La rocambolesca huida de un (presunto) traficante de ¡®mar¨ªa¡¯

Ha sucedido en la tierra de las manzanas, pero el suceso no tiene nada que ver con la sidra. La nota oficial explica que un hombre de 32 a?os ha sido detenido por la Ertzaintza en posesi¨®n de 4,2 kilos de marihuana despu¨¦s de que sufriera un accidente de circulaci¨®n. Hasta ah¨ª podr¨ªa haber sucedido en cualquier sitio y sin demasiado inter¨¦s. La historia, sin embargo, gana mucho, cuando se baja al detalle.

La cadena de desprop¨®sitos sucedi¨® el jueves por la tarde, en torno a las 17.00 horas. Dos turismos colisionaron en la AP-8 a su paso por la localidad guipuzcoana de Zarautz y uno de ellos, un Volkswagen Golf, se dio a la fuga. Posiblemente su conductor entr¨® en p¨¢nico y empez¨® a dise?ar respuestas y acciones imposibles para convertir en inocuo lo que llevaba en el maletero, cuatro kilos de marihuana.

La huida responde a ese patr¨®n. Precipitaci¨®n, poca "profesionalidad" y chapuzas varias, una detr¨¢s de otra. Tras el accidente de Zarautz, el presunto traficante tuvo todav¨ªa tiempo de colisionar contra otro veh¨ªculo y contra una patrulla policial, ha precisado el departamento vasco de Seguridad, antes de que los agentes le perdieran temporalmente de vista.

En torno a 45 minutos despu¨¦s, y fruto de una batida que poco a poco iba en aumento, la Ertzaintza localiz¨® el Volkswagen Golf en el camino Larraburu de Astigarraga. La se?al de alerta fue la columna de humo que se ve¨ªa desde varios kil¨®metros de distancia. El detenido hab¨ªa decidido acabar con las pruebas que le incriminaban y le prendi¨® fuego al coche. Los bomberos tuvieron que apagarlo mientras otros agentes buscaban al conductor. El plan del delincuente era bueno. "Quemo el coche, me escondo y cuando los polis se marchan, vuelvo andando"... No le funcion¨®.

La Ertzaintza le encontr¨® sobre las 19.00 horas oculto y camuflado tras el muro de una edificaci¨®n abandonada en el municipio de Astigarraga, uno de los lugares con mayor n¨²mero de sidrer¨ªas por metro cuadrado de todo Gipuzkoa.

Pese a que tuvo una larga hora entre el momento en que prendi¨® fuego al coche y le localiz¨® la polic¨ªa vasca, la versi¨®n que ofreci¨® no ten¨ªa ni pies ni cabeza. El sospechoso explic¨® a los agentes que hab¨ªa huido del accidente y hab¨ªa prendido fuego al coche porque no ten¨ªa seguro y le quedaban pocos puntos del carn¨¦ de conducir, al tiempo que asegur¨® que el veh¨ªculo era de un allegado suyo y que hab¨ªa tirado las llaves cerca de donde lo hab¨ªa abandonado.

Todos, los agentes y el detenido se acercaron al lugar donde el coche ya solo humeaba y comenzaron a buscar las llaves. L¨®gicamente el detenido orientaba a los agentes en una direcci¨®n. El instinto policial les dec¨ªa que ten¨ªan que buscar en direcci¨®n contraria. Poco despu¨¦s un ertzaina encontr¨® entre los matorrales una caja con bolsas de marihuana que sumaban un peso de 4,2 kilos. La patrulla le detuvo por tr¨¢fico de drogas. Ten¨ªa 855 euros en su poder. Ni siquiera intent¨® aquello de que era para consumo propio. El arrestado cuenta con tres detenciones anteriores relacionadas con el tr¨¢fico de drogas.