¡°Internet se est¨¢ cargando el rock duro¡±
El m¨²sico Ramiro McTersse dej¨® la bater¨ªa hace 20 a?os, pero ha seguido vinculado a la escena 'hardcore' a trav¨¦s de su programa de radio 'Bandera negra'
Ramiro McTersse (Madrid, 1975) solt¨® las baquetas hace 20 a?os, pero sab¨ªa que iba a ser algo temporal. Cuando Hechos Contra el Decoro, donde tocaba la bater¨ªa, anunci¨® su disoluci¨®n, se fue a girar por el mundo con la compa?¨ªa de percusi¨®n israel¨ª Mayumana. Despu¨¦s, con el Circo del Sol. Ahora, McTersse imparte gesti¨®n cultural en varias universidades. Tambi¨¦n coordina y locuta, desde hace seis temporadas, el programa de Radio 3 Bandera Negra, que visibiliza bandas subterr¨¢neas (de hardcore, metal y punk) de toda la geograf¨ªa espa?ola. Adem¨¢s, acaba de dirigir el documental Bandera Negra: KM 0, estrenado en el festival In Edit y que recoge sus descubrimientos musicales. Con algunos miembros de Hechos Contra el Decoro ¡ªentre los que se incluye el concejal del Ayuntamiento Nacho Murgui¡ª ha lanzado un disco bajo el nombre de Democracy, con marcado tono contestatario y que transita por el hip hop, el drum and bass, el flamenco o el trip hop.
Ahora tiene familia y 20 a?os m¨¢s, supongo que el ambiente en los camerinos es diferente.
Mucho, no tiene nada que ver. Ahora, apenas entra una lata de cerveza (r¨ªe). Obviamente, no somos tan cr¨¢pulas como antes.
?En qu¨¦ ha cambiado?
Me interesan otras cosas. En este tiempo he viajado por Asia, y me he acercado al budismo y el hinduismo. Alquil¨¦ mi casa del centro y vivo en una mucho m¨¢s grande en el campo, con mi pareja y mis hijos. Por las ma?anas medito. Y estoy en un proyecto de sanaci¨®n vibracional, esto es, a trav¨¦s de la m¨²sica.
?Qui¨¦n va a sanar el estado de las bandas de metal, hardcore o punk?
Cuando vas a un concierto, no hay m¨¢s de 60 personas. Y en un festival, el p¨²blico potencial est¨¢ interesado por otras bandas. El nuevo aficionado se etiqueta m¨¢s: es complicado ver un heavy en un concierto de rock duro. La escena est¨¢ mucho m¨¢s fragmentada que antes.
?A qu¨¦ se debe?
Internet se ha cargado los movimientos asamblearios en los centros culturales, las casas okupas o los gaztetexes, donde ten¨ªan cabida este tipo de conciertos. La gente iba, independientemente de qui¨¦n tocara porque lo principal era el encuentro, culturizarse, y, por supuesto, escuchar m¨²sica. Pero en general ibas a ver lo que te encontrabas. Ahora, los j¨®venes van a ver a un grupo en concreto porque ya saben d¨®nde y cu¨¢ndo toca por las redes sociales. Eso es lo que fragmenta la escena.
Esta m¨²sica, ?sigue igual de politizada?
El hardcore y el metal han creado universos propios, no tienen un car¨¢cter pol¨ªtico ni social definido. Pero en el punk es impensable que haya bandas que no expresen sus ideas, su denuncia. Todo lo contrario que el indie, que lo respeto mucho, pero dedica sus canciones a cosas m¨¢s banales.
?Se puede ser en Espa?a punk y de derechas?
No es habitual. S¨ª me he encontrado grupos de hardcore que tiran hacia ideolog¨ªas nacionalsocialistas. Pero claro, no tienen cabida ni en mi programa de radio ni en el documental. Trascienden lo puramente musical, y confrontan nuestro sentido de la ¨¦tica y la moral.
?Cu¨¢l cree que es el secreto que de lleve seis temporadas en antena?
Empezamos m¨¢s puristas, con hardcore puro, pero ahora es un escaparate donde caben todos los sonidos, siempre que sean distorsionados, claro. Tambi¨¦n dedicamos espacio al c¨®mic. Y damos un papel muy importante a la mujer, tenemos muchas colaboradoras, buscamos la paridad.
?Tambi¨¦n hay machismo en este tipo de m¨²sica?
Cuesta ver a chicas dentro de estos estilos, pero las hay. Bones of Minerva est¨¢n triunfando en el extranjero. Pero hay que seguir luchando: hay mucho talento femenino y salimos ganando todos. Alg¨²n d¨ªa dejaremos de hablar de esto; cuando eso ocurra se, se habr¨¢ normalizado.
Y a los 20 a?os, resucit¨®
Cinco miembros de la extinta Hechos Contra el Decoro se han juntado para fundar Democracy, banda con un sonido caleidosc¨®pico y una tem¨¢tica: la denuncia social. ¡°Despu¨¦s de pasar por un gigante como el Circo del Sol, decid¨ª volver a mis or¨ªgenes. A la carretera. A batirme el cobre en la m¨²sica¡±, dice McTersse.
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