El pa¨ªs de las sonrisas

Ayoub tiene nueve a?os y acaba de conocer un pa¨ªs que no quiere abandonar. Est¨¢ en Madrid, su ciudad, tras el puente met¨¢lico que dise?¨® Dominique Perrault para cruzar el r¨ªo Manzanares. Es un lugar repleto de ni?os en el que ha jugado, re¨ªdo y so?ado con el futuro que le espera. ¡°Aqu¨ª les decimos que no hay nada imposible, que pueden alcanzar lo que se propongan¡±, explica Trinidad Castillo, delegada de la Obra Social de La Caixa. La entidad ha celebrado este s¨¢bado en la capital el D¨ªa del Voluntario con una jornada festiva en la que han participado 700 ni?os en situaci¨®n de vulnerabilidad.

Uno de cada tres menores en Espa?a est¨¢ en riesgo de pobreza. Es el segundo pa¨ªs europeo con mayor tasa de pobreza infantil. Esta situaci¨®n hace muy complicado que los ni?os se desarrollen plenamente, que tengan oportunidades para descubrir sus talentos y que alg¨²n d¨ªa puedan dedicarse a lo que les gusta. Por eso el lema de este a?o, el d¨¦cimo que se celebra esta fiesta, ha sido De mayor quiero ser. ¡°Es dif¨ªcil curar la herida, pero podemos poner una tirita¡±, afirma Castillo sobre la complejidad de sacar a estos chicos de la pobreza. Y a?ade: ¡°Aqu¨ª no venimos a dar pena, sino a divertirnos¡±. Un objetivo que se ha cumplido con creces durante las seis horas que ha durado el evento.

¡°De mayor quiero ser futbolista¡±, revela Rayan, un ni?o de seis a?os de origen marroqu¨ª. Lo ha anotado en la pizarra gigante de la explanada donde se han desarrollado los juegos. Su favorito era chutar a porter¨ªa en una especie de castillo flotante. Hab¨ªa que guardar turno porque todos quer¨ªan meter gol. Qui¨¦nes s¨ª lo han hecho, por la escuadra, han sido los 150 voluntarios que dedican su tiempo libre a los dem¨¢s. Los verdaderos protagonistas de la jornada, reconocibles gracias a los polos de color azul que vest¨ªan. ¡°Sin ellos ser¨ªa imposible la gran labor que se hace durante todo el a?o con las asociaciones¡±, reconoce Julia Prats, de la Fundaci¨®n La Caixa.

Superar obst¨¢culos

Uno de esos h¨¦roes an¨®nimos es Ernesto L¨®pez, de 56 a?os y empleado de la entidad: ¡°Como voluntario sueles recibir m¨¢s de lo que das. Es muy gratificante trabajar con ni?os y discapacitados porque, aunque tienen muchas dificultades, siempre est¨¢n sonriendo¡±. L¨®pez se ha encargado de la yincana en la que j¨®venes como Marta han debido superar multitud de obst¨¢culos. Nada nuevo para ella. Hab¨ªa talleres para todos los gustos, como el de percusi¨®n, en el que los participantes han tenido que construir tambores con latas de pintura. Han concluido con una batucada que ha concentrado las miradas de quienes disfrutaban de la soleada ma?ana en Madrid R¨ªo.

En el taller de dibujo los chicos han dado rienda suelta a su imaginaci¨®n. Las mejores creaciones han sido premiadas en el escenario central. Entre los agraciados, Yaretzi, de dos a?os y medio. Sue?a con ser bailarina. ¡°Estos ni?os merecen sonre¨ªr porque no viven una situaci¨®n agradable en casa¡±, ha asegurado Blanca, la mam¨¢ de Yaretzi, mientras las chicas de la Asociaci¨®n Iceas, de Pan Bendito, esperaban para bailar la pieza de reggaet¨®n con la que se han llevado el concurso de baile. Uno de los talleres m¨¢s solicitados ha sido el de jardiner¨ªa, donde los peque?os han acabado con todo el g¨¦nero. Se han entregado plantas de lechuga, col, tomate y cebolla. ¡°Hemos ense?ado a montar un minihuerto en casa. A la mayor¨ªa no les gustan las verduras ni las hortalizas. Quiz¨¢s si las siembran ellos, se las coman¡±, sostiene Melchor Aguilera, su responsable.

A pocos metros pasa, cant¨¢ndole en ingl¨¦s al grupo de chicos que acompa?a, la voluntaria Patricia Dosal, de 21 a?os: ¡°Es un d¨ªa muy bonito porque los ni?os salen de su entorno y hacen cosas que normalmente no hacen¡±. Muchos de ellos jam¨¢s hab¨ªan visto a un mago o a gigantes. Lo de menos es que fuesen sobre zancos. Las actividades del D¨ªa del Voluntario de La Caixa se han celebrado tambi¨¦n en otras 40 ciudades espa?olas. Desde su constituci¨®n, hace una d¨¦cada, 10.000 personas han dedicado su tiempo a atender a m¨¢s de 1,2 millones de personas vulnerables. Solo en Madrid, el a?o pasado 921 voluntarios como Carmen Quilmes ayudaron a 18.400 beneficiarios a trav¨¦s de 266 actividades.