¡®Cal?otades¡¯ y museos para romper barreras
La asociaci¨®n Ales acompa?a a j¨®venes con discapacidad intelectual en actividades de ocio normalizadas para combatir el estigma
Andreu est¨¢ euf¨®rico. Sonr¨ªe de oreja a oreja y saluda efusivo a sus amigos cuando llega al punto de encuentro, la entrada principal del DHUB, el Museo del Dise?o de Barcelona. Al final se han juntado casi 10. Es s¨¢bado y el cielo encapotado invita a cobijarse. El DHUB es un buen plan. ¡°?Estamos todos? Venga, ?vamos!¡±, anima Raquel Dolado, la monitora que los acompa?a. Es la primera vez que van juntos a un museo. Todos forman parte de la asociaci¨®n Ales, que hace acompa?amiento en actividades de tiempo libre para j¨®venes con discapacidad intelectual.
¡°Solo son un grupo de amigos que van a hacer algo los fines de semana. Cada s¨¢bado elegimos la actividad del s¨¢bado siguiente. Hoy toca museo, pero tambi¨¦n hacemos excursiones, cal?otades, ir al cine¡¡±, explica Raquel. Y as¨ª, ¡°de la forma m¨¢s natural del mundo¡±, se gest¨® el germen de Ales, que ahora cumple 25 a?os. ¡°Todo empez¨® con una chica que ten¨ªa una hermana con S¨ªndrome de Down y se propuso hacer algo con su hermana y los chicos con los que jugaba al b¨¢sket para que no se quedaran en casa¡±. El boca-oreja hizo todo lo dem¨¢s.
Las alternativas de acompa?amiento en el ocio se han multiplicado en 20 a?os. Seg¨²n Dincat, la federaci¨®n de entidades de atenci¨®n a la discapacidad, hay 114 servicios de ocio para este colectivo en Catalu?a. ¡°Las familias lo piden y hay que normalizarlo. El servicio de ocio atiende al 17% de los usuarios, solo superado por los servicios de vivienda y atenci¨®n diurna¡±, concreta Pau Vilaseca, responsable del ¨¢rea de ocio de Dincat.
En Ales, los chicos, con discapacidad media o moderada, se dividen en grupos por edad y afinidad. El de Andreu es el grupo ¡°de los peque?os¡±, como los llaman en Ales, aunque casi todos rondan la veintena. ¡°Fomentamos la capacidad de disfrute y la autonom¨ªa¡±, explica Raquel. La organizaci¨®n celebrar¨¢ su 25 aniversario con una fiesta el 25 de mayo en la Sala Bikini de Barcelona.
Raquel sostiene que se ha avanzado mucho en la lucha contra el estigma, pero ¡°queda mucho por mejorar¡±, advierte. ¡°A¨²n hay situaciones de discriminaci¨®n. La diversidad, lo que no se conoce, es lo que da miedo¡±. Por eso abogan por hacer actividades normalizadas. ¡°Se trata de fomentar el ocio inclusivo, que ayude a acercar la discapacidad a la gente¡±, agrega. Coincide Vilaseca: ¡°Cuanto m¨¢s visibilicemos, mejor. No nos escondamos¡±.
Dincat alerta, no obstante, que quedan muchas tareas pendientes. ¡°El servicio de ocio est¨¢ incorporado a la cartera de servicios sociales pero lo tenemos sin despliegue normativo. No hacen falta m¨¢s servicios, hace falta una financiaci¨®n estable para ellos porque muchas veces terminan funcionando con cuotas dif¨ªcilmente asumibles por las familias¡±, agrega Vilaseca.
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