Del libro a la nube

Eduardo Mendoza, premio Cervantes 2016, cuenta que no tiene biblioteca ya que acostumbra a deshacerse de todos los libros que lee y muchos de los que no ha le¨ªdo de los que tiene un mal pron¨®stico, porque siempre ha vivido de un lado para otro y se ha tenido que desprender de lo prescindible: la vajilla y los libros. Otro Premio Cervantes, el argentino Jorge Luis Borges, escribi¨® en 1941 uno de sus famosos relatos en los que hablaba de la Biblioteca de Babel, un compendio infinito donde se almacena (o se intenta) todo el conocimiento en un mismo espacio. Entre la inexistente de Mendoza y la ut¨®pica de Borges existen muchas bibliotecas, ya que todo el mundo acaba formando una en la que re¨²ne sus libros preferidos, sea por lo que cuentan y explican o por sus bellas cubiertas, encuadernaciones o ilustraciones; unos libros que acaban dando personalidad a quien los posee. Son bibliotecas tan diversas como personales. Lo mismo que las que pueden verse en la exposici¨®n Bibliotecas ins¨®litas (que pueden verse en el Arts Santa M¨°nica de Barcelona despu¨¦s de presentarse en La Casa Encendida de Madrid, el otro centro que coproduce la muestra en 2017) en la que una docena de artistas de la mano de la comisaria Gloria Picazo, interpretan el concepto de biblioteca y ofrecen una serie de propuestas sorprendentes, alternativas y divertidas de estos para¨ªsos de los libros.

Como ocurre con las bibliotecas personales, las propuestas por los artistas seleccionados por Picazo ¡ªIgnasi Aball¨ª, Fernando Bryce, I?aki Bonillas, Ant¨°nia del R¨ªo, Enric Farr¨¦s, Dora Garcia, Javier Pe?afiel, Juan P¨¦rez Aguirregoikoa, Francesc Ruiz y Oriol Vilanova, entre ellos¡ª, por su inter¨¦s por el libro y los archivos como fuente inagotable de sabidur¨ªa y las ediciones de artistas, son bien diversas.

Cada uno ha dise?ado su propio espacio expositivo en el que se muestran ediciones de cada propias, libros de referencia, dibujos e incluso objetos personales, por lo que cada presentaci¨®n es una obra en s¨ª misma. Vilanova, conocido por su enorme colecci¨®n de postales, muestra los cat¨¢logos de empresas y de objetos editados desde finales del siglo XIX que ha reunido en sus visitas a encantes y mercados de viejo en un expositor met¨¢lico de planos que el visitante puede ir abriendo. Ignasi Aball¨ª expone en la pared, como si fuera un d¨ªptico, dos p¨¢ginas de dos libros en los que aparece la palabra ¡°pr¨®logo¡± y ¡°ep¨ªlogo¡±. I?aki Bonillas re¨²ne en una biblioteca libros de varios autores, fil¨®sofos, artistas, pol¨ªticos o m¨²sicos, y las im¨¢genes de sus frentes, normalmente, despejadas, si no calvas. Francesc Ruiz interviene tambi¨¦n en la biblioteca de la Escola Elisava haciendo que las im¨¢genes de hojas y plantas de una revista acaben invadiendo todas las estanter¨ªas. Fernando Bryce utiliza documentos oficiales y art¨ªculos de prensa sobre el canal de Panam¨¢, mientras que Dora Garc¨ªa muestra todos los libros que ha creado que incluye una serie de carteles con frases realizadas en pan de oro. En otros invita al visitante a que se lo lleven a casa con t¨ªtulos como Steal this book (Robe este libro), mientras que Antonia del R¨ªo elabora una biblioteca a partir de los ejemplares del expurgo.

La instalaci¨®n que est¨¢ m¨¢s cerca de esa biblioteca ideal es la de Clara Boj y Diego D¨ªaz: Data Biography en el que han reunido toda la informaci¨®n generada con sus tel¨¦fonos m¨®viles a lo largo de un a?o en la biblioteca digital de sus aparatos. Tras recuperarla e imprimirla, han generado m¨¢s de 40.000 p¨¢ginas que d¨ªa a d¨ªa, mes a mes, son el reflejo de todo lo que se han ido guardando en la nube, pero hecho obra de arte.

Picazo, adem¨¢s, ha reunido ediciones de artistas singulares para la comisaria de las d¨¦cadas de los sesenta y setenta de gran valor, prohibidas, visitadas solo por bibli¨®filos. En la Reserva de Bibliotecas ins¨®litas se hallan reunidas ediciones de aquellos artistas que en la d¨¦cada de los sesenta y setenta contribuyeron con sus propuestas a dar un nuevo rumbo a las ediciones especiales como libros de Ed Ruscha, Lawrence Weiner, Dieter Roth, Sol LeWitt, James Lee Byars o Marcel Broodthaers. Tambi¨¦n de Valc¨¢rcel Medina, Concha Jerez o Eug¨¨nia Balcells. La muestra estar¨¢ abierta hasta el pr¨®ximo 23 de abril y su cierre coincidir¨¢ con la celebraci¨®n de Arts Libris, la feria de libro de artista por excelencia.