Juristas cuestionan la v¨ªa telem¨¢tica para investir a Puigdemont

La pr¨®xima legislatura en el Parlament est¨¢ condicionada por la inc¨®gnita de si Carles Puigdemont regresar¨¢ para someterse a la sesi¨®n de investidura porque se arriesgar¨ªa a ser detenido. Ante ese escenario, Jordi Turull, exconsejero y diputado electo, ha planteado la opci¨®n de que Puigdemont participe en el debate desde Bruselas v¨ªa telem¨¢tica. La propuesta ha generado el rechazo un¨¢nime de la oposici¨®n y hasta sus socios de Esquerra dudan que sea viable. Profesores de Derecho Constitucional la desestiman mientras otros consideran que el debate es absurdo porque consideran que tanto Puigdemont como Oriol Junqueras, exvicepresidente del Govern, ahora encarcelado, deber¨ªan poder asistir con normalidad a la sesi¨®n porque no han cometido ning¨²n delito.

Elsa Artadi, portavoz de Junts per Catalunya, afirma que el reglamento del Parlament da margen para hacerlo mientras Carlos Carrizosa, portavoz de Ciudadanos, afirm¨® esta semana que el plan es "un invento" de Turull y que lo impugnar¨¢n porque lo consideran ilegal. El reglamento del Parlament no dice nada, por razones obvias, sobre una investidura telem¨¢tica. Te¨®ricamente, esa opci¨®n obligar¨ªa a modificarlo y ah¨ª ya existe un impedimento: el art¨ªculo 59 sostiene que las comisiones legislativas de la C¨¢mara se constituyen una semana despu¨¦s de la de investidura. La del reglamento (art¨ªculo 60) tiene ese rango y entrar¨ªa tambi¨¦n en funcionamiento una semana despu¨¦s.

"Es que no creo que haga falta llegar a ese argumento", sostiene Argelia Queralt, profesora de Derecho Constitucional de la Universidad de Barcelona. "Estamos en una democracia representativa y elegimos a unas personas para que est¨¦n en la C¨¢mara. Eso es saltarse las reglas del juego, que hemos votado y que conforman nuestro sistema pol¨ªtico, para hacerlas a medida de una persona. Eso no comporta ni seguridad jur¨ªdica ni es Estado de Derecho, que requiere una previsibilidad", afirma con contundencia."No se sostiene. Las normas no son piezas sueltas de un puzle. Se deben de interpretar dentro de un sistema".

Eso es saltarse las reglas del juego para hacerlas a medida de una persona", afirma Argelia Queralt, profesora de Derecho Constitucional de la UB

Agust¨ªn Ruiz Robledo, catedr¨¢tico de Derecho Constitucional de la Universidad de Granada, ilustr¨® el caso parafraseando esta reflexi¨®n de Goethe. "Dijo que los juristas", recuerda el profesor, "tienen m¨¢s imaginaci¨®n interpretando las leyes que los poetas el mundo". "Se podr¨ªa ech¨¢ndole mucha imaginaci¨®n. Pero el ordenamiento jur¨ªdico obliga a participar en un debate y eso no se puede hacer desde Bruselas", alega. Ruiz Robledo otorga en este punto una importancia crucial a la composici¨®n de la Mesa porque podr¨ªa tener capacidad para interpretar al reglamento de forma "imaginativa".

Pero se?ala otro punto que apenas figura en el debate: que no se obligue a los diputados del Parlament adquirir el acta de forma presencial al ir a jurar o prometer la Constituci¨®n a diferencia de lo que ocurre en el Congreso u otros parlamentos auton¨®micos. Simplemente firman un formulario. "Yo ya no veo ese correcto pero en el derecho parlamentario son muy importantes los usos y precedentes. Es incongruente con toda la tradici¨®n del derecho espa?ol. Pero es una pr¨¢ctica consolidada, que desde el principio se hac¨ªa mal, y no creo que ning¨²n tribunal lo anule", dice en alusi¨®n a esa modalidad. Y se?ala que en el caso de una investidura o un mandato desde el exterior implicar¨ªa "retorcer" el derecho y aplicar imaginaci¨®n a la ley para entender que la "incapacidad" alude a alguien que no est¨¢ enfermo sino en Bruselas para evitar la justicia.

Se podr¨ªa echar mucha imaginaci¨®n pero eso es retorcer el derecho", alega Ruiz Robledo, catedr¨¢tico de Derecho Constitucional de la Universidad de Granada

Frente a estas tesis, Joan Vintr¨®, doctor en Derecho y que fue letrado del Parlament, niega la mayor y considera "absurdo" debatir sobre una estricta cuesti¨®n del reglamento porque cree que Puigdemont ni Junqueras han cometido delito alguno y que, por tanto, deber¨ªan estar en libertad y acudir con normalidad a la sesi¨®n de investidura. "Me niego a hablar del reglamento", se?ala Vintr¨®. "El problema es que hay dos se?ores que no han cometido ning¨²n delito y su situaci¨®n es una anomal¨ªa. Y no es que lo diga yo. Lo dice un centenar de catedr¨¢ticos de derecho Penal de toda Espa?a de que no hubo rebeli¨®n. Es que no hubo ni una gota de violencia", afirma. Vintr¨® alude as¨ª al manifiesto suscrito por un centenar de profesores de Penal que califican de error imputar a los pol¨ªticos el delito de "rebeli¨®n" como el de "sedici¨®n" por no haberse registrado ni violencia ni haber provocado un alzamiento "tumultuario". Marcel Mateu, profesor de la Derecho de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), defendi¨®, en declaraciones a TV3, que los ocho diputados electos, tanto los de Bruselas como los que est¨¢n en prisi¨®n, puedan delegar el voto porque afectar¨ªa a uno de los derechos b¨¢sicos del ordenamiento jur¨ªdico como es el de la participaci¨®n pol¨ªtica.

Es un debate absurdo. Ni Puigdemont ni Junquers han cometido ning¨²n delito y deber¨ªan poder asistir con normalidad a la investidura", dice Joan Vintr¨®, doctor en Derecho

Joan Queralt, catedr¨¢tico de Derecho Penal de la Universidad de Barcelona, apunta que el Tribunal Constitucional ya aval¨® la ¨²ltima reforma del reglamento. La cuesti¨®n es que la oposici¨®n ya ha anunciado que en ese supuesto acudir¨¢ al Tribunal Constitucional que podr¨ªa dictar la suspensi¨®n autom¨¢tica de la norma. "No se aguanta que un presidente est¨¦ en el extranjero", afirma Argelia Queral recordando que el art¨ªculo 6 de la ley del president indica que puede delegar en un conseller en cap o un vicepresidente en caso de "ausencia, enfermedad o impedimento". "Se debe entender que es algo temporal. No se puede forzar o reescribir las normas existentes para justificar que una persona que dijo que volver¨ªa y que ahora se quiere quedar fuera", insiste. Gabriel Rufi¨¢n, de Esquerra, fue claro cuando se le plante¨® si quer¨ªa que regresara Puigdemont: "Si, si. Lo digo con todo el respeto pero no se puede tener un presidente por Skype".