Mujeres en Primera Persona
Vivian Gornick, Sheela, Virginie Despentes y Marina Garc¨¦s, entre las invitadas a la edici¨®n m¨¢s femenina y feminista del festival que organiza el CCCB
Sheela, la pol¨¦mica exsecretaria y portavoz del maestro espiritual Osho, que la serie documental Wild Wild Country (Netflix) ha convertido en discutible figura medi¨¢tica; Vivian Gornick, la ya octogenaria escritora norteamericana que quiz¨¢ ha descrito como nadie la m¨¢s dif¨ªcil de las relaciones humanas, la que mantienen madre e hijo/a; Virgine Despentes, insobornable escritora francesa feminista (y ex drogadicta, exprostituta y expunk); Carla Sim¨®n, pura sensibilidad hecha directora de cine; Marina Garc¨¦s, la fil¨®sofa de la reflexi¨®n rebelde e insumisa¡ Todas ellas y algunas m¨¢s se desnudar¨¢n emocionalmente en p¨²blico en el particular, singular y quiz¨¢ irrepetible festival Primera Persona, que a partir del viernes inaugura su s¨¦ptima y hasta ahora m¨¢s femenina y feminista edici¨®n en el Centre de Cultura Contempor¨¤nia de Barcelona (CCCB) que lo incuba.
Arrancar¨¢n, sin embargo, el programa (del que el jueves en La Casa Encendida de Madrid hay una avanzadilla con Gornick, el dibujante Tom Gauld y el cr¨ªtico cultural Simon Reynolds) dos de los mejores representantes locales del true crime, g¨¦nero que ¡°no forma parte aqu¨ª, como mucha de la gente que traemos, del mainstream cultural¡±, apuntan con orgullo los comisarios del festival, los escritores Kiko Amat y Miqui Otero. Ser¨¢ una charla entre los periodistas Carles Porta y Joan Maria Oleaque, autores de Tor, tretze cases i tres morts y Des de la tenebra. Un descens al cas Alc¨¤sser, respectivamente, dos de los mejores ejemplos de cr¨®nica e investigaci¨®n period¨ªstica publicados en Espa?a, el primero con regusto al A sangre fr¨ªa de Truman Capote y el segundo, desde un rigor que contrataba ya con el nacimiento de la telebasura. El moderador no pod¨ªa ser m¨¢s oportuno: el productor Ram¨®n Camps (Velvet; Fari?a), que prepara para 2019 una miniserie documental sobre el caso Alc¨¤sser. Tomar¨¢ el testigo uno de los grandes nombres de la convocatoria, Gornick, conocida por su biograf¨ªa de la feminista revolucionaria Emma Goldman, pero apreciada por la delicada exquisitez de sus dos libros de memorias: Apegos feroces y La mujer singular y la ciudad.
Sheela, previa intervenci¨®n del dibujante escoc¨¦s Gauld, quien mejor recoge en sus vi?etas las pulsiones y miedos de bibli¨®filos y biblioman¨ªacos, cerrar¨¢ la sesi¨®n del viernes. ¡°Encarna un fen¨®meno cultura de inter¨¦s innegable; se trata de hacerle una entrevista, no de ponerle una alfombra roja, de que responda tambi¨¦n a las zonas oscuras de su proyecto; el festival es de historias de vida que expliquen c¨®mo son y por qu¨¦¡±, argumentan los directores ante algunas quejas surgidas por la invitaci¨®n a un personaje tan controvertido, al que entrevista el escritor y guionista Roberto Enr¨ªquez, alias Bop Pop. Sheela cumpli¨® 29 meses de c¨¢rcel en EEUU como consecuencia de los diversos y graves conflictos generados a ra¨ªz de la creaci¨®n de una descomunal comuna (260 kil¨®metros cuadrados) en un pueblecito de Oreg¨®n dedicada al culto a Bhagwan Shree Rajneesh. Conspiraciones, poshippismo, choque de culturas y fascinaci¨®n por la opulencia capitalista mezclada con la espiritualidad subyacen en un conflicto que la serie documental de Netflix ha convertido en fen¨®meno global.
Quiz¨¢ para compensar emociones, la primera sesi¨®n del s¨¢bado arrancar¨¢ con la conversaci¨®n intimista que se espera, vista su filmograf¨ªa, de dos j¨®venes y refulgentes y premiadas cineastas catalanas, Sim¨®n (Estiu 1993) y Elena Mart¨ªn (J¨²lia Ist), quiz¨¢ no tan alejadas a la hora de reflejar un mundo interior donde predominan detalles que suelen traducirse en escenas aparentemente intrascendentes, pero imborrables. Un tono m¨¢s combativo lo generar¨¢ el encuentro entre Garc¨¦s --aut¨¦ntica creadora de filosof¨ªa de guerrilla (Nueva ilustraci¨®n radical), capaz de conectar desde el yo singular y plural el movimiento okupa de 1996 con el 1-O (Ciudad Princesa)¡ª y el estadounidense Ishmael Reed, veterana pieza capital de la contracultura, ensayista que ha recorrido de Obama al hip hop o el jazz, del que The Roots ha usado textos suyos como letras y que como novelista (Mumbo Jumbo) ha sido canonizado por Harold Bloom.
Un escal¨®n m¨¢s en el tono contracultural lo aportar¨¢ el ingl¨¦s Reynolds, que aborda ¡°un g¨¦nero ninguneado, calificado de banal, pero del que sistem¨¢ticamente se quiere borrar su vertiente futurista y muy pol¨ªtica¡±, seg¨²n los directores, como es el glam-rock. La ¨²ltima sesi¨®n ser¨¢ la que concentrar¨¢ el discurso m¨¢s iconoclasta y rompedor sobre el papel de la mujer y el movimiento feminista. Arrancar¨¢ con el intercambio de pareceres entre la sediciosa pintora, anarcofeminista y exmiembro de la banda Crass, Gee Vaucher, y la escritora barcelonesa Brigitte Vasallo, tenaz en su cr¨ªtica a la islamofobia de g¨¦nero y su defensa del poliamor. La traca final la pondr¨¢ Despentes, que a trav¨¦s de su ensayo autobiogr¨¢fico y feminista Teor¨ªa King-Kong y la trilog¨ªa novel¨ªstica Vernon Subutex ¡°es de esas escritoras que parten de un submundo, pero que se han hecho inmensas, explicando como nadie con su vida y su ficci¨®n una sociedad entera, en su caso la fractura de la comunidad francesa actual¡±, seg¨²n Amat y Otero. Por expreso deseo de Despentes, su amiga la cantante madrile?a Christina Rosenvinge leer¨¢ fragmentos de esas obras. Todo, claro, en Primera Persona.
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