considerado que los dirigentes "han de ser conscientes de la realidad y mirar a otros pa¨ªses donde la inversi¨®n en investigaci¨®n se multiplica por diez". Ha puesto como ejemplo a China, donde "son los primeros que han llevado a cabo modificaciones de embriones y los primeros que llevan a cabo ensayos cl¨ªnicos estas herramientas del CRISPR para curar c¨¢ncer o sida".

El ejemplo de "los que saben"

"Son los primeros y lo son porque han utilizado por 10 la inversi¨®n en investigaci¨®n. Hay que seguir el ejemplo de los saben lo que tienen que hacer y los que, como consecuencia de ese conocimiento, tiran hacia adelante mucho m¨¢s r¨¢pido que los que miran para otro lado", ha rematado.

Sobre los resultados a los que espera llegar en su carrera, ha asegurado que su "m¨¢xima aspiraci¨®n la obtuve hace 14 a?os con este descubrimiento". "Eso para m¨ª fue muy grande y muy inesperado, tengo esperanzas de conseguir profundizar a¨²n m¨¢s y entender c¨®mo funcionan estos mecanismos en la naturaleza porque solo sabemos una parte".

Acerca de las aplicaciones, ha apuntado que en microbiolog¨ªa se pueden utilizar estas herramientas para la identificaci¨®n de pat¨®genos para saber cu¨¢l es el origen de una determinada enfermedad, as¨ª como para conocer c¨®mo evolucionan las poblaciones de microorganismos e identificar virus con el fin de desarrollar antimicrobianos espec¨ªficos que permiten matar exclusivamente a bacterias que tienen resistencia a antibi¨®ticos. "Vamos a dar un gran salto", ha apostillado.

Asimismo, ha a?adido que estas herramientas se pueden transferir a c¨¦lulas eucariotas de plantas y animales "y ah¨ª se puede inicialmente modificar ese libro de texto de cualquier ser vivo", lo que "implica que se pueden curar enfermedades, identificar cu¨¢les son los determinantes del sabor de los tomates y cualquier cosa que se pueda imaginar teniendo en cuanta que los seres vivos funcionan gracias a esa informaci¨®n en forma de ADN y t¨² puedes rescribirlo".

En este sentido, ha se?alado que la eficacia y accesibilidad a estas herramientas era "impensable" hace tres o cuatro a?os, aunque ha admitido que este hecho ha generado que haya una "gran preocupaci¨®n" y un debate moral sobre la modificaci¨®n del gen.

Francisco J. Mart¨ªnez Mojica (Elche, 1963) se licenci¨® en Biolog¨ªa en la Universitat de Val¨¨ncia en 1986 y, una d¨¦cada despu¨¦s, se incorpor¨® a la Universidad de Alicante como profesor titular. All¨ª fund¨® el grupo de investigaci¨®n en Microbiolog¨ªa Molecular centrado en el estudio de las secuencias CRISPR, de las que fue su descubridor inicial.

Mojica supo asignar correctamente a esta secuencia el papel fisiol¨®gico que desempe?a. Y es que, junto a unas prote¨ªnas asociadas, la secuencia forma el sistema CRISPR/Cas que, convenientemente manipulado, sirve para modificar de forma muy espec¨ªfica, precisa y sencilla, genomas de todo tipo, incluido el humano. Las aplicaciones de todo ello en biomedicina y biotecnolog¨ªa son pr¨¢cticamente ilimitadas.

En 2015, la revista Science lo consider¨® el descubrimiento del a?o. Y en 2016, Eric S. Lander, investigador del MIT, public¨® el art¨ªculo titulado The Heroes of CRISPR, donde reivindicaba la contribuci¨®n clave de Mojica al hallazgo cient¨ªfico. Desde entonces, no han cesado los galardones y reconocimientos a su labor, incluido el Premio Jaime I de Investigaci¨®n B¨¢sica (2016) o el Premio Albany (2017).