¡°Hay que ver la mediaci¨®n como una filosof¨ªa de vida¡±
Sandra Luz Souto divulga este recurso para avanzar hacia una ¡°sociedad m¨¢s sana¡±
¡°Ya no pleiteo, medio. En la medida en que se puede¡±. A Sandra Luz Souto una ¡°crisis de ¨¦tica profesional¡± como abogada en pleno corralito en su Argentina natal le llev¨® a dar este salto desde los juzgados a la mediaci¨®n, una disciplina para la gesti¨®n positiva de conflictos a la que se dedica hoy desde Valencia, y con giro vital incluido, todos sus esfuerzos. Licenciada en Derecho y Posgrado en Psicolog¨ªa, forma parte de la junta directiva de la Federaci¨®n para la Mediaci¨®n de la Comunidad Valenciana, es secretaria de la Asociaci¨®n Intercultural Midrashic de Gandia, con 14 a?os de trayectoria, y trabaja con poblaci¨®n en riesgo de exclusi¨®n social en el centro de desarrollo rural La Safor. Es adem¨¢s formadora en mediaci¨®n en la Universidad de Alicante y la Universidad de Valencia, entre otros organismos.
¡°La mediaci¨®n no es la panacea¡±, apostilla con realismo, el mismo con el que afirma tambi¨¦n que ¨¦sta s¨ª abre el camino hacia una sociedad ¡°m¨¢s sana y m¨¢s feliz, menos individualista y m¨¢s solidaria¡±. Su objetivo desde que cruzara el Atl¨¢ntico y se asentara en Gandia es salir a la calle y explicar qu¨¦ es la mediaci¨®n, sus bondades.
¡°Hay que patear el barrio. Ver qu¨¦ conflictos y problemas tiene la gente y ofrecer este recurso, al que no se accede por desconocimiento, porque si vieran lo que implica la mediaci¨®n para su persona o su entorno lo utilizar¨ªan¡±. Trabaja para lograr que deje de verse como un proceso limitado a las cuatro paredes de un despacho, ¡°cuando el conflicto ya se ha manifestado o est¨¢ en escalada¡±, y gane peso como ¡°filosof¨ªa de vida¡± y como ¡°herramienta de prevenci¨®n¡± de choques. Esos que emergen en las relaciones familiares, entre parejas, con los hijos, en la escuela, en el trabajo, en la finca de vecinos, en el barrio o en el plano pol¨ªtico y econ¨®mico, nacional e internacional. ?C¨®mo? ¡°Educando. Mi apuesta es a la educaci¨®n¡± en t¨¦cnicas y habilidades que desarrollen la empat¨ªa y basadas en la comunicaci¨®n, ¡°para que la gente pueda resolver de una forma sana sus conflictos y diferencias¡±. Ello pasa, dice, por conseguir la implicaci¨®n de los poderes pol¨ªticos, los agentes sociales y los medios de comunicaci¨®n.
Este jueves Souto ha predicado con el ejemplo y ha salido a calle en Castell¨®n. Organizada por el Col¡¤legi Oficial de Treball Social (COTS) con motivo del D¨ªa Europeo de la Mediaci¨®n, ha impartido la conferencia "Visi¨®n pr¨¢ctica de la mediaci¨®n a pie de calle". Una ponencia que llega en v¨ªsperas de la aprobaci¨®n el pr¨®ximo febrero del anteproyecto de la Ley de Mediaci¨®n de la Comunidad Valenciana, que regular¨¢ un marco general para los procedimientos de mediaci¨®n como alternativa a los tribunales para la resoluci¨®n de conflictos. Con este acto el COTS ha puesto de relieve ¡°la necesidad que la sociedad actual tiene de hacer un cambio sustancial en la manera de afrontar sus conflictos. De encontrar nuevas relaciones mejorando la comunicaci¨®n¡±.
La propia historia de Sandra Luz Souto allana el camino hacia lo que, dice, debe entenderse por mediaci¨®n, y los beneficios ligados a ella. Este recurso se sit¨²a en el plano opuesto a la denuncia; es accesible, tambi¨¦n desde el punto de vista econ¨®mico. ?gil, frente al desgaste de los mecanismos judiciales ¡°y sobre todo, permite preservar las relaciones a futuro entre las partes implicadas porque supera el concepto de confrontaci¨®n ¡®yo gano, t¨² pierdes¡¯ por el de ¡®yo gano, t¨² ganas¡±.
¡°Vi que la forma de resolver conflictos por la v¨ªa de la justicia no me satisfac¨ªa. Sobre todo en el ¨¢mbito familiar, en el que trabaj¨¦ muchos a?os. Aqu¨ª las relaciones se deben preservar a futuro, m¨¢s en los casos de una separaci¨®n con descendencia¡±, explica. ¡°Descubro la mediaci¨®n en medio de una crisis ¨¦tico profesional en el mundo de derecho. Los abogados nos creemos los amos y se?ores de la verdad y no hay una ¨²nica verdad, como no hay un ¨²nico concepto de justicia¡±, a?ade. Y fue preparando, poco a poco, el camino para el cambio. ¡°Recurro a un Posgrado de Psicolog¨ªa para desestructurarme, porque los abogados estamos muy estructurados. La mediaci¨®n no es algo exclusivo del mundo del derecho. Pensamos que la varita m¨¢gica siempre la tiene el abogado y no es as¨ª¡±.
A su larga trayectoria como abogada de familia le sigui¨® su etapa como letrada apoderada de la banca bonaerense, ¡°en pleno corralito¡±. A?o 2002. ¡°Ah¨ª toqu¨¦ fondo y es cuando decid¨ª cambiar de aires y emigr¨¦. Me vine para el otro lado del charco decidida a hacer lo que me hace feliz y no lo que me d¨¦ dinero¡±.
Y lo encontr¨® en Gandia. La ciudad valenciana se ha convertido en referente en experiencias de mediaci¨®n a pie de calle. Aqu¨ª se han llevado a cabo en el ¨²ltimo a?o hasta trece foros para abordar varios binomios: mediaci¨®n-violencia de g¨¦nero; mediaci¨®n e inmigraci¨®n; mediaci¨®n-educaci¨®n; mediaci¨®n-participaci¨®n ciudadana, etc¨¦tera. ¡°Son espacios abiertos donde se invita a la gente, de cualquier perfil, edad o profesi¨®n, se pone un tema y la gente habla. Potenciamos la escucha activa y el empoderamiento. No se debate, se habla y se escucha. Es muy enriquecedor¡±. Tras cada encuentro se resumen las intervenciones, siempre de forma an¨®nima. ¡°Estamos ultimando una publicaci¨®n con todas ellas¡±, explica. Tambi¨¦n en Gandia se han impartido m¨²ltiples cursos sobre mediaci¨®n, se ha promovido el recurso en conflictos en barrios e incluso se ha dado el salto a los colegios con las ¡®escuelas de padres mediadores¡¯.
Un ejemplo que muestra, seg¨²n Sandra Luz Souto, que la mediaci¨®n, y el proceso de aprendizaje mutuo que conlleva, independientemente de si conduce o no a acuerdos, ha de dejar de verse ¡°como una utop¨ªa, porque es una forma de vivir¡±. ¡°Podemos decirnos lo que nos gusta o no sin hacernos da?o. Se trata de empatizar, de transmitir pero tambi¨¦n de percibir las emociones y los sentimientos de los dem¨¢s¡±.
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