El recuerdo de los gestos

En el Centro de Arte Dos de Mayo de M¨®stoles (CA2M), las obras han cobrado vida. Ya no es el visitante quien se acerca a observarlas, sino que son ellas las que se desplazan por el espacio alterando la relaci¨®n entre ambos. Esto se debe a la celebraci¨®n de Una exposici¨®n coreografiada (hasta el 15 de octubre), una muestra que busca romper con el concepto tradicional de las exposiciones y su relaci¨®n con la danza y las artes visuales.

Durante todo el d¨ªa, tres bailarines ¡ªen ausencia de decorado, luz dram¨¢tica y m¨²sica¡ª interpretan una coreograf¨ªa de gestos, figuras y desplazamientos con arreglo a las partituras e instrucciones escritas por artistas, core¨®grafos y m¨²sicos de fama internacional como Cecilia Bengolea, Jonah Bokaer, Tim Etchells, Karl Holmqvist, Jennifer Lacey, Roman Ond¨¢k, Michael Parsons y Michael Portnoy.

Partiendo de los t¨¦rminos que componen una coreograf¨ªa (partitura, cuerpo, espacio, tiempo y memoria), la muestra reflexiona sobre la organizaci¨®n de las exposiciones. ¡°Suele ser un espacio de acumulaci¨®n temporal de objetos dispares. Con este trabajo queremos reconsiderar la materialidad de la obra y de la exposici¨®n, y ahondar en la visi¨®n de lo ef¨ªmero y lo intangible¡±, explica su comisario, Mathieu Copeland. Y a?ade: ¡°Esta exposici¨®n se forma y evoluciona a lo largo del tiempo y solo se fija en la memoria, porque al final lo ¨²nico que queda es el recuerdo de los gestos efectuados¡±.

Preguntado por la posible similitud con un espect¨¢culo de danza, Copeland defiende que tanto la duraci¨®n como el objetivo de su creaci¨®n son elementos claves para entender esta nueva forma de exhibir arte. ¡°Un espect¨¢culo de danza dura un tiempo determinado, dos horas, seis, un d¨ªa entero como m¨¢ximo. Mientras que esta exposici¨®n coreografiada est¨¢ de manera constante (solo interrumpida por el cierre del edificio) durante un mes¡±. Y prosigue: ¡°La otra diferencia reside en el origen de su creaci¨®n, lo hicimos pensando en una obra de arte en movimiento, el fin ¨²ltimo de la coreograf¨ªa es ser exhibida y as¨ª debe ser entendida¡±.

Una exposici¨®n coreografiada es una coproducci¨®n original de las galer¨ªas de arte, Kunsthalle de St Gallen (Suiza) y de La Ferme du Buisson de Noisiel (Francia), y fue estrenada en 2007 y 2008, respectivamente. Copeland cuenta que esta muestra no podr¨ªa haberse realizado en cualquier otro espacio: ¡°Nos emocionamos mucho cuando nos hicieron llegar la propuesta, es una oportunidad ¨²nica para traer este concepto a Espa?a. Adem¨¢s, la arquitectura del CA2M lo convierte en un lugar inmejorable para albergar una muestra de estas caracter¨ªsticas¡±.

Copeland lleva a?os desarrollando proyectos que buscan subvertir el concepto tradicional de las exposiciones y espera generar un gran impacto con este ¨²ltimo. ¡°El espacio cobra un gran sentido, la obra se acerca al p¨²blico en vez de el p¨²blico a la obra, y eso le obliga de alg¨²n modo a tomar partido de lo que est¨¢ pasando¡±. Sin embargo, reconoce que es un gran reto introducir una novedad as¨ª. Para entender mejor estas nuevas dimensiones de expresi¨®n, la muestra va acompa?ada del libro Coreografiando Exposiciones, que re¨²ne a artistas pl¨¢sticos, core¨®grafos, m¨²sicos, realizadores, te¨®ricos y comisarios internacionales. El pr¨®logo est¨¢ escrito por el propio Copeland.