La lucha por la igualdad de g¨¦nero desborda las calles de Barcelona

El feminismo logr¨® este jueves hacerse o¨ªr en las calles de Barcelona con una movilizaci¨®n sin precedentes que se plasm¨® en una multitud de concentraciones a lo largo del d¨ªa. La mayor¨ªa de ellas tuvo lugar por la tarde, cuando 200.000 personas, seg¨²n la Guardia Urbana, marcharon por el Paseo de Gr¨¤cia para protestar contra cualquier tipo de desigualdad de g¨¦nero. La manifestaci¨®n fue el colof¨®n a un d¨ªa que empez¨® con sus principales v¨ªas cortadas y paros en el transporte p¨²blico. El ¨¦xito de las numerosas concentraciones eclips¨® el escaso seguimiento que tuvo la convocatoria de huelga de 24 horas.

Una marea inund¨® el centro de Barcelona en defensa de la igualdad de g¨¦nero y contra la violencia machista, sobrepasando cualquier previsi¨®n de los organizadores. Tanto fue as¨ª que la cabecera tuvo que avanzar varias calles para que pudieran incorporarse a la marcha los centenares de personas que segu¨ªan saliendo de las bocas de metro a las 18.30, cuando la manifestaci¨®n deb¨ªa haber empezado. Fue una marcha con carteles, c¨¢nticos y globos morados. Pero con un claro tono reivindicativo. ¡°Esto no es una fiesta, nos est¨¢n matando¡±, rezaba un cartel en la marcha.

A la manifestaci¨®n, que discurri¨® bajo el lema Ens aturem per canviar-ho tot [¡®Paramos para cambiarlo todo¡¯] acudieron varios representantes pol¨ªticos, entre ellos el presidente del Parlament, Roger Torrent. Pero todos los l¨ªderes, pol¨ªticos y sindicales, quedaron eclipsados por las miles de ciudadanas an¨®nimas que acudieron a la marcha. Su voz se escuch¨® ya de buena ma?ana, cuando varios grupos de piquetes lograron paralizar varios puntos clave de la ciudad de Barcelona.

La capital catalana se despert¨® con cortes en sus principales arterias: la Gran Via, la Diagonal, la avenida Meridiana y las Rondes. Solo hubo un momento de tensi¨®n, cuando los Mossos desalojaron a una treintena de estudiantes que cort¨® el tr¨¢fico en la calle de Urgell. A partir de entonces, las concentraciones se multiplicaron. Al mediod¨ªa, unas 7.500 personas, seg¨²n la Guardia Urbana, llenaron la plaza de Sant Jaume. En esa concentraci¨®n, a la que acudi¨® la alcaldesa Ada Colau, destacaron sobre todo las trabajadoras de la limpieza, las autodenominadas kellys.

La industria tambi¨¦n para

Fue ese sector, precisamente, uno de los que respondi¨® de forma masiva a la huelga de 24 horas, cuyo seguimiento fue m¨¢s bien escaso, seg¨²n las patronales. El paro de todo el d¨ªa tambi¨¦n tuvo un amplio seguimiento en el transporte p¨²blico y los medios de comunicaci¨®n. La programaci¨®n de la radio y televisi¨®n catalanas se vio alterada por la huelga. Al mediod¨ªa, las profesionales de los medios se concentraron en los Jardines de Montserrat Roig bajo el lema Les periodistes fem vaga.

M¨¢s amplio fue el seguimiento de los paros de dos horas. Empresas como Desigual cerraron sus cuarteles generales y todas sus tiendas al mediod¨ªa para unirse a las movilizaciones. Aun as¨ª, salvo excepciones, la mayor¨ªa de los comercios levantaron la persiana, aunque algunos se vieron forzados a cerrarlos por la actuaci¨®n de los piquetes informativos que recorrieron el centro al mediod¨ªa. En cambio, el sector de la industria s¨ª se uni¨® a los paros parciales convocados por los sindicatos. Los trabajadores de Seat, Nissan o Grifols decidieron parar la producci¨®n durante dos horas y arrastraron a miles de empleados de otras f¨¢bricas del ¨¢rea metropolitana de Barcelona a unirse a la movilizaci¨®n.