Pluralizar la econom¨ªa

El movimiento Post-Crash naci¨® en Manchester en 2014 para incidir en los planes docentes de econom¨ªa, actualizar contenidos y a?adir otras perspectivas a las teor¨ªas dominantes. En Catalu?a, su arraigo no ha sido f¨¢cil. De las tres universidades (UPF, UB y UAB) en las que tuvo presencia, tres a?os m¨¢s tarde s¨®lo sigue en la primera. ¡°Hemos tenido un buen recibimiento por parte de los profesores, pero los planes docentes no han cambiado¡±, admite su portavoz, Samuel Garc¨ªa.

La principal demanda de este grupo de estudiantes pasa por saber c¨®mo pensaban los autores de la mayor¨ªa de manuales que aparecen en los planes de estudio de las facultades de econom¨ªa para que los alumnos comprendan qu¨¦ se puede esperar de esas lecciones. La demanda se extender¨ªa posteriormente a los profesores asociados: ¡°Nos gustar¨ªa tener m¨¢s cuidado y control sobre los profesores, principalmente asociados, que contrata la UPF porque queremos saber con qu¨¦ teor¨ªa se identifican¡±, afirma Garc¨ªa.

El movimiento Post-Crash parte de la premisa de que no existe un pluralismo en las disciplinas econ¨®micas en los planes docentes porque hay una hegemon¨ªa de las ideas neocl¨¢sicas. El decano de la facultad de Econom¨ªa de la Universitat Pompeu Fabra, Walter Garc¨ªa-Fontes, cree que no es as¨ª porque afirma que las asignaturas metodol¨®gicas, como las matem¨¢ticas, contabilidad o estad¨ªstica, no se pueden inscribir en ninguna disciplina econ¨®mica. ¡°Es dif¨ªcil cuando se hacen materias de car¨¢cter instrumental decir a qu¨¦ corriente pertenecen¡±, afirma Garc¨ªa-Fontes, que considera que los estudiantes que se enrolan en estos grupos tienen una visi¨®n limitada de la econom¨ªa, pero que cuentan con un gran esp¨ªritu cr¨ªtico, que es lo que m¨¢s cuesta incentivar en los estudiantes universitarios, para ¨¦l.

¡°Los textos est¨¢n fundamentados en la eficiencia, la utilidad y en aumentar la acumulaci¨®n de capital¡±, afirma Samuel Garc¨ªa. Este enfoque significa, para este colectivo, que otros elementos como el impacto medioambiental de la econom¨ªa o los efectos sobre las personas queden relegados o no se traten en toda la carrera. Para remediarlo, proponen que se hagan m¨¢s asignaturas de historia o que se a?adan otras disciplinas, como la antropolog¨ªa. En el grado de Empresariales s¨®lo hay una asignatura troncal de historia, aunque los alumnos pueden especializarse a trav¨¦s de optativas. ¡°Chocamos en los planteamientos de los planes de estudio, pero s¨ª que podemos ofrecer asignaturas optativas¡±, dice el decano de la facultad. Sin embargo, apunta que la demanda de estas asignaturas es minoritaria y que otras relacionadas con m¨¢rketing cuentan con muchos m¨¢s alumnos. Del mismo modo, rechaza que se a?adan al curr¨ªculum general asignaturas de otras disciplinas: ¡°Si a?adimos m¨¢s asignaturas de antropolog¨ªa o historia no habr¨ªa sitio para asignaturas de econom¨ªa¡±, argumenta.

Pese a estas diferencias, las dos partes coinciden en que la relaci¨®n entre ellas es muy buena. Desde el decanato se aplauden iniciativas de este tipo, seg¨²n Garc¨ªa-Fontes, que va m¨¢s all¨¢ y afirma que los alumnos que se enrolan en grupos de formaci¨®n cr¨ªtica en su etapa universitaria acabar¨¢n incidiendo en la disciplina en el futuro: ¡°Grandes economistas de la corriente m¨¢s mainstream, como Daron Acemoglu formaron parte de grupos cr¨ªticos en su etapa universitaria¡±.

La relaci¨®n entre los estudiantes y la universidad se canaliza a trav¨¦s del decanato. El grupo de formaci¨®n cr¨ªtica ha organizado actividades conjuntas con la Facultad de Econom¨ªa, como un ciclo de pel¨ªculas de econom¨ªa cr¨ªtica o debates sobre diferentes materias en los que participaban profesores a propuesta del decanato. Samuel Garc¨ªa afirma que la recepci¨®n que ha habido entre el profesorado a su propuesta ha sido positiva en general, pero lamenta que la existencia de unos planes docentes tan marcados imposibilite cambios de mayor calado. Hasta el momento, el gran triunfo de este grupo de estudiantes ha sido que se contextualicen m¨¢s las lecturas que se imparten en las clases. Es en este punto donde el decano agradece m¨¢s la aportaci¨®n de Post-Crash, porque cree que muchos alumnos se encuentran con problemas a la hora de encarar el temario cuando se marchan de Erasmus: "Si en la facultad impusi¨¦ramos diez lecturas por temario arder¨ªa la universidad". Aun as¨ª, Samuel Garc¨ªa reconoce que su mensaje es dif¨ªcil de extender.

Post-Crash se fund¨® en 2014 en Manchester por un grupo de estudiantes que consideraban que los planes de estudio de su facultad hab¨ªan quedado desfasados y que no se ajustaban a la realidad. El colectivo cuenta con m¨¢s de 1.200 miembros seg¨²n su p¨¢gina web. Las corrientes internacionales se agrupan bajo la Iniciativa Internacional de Estudiantes por el Pluralismo en la Econom¨ªa (Isipe, por sus siglas en ingl¨¦s), que a¨²na a 52 organizaciones estudiantiles de 23 pa¨ªses.