Marc Soler: ¡°En el equipo me ven comer y se asustan¡±
Es un ciclista distinto, tan alto como Indurain, completo como los grandes campeones. Este a?o ha ganado la Par¨ªs-Niza y debutado en el Tour
Es s¨¢bado, 28 de julio del 2007, y un joven ciclista espa?ol est¨¢ a punto de coronarse en la bella Angoul¨ºme, edificios majestuosos, el r¨ªo Charente, olor a lavanda. Espa?a est¨¢ enganchada al televisor. Niega la siesta, tan agradecida una tarde ociosa de verano. Pero la ocasi¨®n lo exige. Alberto Contador, 24 a?os, est¨¢ a punto de llevarse el Tour m¨¢s apretado de la historia. Solo 23 segundos, los que logra como margen para lucir el maillot amarillo, tienen la culpa de tanta expectaci¨®n. Claro que no en todas las casas el inter¨¦s es compartido. En Vilanova i la Geltr¨² un padre y su hijo discuten por el mando a distancia. ¡°Cambia y pon la pel¨ªcula del s¨¢bado por la tarde¡±, le ped¨ªa el chico, de 13 a?os.
¡°Mira, Contador¡¯, me dec¨ªa mi padre. Yo no sab¨ªa ni qui¨¦n era. Y al final, he acabado compitiendo con ¨¦l¡±, recuerda hoy aquel chaval. Es Marc Soler, tiene 24 a?os y es la gran revelaci¨®n del ciclismo espa?ol. Con 21 a?os, cuando fich¨® por el equipo ciclista Movistar, gan¨® el Tour del Porvenir, igual que Miguel Indurain, una carrera internacional ¡°que lo mostr¨® al mundo como un corredor diferente¡±, se?ala ?ngel Edo, exciclista y representante de Soler. El a?o pasado acab¨® tercero en la Volta a Catalunya. Y el pasado marzo estren¨® palmar¨¦s con una victoria en la Par¨ªs-Niza, como lo hizo Contador aquel verano en el que ¨¦l prefer¨ªa echarse la siesta a mirar la grand boucle.
Soler sigue hoy sin perdonar la siesta, que a menudo se alarga ¡ª¡°A m¨ª, lo de dormir me gusta mucho; con dormir y comer ya vivir¨ªa¡±, r¨ªe¡ª, pero que solo puede concederse cuando no compite. Su vida ha cambiado mucho en diez a?os. Ahora es el quien est¨¢ en la tele y trata de evitar las (odiosas) comparaciones. Con Indur¨¢in. Con Contador. Porque un buen d¨ªa su amigo Albert, compa?ero del equipo de f¨²tbol del pueblo, le invit¨® a salir en bici. Y Marc decidi¨® cambiar de deporte. ¡°En el equipo me exig¨ªan mucho y yo lo que quer¨ªa era pas¨¢rmelo bien. Si no entrenabas o no corr¨ªas lo suficiente, no jugabas. En el club ciclista, no. No nos dec¨ªan ¡®tienes que hacer dos horas de bici¡¯. ?bamos all¨ª, hac¨ªamos diez minutos con la bici, nos pon¨ªamos a correr...¡± Y as¨ª, acab¨® jugando a f¨²tbol sala en el instituto y haciendo ciclismo en la escuela de Paco G¨¢lvez, en Vilanova, con una bicicleta que le prest¨® el mismo club.
Soler: ¡°Dicen ¡®hoy etapa tranquila¡¯, pero si no est¨¢s en el Tour
no sabes qu¨¦ es¡±
Han pasado los a?os y se ha dado cuenta de que el ciclismo es muy exigente: ¡°Quiz¨¢ me equivoqu¨¦, pero como me gusta no es problema¡±. Hoy entrena en las monta?as de Andorra, donde reside desde hace a?o y medio. Echa de menos la playa, pero est¨¢ en terreno conocido: sus padres ten¨ªan un apartamento en Canillo, donde iba a esquiar en invierno.
Fin¨ªsimo y espigado (mide 1,86m, pesa 68 kilos), hace esfuerzos por regirse a la dieta. No tanto por los alimentos prohibidos ¡ª¡°S¨¦ que no me puedo comer una bolsa de patatas fritas¡±¡ª, sino por la cantidad: ¡°En el equipo me ven comer y se asustan; siempre me dicen que soy el que m¨¢s come, con diferencia. Se me ve una monta?a dentro del plato. Pero es que me gusta mucho comer. Sano, pero cantidad¡±, confiesa.
Y aunque reconoce que de tanto subir puertos de monta?a llega a odiarlos ¡°a veces¡±, tambi¨¦n sabe disfrutar del paisaje. Se ha convertido en un ciclista muy completo, que pese a su estatura no necesita encomendarse a los terrenos planos. ¡°Soy bueno en todos los terrenos. Pero no soy el mejor. No ganar¨¦ una etapa de alta monta?a, probablemente; ni la contrarreloj. Pero, en cambio, estar¨¦ entre los diez primeros en ambas. Ese equilibrio es el que hace que est¨¦s ah¨ª¡±.
¡°Ah¨ª¡± lo ha llevado Eusebio Unzue, director del equipo Movistar, que si en marzo le cedi¨® todos los galones en la Par¨ªs-Niza por la ausencia de los l¨ªderes (Quintana, Valverde y Landa), en julio le hizo debutar a la sombra de aquellos en el Tour. Soler iba a aprender y lo primero que aprendi¨® es que el Tour es otra cosa. ¡°Es la carrera que m¨¢s vende y esa presi¨®n se nota dentro del equipo, dentro de uno. Nadie quiere perder nada¡±. Tambi¨¦n aprendi¨® a no dar nada por hecho. ¡°Muchos dicen ¡®hoy toca etapa tranquila¡¯, pero si no est¨¢s all¨ª no sabes lo que es. Hasta en el autob¨²s lo decimos: ¡®Hoy se ir¨¢ una fuga y los sprinters tirar¨¢n¡¯. En teor¨ªa, eso es una etapa tranquila. As¨ª que te relajas. Y entonces, llegas a la meta y dices: ostras, 45km/h de media. Quiz¨¢ es la etapa en la que m¨¢s has sufrido. Te crees que ese d¨ªa est¨¢s ah¨ª de vacaciones. Y, no¡±.
Soler no fue de vacaciones al Tour. Fue a interiorizar c¨®mo ganarlo alg¨²n d¨ªa.Esperar¨¢ el momento pacientemente. ¡°Y no es que sea paciente, pero cuando hay tres corredores que han demostrado mucho m¨¢s que t¨², los tienes que respetar¡±.
Una d¨¦cada despu¨¦s
Nombre y edad: Marc Soler, Vilanova i la Geltr¨². 24 a?os.
Si no fuera lo que es le hubiera gustado ser: "La verdad es que no me lo he planteado nunca. Siempre he ido tirando. Pero seguro que ser¨ªa algo relacionado con el deporte. No me puedo estar quieto. Y el deporte me cansa y me relaja".
Se va de vacaciones a "casa, b¨¢sicamente. No soy mucho de salir. Y si lo hago es para dar una vuelta por la monta?a. Mis vacaciones son en noviembre, as¨ª que prefiero quedarme en Andorra tranquilo. Comer y dormir".
Dentro de 10 a?os trabajar¨¢ en "alg¨²n equipo de ciclismo, supongo. O en algo relacionado con el deporte. La verdad es que ahora solo pienso en mejorar".
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